Dicen los especialistas, que debemos mantener la mente ocupada. No dejar espacio para que las ideas, se amolden unas con otras, como secuencias de un intrincado laberinto mental. Debemos dejar, que los sentidos se abran a nuevos horizontes, aspirar aromas nuevos,dejar que el olfato se recrée con sutilezas nuevas. Visitar los lugares, que habíamos dejado de frecuentar.Observar las vidrieras del Comercio, y comprar cualquier "bobada", que nos llame la atencíon-siempre,se ha asociado al instinto femenino, las "compras en forma compulsiva",como una respuesta cerebral, a la tan ansiada evasión mental que deseamos lograr-....Caminar, si, tal vez caminar por parques con árboles frondosos, hojas muy verdes y perennes, que nos sugieran paz....Caminar descalza por el césped, y sentir como la madre tierra,nos acaricia los talones, con una caricia terrosa, onírica , casi gentil...Sentarse, y luego acostarse en el pasto, que exhala ese aroma inquietante y embriagador. Ver, a lo lejos las nubes silentes, que comienzan a transitar impávidas, frente a nuestra mustia y ajada mirada, dejamos entonces que la imaginación, diseñe imágenes de personas conocidas,desconocidas, animales, seres alados, seres mitológicos, y todo tipo de ilusiones ópticas, todo gira, todo frente a nuestras inquietas pupilas.
Quizás ,comprar una gran barra de chocolate con nueces y almendras, y morder trozo a trozo su delicioso sabor, para que las ansiadas "endorfinas", se instalen en nuestras papilas y logremos de esa forma, unos mágicos minutos de felicidad, como si chocolate fuese la droga perfecta, para una felicidad irreal.
Visitar a nuestras amistades, esas amigas que hace tiempo no habiamos visitado, comer de su pan, beber de su vino, conversar de todo, y al final decirles :"amigas, estoy mal, muy mal, quiero llorar", y entonces ellas, nos acogen con dulzura y afecto, como eternas "madres", porque después de todo, en cada mujer-salvo contadas excepciones-habita una madraza, dispuesta a consolar a un alma sufriente y dolida.
Otra forma lúdica, podría ser...jardinear en forma automática, aunque la mayoría de mis plantas, no son precísamente plantas nobles, sino que un número indeterminado de cactus espinosos, que clavan con sus indolentes espinas, a quién ose o quiera acercárseles..¡vaya forma, de seguir autoflagelándome!..
Y , por supuesto escribir, escribir como un ejercicio compúlsivo, masoquista, lacerante. Revivir todos los detalles, los buenos momentos compartidos, las risas, las charlas amenas , entretenidas y enriquecedoras, pero, también, recordar las palabras hirientes. Esas palabras que dolían y provocaron una fuerte desazón en mi alma. Y ,por supuesto,la desilusión que me provocó el sentir, que me había enamorado de una persona, en la cual, había cifrado todas mis esperanzas de felicidad, y que nunca valoró lo que yo le entregaba, y le pensaba ofrecer. Que nuestros conceptos morales, distaban años luz uno del otro.Que mientras yo, económicamente no tengo nada.-ni siquiera tengo vivienda propia-porque arriendo. Soñaba con entregarle lo único valioso que tenía mi corazón,mi "fidelidad y lealtad" de por vida. Soñaba con despertarla ,con un desayuno en la mañana, soñaba acurrucarla a mi lado ,toda una noche sín dormir, soñaba escucharla hablar a mi lado, abrigarla, si sentía frío..soñaba, soñaba...Pero, ella, a ella, símplemente la fidelidad "le daba lo mismo", porque para ella, su libertad era su norte y su fín...Libertad, libertad para qué?, si la libertad es un concepto utópico, insulso, carente de calidez...En cambio para mí, ser feliz, es jústamente lo contrario,es estar maravillósamente "atada", "unida", a una sóla y única pasíon , de por vida...
Después de todas las lágrimas, del llanto disimulado bajo las sábanas, viene la "rabia", que actúa como catalizadora de las emociones, que actúa como coraza protectora, como escudo, para que nuestro dañado corazón ,pueda latir.
Y, en ésta última etapa estoy, en la rabia...todo por haber sido una "crédula", "ingenua", "soñadora" e "ilusa " mujer....Cómo olvidar, olvidar.....