Tras unas semanas de flirteo/conocernos (ambos tenemos +30 años), eso me ha dicho al invitarla a tomarnos un café, "No estoy receptiva en este punto. Prefiero no quedar, necesito aclarar mis ideas".
Hasta el día anterior, todo "perfecto", risas, bromas, pequeños piques... Ha estado muy interesada en dejar claro que lo primero es conocernos, poco a poco, sin "pasar a mayores", sin hablar de sentimientos ni nada que se parezca. Sólo hablar de lo mundano y lo divino.
Por mi parte, doy la callada por respuesta. Pero me asalta la duda... ¿Es esto un "hago como que me alejo para que te acerques"? ¿O es un "mira, déjame en paz"?
Es una persona bastante introvertida que sospecho ha sufrido, y mucho, sentimentalmente. Alguien que deja claro que ella tiene su espacio y límites bien definidos y quizá el verse "abocada" a una relación le haya dado miedo (una opción bastante plausible en su caso).
Ahora bien, tengo mi duda. No sé si, simplemente, no hablar con ella y ya dirá ella lo que "decide" o si tratar de acercarme y, juntos, "aclarar sus ideas".
¿Alguna idea de cómo proceder en este caso?