Tengo los ánimos por los suelos...
Lo que debía haber sido mi primer día de prácticas como profesora lleno de alegría, se ha convertido en un desastroso primer día.
Os explico. Hoy he empezado mis prácticas en un instituto de Secundaria. Es mi primer año de prácticas, y la docencia no está entre las funciones de este primer año de prácticas. En su lugar rotaré por las clasesobservaré la actuación de los docentes y apoyaré, pero no participaré en ninguna exposición hasta el final de las prácticas.
Fui a la sala de estudio/biblioteca a buscar información necesaria, siendo yo la única que se encontraba allí, ya que la biblioteca solo se abre en horario de recreo ante la presencia del profesor de guardia.
A la hora del recreo comienzan a entrar alumnado y empiezan a situarse en los ordenadores que hay para su uso y situados en una salita contigua (en la que yo me encontraba) a la sala de estudio. Yo esperaba que el profesor de guardia llegara de un momento a otro pero éste no llegaba. La situación ya era insostenible, ya que se apelotonaban frente al ordenador para navegar por internet.
Ante tal situación y viendo que por más que les decía que no se apelotonaran frente el ordenador, decidí que no debian estar alli y les pedi que dejaran los ordenadores. Me sentí invisible ante ellos, porque pasaban realmente de lo que les dijera. Me decían que ellos acostumbraban a entrar alli en el recreo (luego supe q no era cierto, que solo lo hacian si el profesor de guardia les dejaba).
Un profesor entró y muerto de la risa me dice que no tienen que estar ahí y, les dice que se tienen que ir. Ellos pasaron igualmente de este profesory le decian que tal o cual profesor sí les dejaba. Y cogió y se fue.
Lo peor ha sido que me he sentido como si fuera una niña pequeña de la que se ríen, no he inspirado respeto y me he sentido vacilada. Con algunos sí, pero el macarrilla de la clase me habló mal y los compañeros al verle actuar así se reían de la situación. Fue una situación muy tensa, hasta el punto que pensé que el tipo terminaría por darme un empujón como mínimo.Le decía que se levantara y él me decía que no.Al final terminó por irse, pero hablándome muy mal.
Todo esto me ha hecho dudar de si valgo como docente porque si un niñato es capaz de hacerme sentir así como será ante 20 o 30 alumnos.
Ahora tengo temor de ir al instituto mañana, porque pienso que se van a reír de mí o que se habrán puesto a comentar entre los alumnos lo pardilla que es la profesora de prácticas.
Me gustaría que me contaran si han pasado por situaciones similares y cómo las han solucionado, o si conocen estrategias para salir airoso ante situaciones de este tipo.
Siento haberme extendido tanto, pero necesitaba desahogarme.
Saludos.
Ver también
No te rindas!!
Mira yo no se cómo puedo ayudarte, ni cómo puedes solucionarlo, pero me ha conmovido tu mensaje, porque se te ve que lo estás pasando mal. No he pasado por esa situación en concreto, pero recuerdo el primer día de mi primer trabajo y me fue fatal, creí que no iba a valer para ello, estaba superpatosa y todo lo hice mal o, al menos, esa era la sensación que yo tuve, pero mira, al final, aprendí y me desenvolví bien y cuando cogí experiencia lo hacía verdaderamente bien. Pues lo mismo te pasará a ti, ahora estás aprendiendo y no tienes tablas y todo lo que hagas te parecerá que lo haces mal y llegarás a pensar que no vales, pero lo importante es que te guste y pongas empeño; con ayuda de tus compañeros veteranos y de tus propias experiencias empezarás a cogerle el truquillo y, poco a poco, te irás desenvolviéndote. De todos modos, la profesión de maestro o profesor, por lo que he leído, es muy dura y no te será fácil, habrá momentos en los que lo pases mal pero si es lo que te gusta, finalmente, sabrás sacarle partido y sentirte satisfecha. Adelante y no te rindas, con voluntad y aprendizaje lo solucionarás. Un besín.
No te rindas!!
Mira yo no se cómo puedo ayudarte, ni cómo puedes solucionarlo, pero me ha conmovido tu mensaje, porque se te ve que lo estás pasando mal. No he pasado por esa situación en concreto, pero recuerdo el primer día de mi primer trabajo y me fue fatal, creí que no iba a valer para ello, estaba superpatosa y todo lo hice mal o, al menos, esa era la sensación que yo tuve, pero mira, al final, aprendí y me desenvolví bien y cuando cogí experiencia lo hacía verdaderamente bien. Pues lo mismo te pasará a ti, ahora estás aprendiendo y no tienes tablas y todo lo que hagas te parecerá que lo haces mal y llegarás a pensar que no vales, pero lo importante es que te guste y pongas empeño; con ayuda de tus compañeros veteranos y de tus propias experiencias empezarás a cogerle el truquillo y, poco a poco, te irás desenvolviéndote. De todos modos, la profesión de maestro o profesor, por lo que he leído, es muy dura y no te será fácil, habrá momentos en los que lo pases mal pero si es lo que te gusta, finalmente, sabrás sacarle partido y sentirte satisfecha. Adelante y no te rindas, con voluntad y aprendizaje lo solucionarás. Un besín.
Gracias
Mañana intentaré armarme de valor y hacerlo lo mejor que pueda, pero tengo que confesaros que tengo pánico de que el mismo chiquillo vuelva a ridiculizarme. Es que entiendan que por más que hice no conseguí, durante un buen tiempo, levantar de su asiento a este muchacho, sólo me faltó cogerle de la camisa y levantarlo. En fin, mañana será otro día y a mí me queda un camino por delante.
Gracias y un beso.
Me pasó igual
Por alguna causa del destino, tuve que coger un empleo como maestra de secundaria, no soy nada autoritara.. los adolescentes me hacían bromas y yo en lugar de molestarme me reía con ellos. Total que fui bastante mala maestra ( lo reconozco y pido perdón por ello a la sociedad) jeje. Es verdad que la docencia no es nada fácil , y en ese nivel todavía es peor. Lo que yo te aconesjo es que no seas tan dura contigo misma. No tengas miedo de un chico necio, ellos necesitan aprender a respetar una autoridad, en ese caso tu eras la UNICA autoridad.. (independientemente si no te tocaba, si son tus practicas, etc..) ellos no tienen por que saber eso, ellos tienen que respetarte por el hecho de estar ahí al pendiente de ellos. Y si el chico no obedece tu orden ( en ese caso la de salir de la biblioteca), tienes mas instancias a quien recurrir. Ya que también ellos tienen que aprender que vivimos en un mundo de reglas, no es nada personal con ninguno de los alumnos, es simplemente que ellos estaban en un lugar dnd no tenían que estar, y tu hiciste lo mejor que podías hacer en ese momento. Del chiquillo ni te acuerdes, ellos son así, acuérdate q ellos estan todo el día pensando en mil cosas, es muy raro que lleven la intención de hacerte sentir mal. Ellos estan en plena rebeldía hacia todo el mundo.
Tu eres una mujer profesional, que tienes conocimientos de pedagogía, tu eres quien tiene el poder. ( conocimiento = poder ). Así que tu eres quien tiene el control. No permitas que nadie te haga sentir mal, mucho menos un adolescente que su mayor preocupación es hacer la payasada mas grande de la historia. No puedes ponerte a su nivel mental, pq son diferentes, sus neuronas y hormonas todavía no estan del todo formadas y encausadas como las de un adulto. Así que no te comas la cabeza por eso, y disfruta tu trabajo. En realidad es apasionante, si tuviera la oportunidad yo lo volvería a hacer, pq los chiquillos son magníficos.
Ánimo !!
Al final del día yo trataba siempre de recordar a los mejores alumnos, los adelantos que iban teniendo pero de los problemáticos me ocupaba solamente dentro de la institución.
Animo compañera
En esta profesión no hay recetas mágicas y te lo dice alguien que lleva 15 años de docencia directa en Secundaria... Y ahora soy directora de un instituto a la fuerza... El alumno, por naturaleza, tenderá a ir a por el profesor, claro, y si éste es débil, más aún.. por eso no debes titubear nunca, debes hacerte la fuerte aunque estés muerta de miedo y sobre todo y más importante, no olvidar nunca que el papel de profesor no es el de un amigo, y esto en estos tiempos se olvida mucho... Y ya que en muchos de los hogares los padres se han convertido en "proveedores de caprichos" para limpiar sus conciencias por no dedicar el suficiente tiempo y esfuerzo a los hijos, los educadores tenemos que suplir el papel de lo que la familia debería suponer para ellos... Podría escribirte todo un tratado sobre ello,pero ya te irás dando cuenta de todo cuanto te digo y habrá días que llegues a casa con la sensación de que tu labor no sirve absolutamente para nada, más que para rellenar impresos burocráticos con que nos amenaza constantemente el ministerio... Ah y desahógate, es genial hacerlo y después te sientes mucho mejor, y si para ello tienes que poner a algún niñato o niñata en su lugar, no lo dudes, pero no imponiéndote sino teniendo en cuenta que la educación es un derecho y un deber de todo ciudadano.
Gracias
Mañana intentaré armarme de valor y hacerlo lo mejor que pueda, pero tengo que confesaros que tengo pánico de que el mismo chiquillo vuelva a ridiculizarme. Es que entiendan que por más que hice no conseguí, durante un buen tiempo, levantar de su asiento a este muchacho, sólo me faltó cogerle de la camisa y levantarlo. En fin, mañana será otro día y a mí me queda un camino por delante.
Gracias y un beso.
Una idea para tí...
Se me ocurre lo siguiente, en ese caso debes de hablar con el director del instituto donde estás o alguno de los profesores con más poder y más conocimiento y contarle lo sucedido y averiguar qué tipo de sanciones pueden darse por ese comportamiento, necesitas el apoyo del director al menos para darles un escarmiento y que aprendan a tener respeto, ya verás que después de esto las cosas cambiarán porque no podrán pasarte por encima sin arriesgarse a ser reprendidos.
Nada de temores amiga, ellos miden hasta dónde pueden llegar, ya pronto tendrás el control... tranquila...
Muchas gracias por vuestros consejos
En los días siguientes no he tenido percances, y el joven que me intimidó con sus comentarios ya no me intimida. Pero no porque él en un principio no lo intente, no, no es por eso, simplemente porque mi actitud ante sus comentarios ha cambiado. Y él ha notado que no me afecta. Y eso me ha dado valor y no le paso ni una. Si él me intenta dar un corte, yo le doy dos y le dejo en evidencia ante sus compañeros. No sé por qué se ha producido el cambio, pero afortunadamente ahora me siento mejor.
Gracias a todas/os.