Hola a todos
Ya tengo 29 años y aunque soy una persona optimista y divertida de naturaleza cada vez me noto más cansado por no encontrar a nadie con quien compartir el tiempo.
Este mes cumpliré los 30 y tengo mucha ilusión ya que tengo pensado cumplir un sueño cada fin de semana hasta que cumpla los 31. Como si éste fuera el último año de mi vida. Quiero cumplir muchas ilusiones que, por la responsabilidad, nunca realicé en mi momento. Sobre todo viajar.
Cada año por estas fechas pienso para mí "éste será el año en que alguien pueda quererme" pero el año acaba y me doy cuenta que posiblemente tenga más amig@s pero ninguna chica quiere conocerme de verdad.
Con 15 años tenía mucha ilusión, luego con los veintipocos lo que tenía era esperanza y ahora con mis 30 añitos lo que siento cada vez más se parece a la tristeza aunque me niego a sentirme así. Tengo un corazón joven capaz de querer y nunca voy a caer del todo, aunque me resulta difícil creérmelo.
De golpe y porrazo me he dado cuenta que todos estos años de tristezas me han ido cambiando hasta el punto de ser casi insensible al dolor. Creo que me han hecho tanto daño que he aprendido a dominar ese sentimiento. En realidad mi corazón lo que quiere es que no le hagan más daño y encontrar, por fin, a esa chica que pueda darme cariño.
Me ha pasado ya un par de veces en el curro que cuando las cosas van bien tod@s son grandes compañer@s de trabajo pero que a la que algo no va como debiera en el trabajo allí no hay amigos que valgan. Y yo puedo entender que no haya nadie que pueda quererme pero cuando ya no hay ni cariño vuelvo a casa destrozado y con ganas de absolutamente nada.
Noto que aunque me haya olvidado de querer aún sigo guardando un pedacito de mi corazón para que alguien lo rompa, con la esperanza que llegue alguien que quiera estar conmigo.
Muchas veces, hablando con las chicas, me dicen que están cansadas de que sus novios no las escuchen, que no les hagan caso, que no las lleven a tal o a cual lugar, que son muy egoístas y que no saben por qué siguen con ellos ... pero aún y así siguen con ellos. Y finalmente me dicen que yo soy para ellas un buen amigo, una buena persona y casi como un hermano pequeño. Pero ninguna me ve como alguien para compartir el día a día. ¿Qué hago mal?, ¿qué pasa?
Alguna vez he pensado en cambiar y tratar de ser como ellas quieren que sea pero, y aunque lo he intentado, me he dado cuenta que no puedo dejar de ser yo mismo.