Hay veces que pasan cosas sin saber en realidad por qué. Ese día hacía un calor infernal, amaneci sudada y con ansias de sexo, jamás me había sucedido, sin embargo no podía sacarme la idea de la mente. Tomé una ducha fria a ver si así conseguía apagar la sed que me comía por dentro.
No lo logré, intenté masturbarme, pero tampoco lo logré. Todo lo que veía me sugería sexo, las verduras, mis cremas, mi ropa , todo. Decidí salir y sentarme en las gradas de la escalera fuera del edificio donde vivo. No corría una gota de aire, y mi desesperación aumentaba. Mi vista se dirigió a un par de perros que copulaban frente a mi,,, mentiría si dijera que no desee que fuera yo,, veía jadear a la perra, y su lengua humeda goteaba, yo deseaba ke me lambieran y me cojieran asi.
Me di cuenta que estaba muy mojada, mis pezones duros, y mi boca semi abierta, asi estaba cuando uno de mis vecinos entró al edificio, pude sentir su mirada sobre mis pechos, el es un hombre maduro, sin embargo en ese momento, mi mirada busco sus ojos y mi mordi mis labios. Fue suficiente, no cruzamos ni una palabra, me hizo un gesto y lo seguí a su departamento. Al cerrar la puerta, me tomó por la espalma y apretó su cuerpo al mio, pude sentir la dureza de su miembro, y un gemido escapó de mi. Sus brazos fuertes me cogieron, y sus manos desesperadas y firmes desgarraron mi blusa, y apretaban mis senos al ritmo que el rozaba su miembro a mi cuerpo.
Con fuerza me desgarró el short, y quedé desnuda en sus brazos, sin soltarme, se sacó sus pantalones y pude sentir su miembro duro y erecto puesto entre mis nalgas, su mano alternaba entre mi vagina , que chorreaba y mi ano, yo gemía de placer y deseo, entonces, bruscamente, me tiró al piso, me puso en cuatro, abrió mis nalgas e introdujo su verga gruesa en mi ano, primero un golpe y luego el otro, grité de dolor y placer al mismo tiempo, me apretó mi vientre contra si, y me dejó clavada entera a su cuerpo.
Luego empezó a moverse con rapidez, mientras sus dedos se metían en vagina. Luego empezó a alternar, en mi ano y en mi vagina, yo deliraba de placer.
Después , me soltó me dio vuelta y me tumbó de espalda, se posó sobre mi, abrió mi boca y me metió su verga apretó mi cabeza hacia si, y acabó en mi boca inundandola con su semen.
Al llegar a mi departamento, mientras me duchaba para enfriarme, pensé en lo que había sucedido y me di cuenta que me porte como una perra en celo,,,, Pero saben que, me fascinó.