Hola a tod@s. Mi problema es el siguiente:
Estoy con un chico desde hace unos seis meses. Al principio tenía mis dudas sobre lo nuestro, estuve comiéndome la cabeza y tras unos meses pensando si le quería ó no, no lo tuve claro, pero ahora sé que no le quiero.
Él me agobia muchísimo... y por un cúmulo de circunstancias no le puedo dejar. Él insisió mucho en que saliéramos, y lo que al principio era un "rollo" se ha convertido en una relación formal.
No sé si será que él es demasiado romántico y enamoradizo (tanto que me agobia) ó no sé qué, pero me siento atrapada cuando estoy con él. No me lo suelo pasar bien y tampoco me atrae en ningún sentido.
Él es un chico muy agradable, pero como amigo. No como algo más. Soy su primera novia y se le nota muy verde para todo. No le quiero hacer daño, pero así me lo estoy haciendo a mí misma... el caso es que, como dije antes, no le puedo dejar.
Además, cada vez que se siente molesto conmigo, ó cada vez que discutimos, en lugar de hablarlo conmigo ó de decirme qué le molesta de mi comportamiento, él lo que hace es acudir a una amiga que tenemos en común (de la cual estuvo muy enamorado) y ella viene a mí y me amonesta, diciéndome que no le haga daño etc.
Esto me hace sentir muy miserable y dolida. Y a mi cabeza llegan las siguientes preguntas: ¿si tanto me quiere (como él mismo afirma) por qué no tiene el valor suficiente como para decirme a la cara lo que le ocurre conmigo? ¿por qué la amiga que tenemos se tiene que meter en lo que no le importa?
Si a esto le sumamos que es muy enamoradizo, que le entran las mujeres por los ojos, que simplemente con saludarle ya le has enamorado... Tampoco me hace sentir muy bien saber todo esto (por terceras personas): prácticamente todo mi círculo cercano de amistades femeninas han estado en algún momento en su corazón. Esto me hace llegar a pensar que yo sólo soy la tonta de turno que le hizo caso en su momento, se lo sigo haciendo y como le presto atención, él cada día está más loquito conmigo...
El problema viene cuando, harta de todo, llamo a mi ex (con el que salí interrumpidamente durante 2 años y medio y ahora está pasando por un mal momento familiar y no tiene novia) y le cuento mi problema. Quedamos al día siguiente en su casa y la cosa se caldeó bastante pero no hicimos nada (aunque las tentaciones no faltaron por ninguna de las dos partes). Es más, cuando él me pidió un beso, yo se lo denegué porque aunque no quiera al otro chico, tampoco quiero ser una falsa.
No sé qué hacer. De momento no le puedo dejar y las circunstancias que envuelven a esta decisión involuntaria están allí.
Por otra parte, cuando llegue el momento, no sé cómo afrontarlo ni qué escusa ponerle, porque si le digo la más absoluta verdad sé que le haré daño y eso es lo último que quiero...
La pregunta es: ¿le he siendo infiel a mi novio cuando fui a ver a mi ex? Ciertamente, no me siento culpable porque no hicimos nada, pero... con tan sólo pensar en otra persona o ir a verla, ¿ya estoy siendo infiel a este chico?