Amo a los hombres maduritos

Ayer tomé una combi en Tlalnepantla que me llevara al suburbano y cuando me di cuenta que ya no había más pasaje que yo mire mis pechos y me di cuenta que estaban bien parados y antes de bajar le dije al chofer que viera como me había puesto, yo traía una mini falda gris bien cortita y me dijo que sí podía tocar y le dije que sí pero le dije que fuéramos a dar una vuelta y cuando nos alejamos y se estacionó en un lugar solitario me empezó a meter los dedos y me hizo gemir bien rico, después se sacó su pito enorme y se empezó a masturbar y yo sólo me tocaba ya con las piernas bien abiertas, me dijo metete los dedos, mojate para mi y de repente vi como de su pene brotaban chorros de semen. Fue tan eixo, amo a los bien maduritos.