Hola. Os escribo una consulta que llevo meses demorando.
Hace diez meses conocí a una chica. Encajamos bien, nos reíamos y se notaba que había atracción por las dos partes. Así que al poco le pedí salir. Ella, de buena gana, me respondió rápido que sí.
Entre septiembre y diciembre del año pasado conseguimos quedar dos veces; debido a su poco tiempo libre. Desde entonces no nos hemos vuelto a ver. A pesar de que hablamos todas las semanas. Le ofrezco volver a quedar y ella, siempre con sonrisas me dice que sí. Y llegado el momento no puede. Tiene trabajo; o tiene que quedar con sus amigos; o tiene visitas familiares; o de pronto está de vacaciones.
Además, como nota significatica, soy yo el que escribe siempre. Quien empieza la conversación siempre. Y con siempre me refiero a cada tres-cuatro días para no marearla.
Yo entiendo que es un problema de prioridades. Dice que sí pero al final nunca puede. Me dice fechas concretas, reservo mi tiempo para ella y casi a última hora se cancela todo. Es frustrante.
Más de una vez le he dicho que si no está interesada que lo diga sin miedo. Y a los pocos minutos responde que sí lo está, pero no tiene tiempo. Y empieza una sesión de coqueteo.
Ella es muy trabajadora (obviamente), muy simpática, divertida y entregada a su gente. No creo que pueda ser cuestión de tenerme ahí por subirle el ánimo cual "pagafantas" (odio esa palabra).
A pesar de sus "quiero pero no puedo", dos veces en diez meses es demasiado poco y creo que suficiente para pensar en cortar esto. No es justo tenerme esperando sin sacar cinco minutos, cuando vivimos a treinta segundos de distancia.
La semana pasada estuvo de vacaciones. Me prometió quedar esta semana. Le pregunté el domingo y me dijo que me avisaría sobre sus horarios lunes... Ayer le tuve que preguntar yo.
Sé que lo que que debería hacer es cortar con esto, pero quiero agotar todos mis recursos; ella me gusta mucho. Pero su actitud no ayuda absolutamente nada. Por eso os escribo este churro. ¿Cómo creéis que debería actuar?
Muchas gracias!