No se a quien debe sacar de mi vida a mi amante a mi esposo o a los dos...

Resumiendo
Eres la phutilla particular de tu jefe que hace contigo lo que le viene en gana y te pasas el día trabajado sea en tu labor o en algún rincón haciendo lo que mejor se te da, como siempre en estos casos, la culpa nunca es tuya, es de tu marido, o de tu jefe por tratarte así, o de ....vete a saber quien. Lástima que se te haya escapado que andas enviciada, eso es la realidad pura y dura, así te va y lo que luego pase será precisamente por eso.

Penoso....lo tuyo es penoso, una mujer casada que se dedica a complacer a un jefe dominante mientras la devora el miedo a que un día se destape el asunto. En fin....como dice la frase en el mundo para que sea mundo tiene que haber un poco de todo.

Divorciarte
Uno de los principales motivos por los cuales un hombre es amante de una mujer casada es, precisamente, por ese estado civil.
Si te separás de tu esposo, lo mejor para el por cierto, tu amante seguramente se alejará por sí mismo.
Ahora, siendo tu jefe puede estar en peligro tu trabajo.

Entiendo que trates de autoengañarte con esa
historia tan denigrante que te traes con tu jefe, pero aunque intentes adornarla con eso de que eres tú la que no quieres que deje a su familia por ti, lo cierto es que tu jefe ya te ha dejado bien claro lo que eres para él, ni más ni menos que su esclava sexual.
Aprovecha este momento de lucidez que has tenido y sal de ese par de relaciones destructivas que te van a acabar consumiendo.
Puedes empezar buscándote otro empleo y cuando te sientas preparada te largas de tu trabajo y de tu casa, eso es lo que yo haría.

Emigra
Tú solita te has metido en ésta historia y tú solita tendrás que salir.
Como no cambies la forma de pensar, seguirás así mucho tiempo.
Solo te recuerdo que tienes una hija y se supone que las madres sois un ejemplo a seguir, cosa de la cual careces estrepitosamente. .
Si has sido espavilada para llevar una doble vida también lo debes ser para afrontar tus idas de olla, siempre digo lo mismo y me reiteraré una y mil veces: Lo que tenéis las tías como tú os lo habéis buscado solas.
Al principio todo muy divertido, me acuesto con uno, ahora con el otro, voy, vengo... Ahora tienes el resultado de ser una suelta y no hacer las cosas como deben hacerse.