Ni deberias de pensarlo
En volver a perdonarla, si ya es la segunda vez que te falla, no merece que la perdones. El que esté de por medio la familia es lo menos que debería de importarte, pues eres tú el que está casado con ella. Piensa en que si de verdad te quisiera no te hubiera traicionado, ni te hubiera faltado el respeto, ni hubiera defraudado tu confianza. Además si la perdonaras, pregútatae ¿si volvería a ser todo igual, como si nada hubiera pasado? y ¿podrías volver a confiar en ella?, o se comvertiría tu vida en un infierno de dudas y desconfianza. Hiciste mal en amenazarlo a él, pues con eso nada lograrás, ya que la primera que debería de respetarte es tu esposa, si es ella la que te debe lealtad y respeto, pues ella es la que está casada contigo. Pero piénsalo, analízalo, y toma la decisión que te haga sentir mejor y con la que crees que te podrás sentir tranquilo y poder algún día volver a ser felíz.