Leyendo los temas del foro veo como una constante que se hable de la infidelidad como de una actitud egoísta.
No dejo de estar de acuerdo con esa interpretación, porque se engaña a la pareja y no se le otorga la oportunidad de tomar decisiones sobre la vida en pareja.
Pero hay otra cuestión:
Generalmente la excusa de las personas infieles es que se ha perdido el incentivo y se adueña de la relación la monotonía y el aburrimiento, llegando hasta a responsabilizar a la pareja de no cubrir las expectativas afectivas y que todo eso induce a que otra persona cubra esas falencias.
Ante tal situación y si uno descubre que su pareja ha optado por ese camino en vez de plantear la situación claramente ¿no actuaría en forma egoísta si le exige a la persona que es infiel que deje de mantener esa otra relación tan gratificante?.
Soy de la idea, y la he puesto en práctica oportunamente, que el obstinamiento en mantener una relación luego de una infidelidad, salvo excepciones muy limitadas, implica un desgate anímico que hasta conduce a un maltrato hacia la persona infiel que esta acepta en aras de no perder lo que ha tardado años en construir, la familia.
También la persona engañada trata de sobreponerse por ese motivo, no es fácil dejar de lado la relación con hijos, en caso haberlos, y dilapidar esfuerzos realizados para conseguir bienes materiales para la comodidad del hogar.
Un/a amante no cae como maná del cielo, hay todo un proceso de maduración entre dos personas que lleva a que se involucren en ese tipo de relación, proceso que a su vez va minando la que existe dentro de la pareja de la persona infiel.
Y eso no se recupera, por más esfuerzos que se hagan, porque el amor es una cuestión de sentirlo y no de intentar amar.
Si la opción del divorcio no es viable por distintos factores, ello no es impedimento para buscar una forma de mantener la familia y separar la pareja.
Es posible y es lo que hemos hecho con mi esposa luego de su infidelidad.
Sin rencores ni odios, que solamente conducen a no poder mantener una relación familiar civilizada y hasta armoniosa.
Tal vez lo único que me ha sorprendido de esta situación ha sido que en determinado momento mi esposa me comentó que se había decepcionado porque yo no había luchado por nuestra relación, pero entiendo que es una mujer inteligente y que si tomó en su momento la decisión de ser infiel sus motivos eran válidos.
Saludos.