2da parte " violación programada" (el más caliente)
Me hallaba confundida, desesperada, pensaba como poder escapar de ellos, pero a la vez mi respiración aumentaba con cada lametazo que me propinaba.
El negro se aproximó del costado izquierdo abalanzándose sobre mí cuello con su lengua asquerosamente llena de saliva, entre lamidas que me repugnaban sentía sus gruesos labios succionándome la piel de mi cuello lánguido y terso que siempre tanto me han halagado ; el hijo de ... me estaba mordiendo, me hacía doler .
Creo que en ese momento fue cuándo me di cuenta que mi vida podía correr peligro, y explote en llanto otra vez.
Eso pareció excitarlos más.
El negro se bajó los pantalones y refregaba su pedazo por todo mi cuerpo que si bien no lo pude ver por la oscuridad de la noche se percibía de gran tamaño al tocar mi piel.
Ni un miserable auto pasaba por aquel lugar que me pudiera socorrer. Conocían tanto del lugar como yo, sabían muy bien que debajo de ese puente roto nadie los descubriría.
El rubio aparentaba ser el más tranquilo de los 3, aunque con una de sus manos me tenía prisionera, solo observaba en silencio sin dejar de tocarse.
Y a pesar de aquellas palabras que me había dicho minutos antes a modo de tranquilizarme, estaban abusando de mí, así que sus palabras las ignoré por completo.
El calvo dejó mi entrepierna y con bruscos movimientos se deshizo por completo de sus prendas. Me giró salvajemente poniéndome de cara al capot, mi cuerpo curvado sobre el auto me dejaba totalmente a su merced.
Bajo un tono altanero dio orden a los otros de que no me soltaran. Demostrando ser el cabecilla. Entre risas malévolas acercó su boca a mi oído susurrando aquellas palabras que hubiera preferido no escuchar nunca
_ahora sabrás lo que es una buena cogida.
Ahogada con mi llanto como pude suplique que me dejaran ir.
Pero nada de lo que yo dijera pareció importarles. Sus carcajadas burlonas perforaban mis tímpanos demostrándolo.
Se ubicó detrás, palpó con sus manos mi sexo y me dijo:
_ que perra resultaste; mira como te mojaste hija de ... !! Ahora se viene lo mejor, vas a disfrutar como nunca antes.
Estaba avergonzada de mí misma, no podía creer que bajo esas circunstancias me hubiera mojado.
Como endemoniado forcejeo hasta destrozarme la tanga a tirones, intentó hacer lo mismo con el corpiño pero la tela se resistió, se conformó con sacar mis tetas fuera de él.
Luego de amasarlas bruscamente durante un rato las liberó.
Con su mano pesadamente empujaba hacia abajo mi espalda para que mi cavidad quedase a la altura de su miembro, para facilitar la penetración. Y después de un par de intentos fallidos logró su cometido.
Me penetró.
Se agarro de mi cuerpo como una garrapata a un perro, luego de varias embestidas salvajes le ordenó al negro que se dejara de tocar y encendiera las luces del auto
_ Quiero que vean cuanta leche me sacó la putita esta.
Y cuando las luces nos alumbraban sentí como derramaba su lechada caliente sobre la espalda chorreando hasta el culo.
_Ahora es tu turno Alex; mencionó; y se acercó el rubio, más tímidamente.
_ Dejemos las luces prendidas, así vemos como te la coges, dale su merecido a la pendeja esta, ¿quien se cree que es?
Ya basta, déjenme ir a mi casa, por lo que más quieran, déjenme ir.
Sus risas nuevamente presagiaban lo que se venía.
El rubio que hasta el momento parecía ser el más tranquilo de los 3 me tomó del mentón y me giró la cabeza enfrentándome a su compañero él negro
_ míralo bien, fíjate el pedazo que carga el hijo de ... saboréate porque ese será tu postre.
Las carcajadas simultáneas no se hicieron esperar.
Me agarró de mi larga cabellera tirando muy fuerte de ella y me ordenó que me arrodillara. Con un movimiento de pelvis pego su sexo a mi cara.
_ al fin no aguantaba más deseaba que llegara mi turno, yo quiero disfrutarte por completo.
Detrás del calzoncillo te espera mi pija caliente, vamos nena, quiero ver cómo la chupas.
Por primera vez pude ver su cara, era un chico de rasgos delicados, tez muy blanca y de ojos claros, aunque no llegue a divisar su color.
Tranquilamente podría habérmelo cruzado alguna vez en la calle de mi pequeña ciudad, pero jamás hubiera imaginado que debajo de ese rostro se escondiera un nefasto violador.
A modo de custodia permanecían los otros, para impedir cualquier nuevo intento de huida.
Me resistí a chupársela, ladeaba la cara para un lado y para otro, no quería hacerlo, nuevamente implore se apiadarán de mí y me dejaran ir.
Pero como consecuencia de mi rebeldía recibí un fuerte tirón de pelo y me dijo_ linda no nos ofusques que estamos siendo buenitos con vos, hace lo que te pedimos que luego podrás irte con los tuyos como si nada hubiera pasado.
Me la metió en la boca a la fuerza y con su mano empujaba de mi cabeza maniobrando los movimientos.
_ ahora hazlo sola, chúpala como buena putita que sos.
No me esperaba recibir dentro de mi boca su catarata de semen, me dio muchísimo asco y quise escupir, pero se percató antes y me obligo a tragármela.
_Sigo re caliente, ahora quiero comerte las tetas.
Me paró y apoyo sobre el auto, e incrusto su cara en medio de mis lolas a la vez que decía que eran las tetas más perfectas que había visto.
Lloraba desconsoladamente, sentí un fuerte dolor en el pecho, cansada de hacer fuerza en vano para escapar, mis piernas flaqueaban. Pero no me quería rendir, tenía que intentar zafar de ellos una vez más.
Cuando más entretenido estaba comiendo mis tetas pensé: este es mi momento.
Pero mi ilusión se dilapido en un cerrar y abrir de ojos, sus manos y miradas no se despegaban de mi.
De las lolas paso a lamerme el cuello, fue subiendo en busca de mi boca, y yo le corría la cara, lo evitaba.
Dios !!! que ganas de vomitar cuándo lo consiguió, me metió la lengua y hurgaba en mi boca como si fuera mi dueño, no lo pensé, cerré de golpe mi boca y lo mordí.
Se enfureció, me tomó con fuerzas entre sus brazos y me sacudió tan fuerte que me mareo, los otros reían, y el negro agrego
_ nos salió rebelde la pendeja.
El rubio no menciono ni una sola palabra más, creo que el dolor se lo impedía.
Rabioso bajó a mi entrepierna, me lamió un par de veces, y luego se posiciono del clítoris tomándolo entre sus dientes lo mordía frenéticamente, eso me causo dolor, creo fue en venganza por lo que yo le había hecho.
Sin más preámbulos me la ensarto de una, al 5to o 6to bombeo empezó a temblar, se preveía la eyaculación, yo deseaba terminara pronto la pesadilla, me moví un poco para acelerar el trámite y lo logré, acabó de inmediato, pero acabó dentro de mí.
Dejó caer su pesado cuerpo sobre el mío diciendo
_ a pesar de la mordida estuvo genial, apartándose le cedió el lugar al restante
_ Edgar llego tu momento. Mátala a pijasos, dale
Yo me sentía fatal, mi cuerpo estaba como en el aire, no sentía mis piernas, y mi cabeza parecía estallar.
Me seguían teniendo apoyada sobre el capot, nada podía hacer para detenerlo, cuándo lo tuve frente a mi noté lo gigante que era, solo distinguía su blanca dentadura, sin promediar palabra pasó su lengua por todo mi cuerpo baboseándome.
Sus labios gruesos envolvieron por completo mi sexo. Me lamio la concha de tal manera que tuve que tratar de disimular mi orgasmo.
_ mmmm me parece a mí o mi lengua juguetona te gusto?
_Qué bien sabe!!! Murmuraba mientras se nutria de mi néctar.
_Está perfectamente lubricada para mi tronco, pero antes quiero sentir tu boca en mi falo.
Otra vez se repetía la escena anterior.
Pero yo no estaba en condición de suplicar nada, sentía mi cuerpo desvanecer.
Forzando mi boca metió su pija hasta que mi garganta dijo basta, provocándome arcadas una y otra vez, era larga y gorda, esta ocupaba toda mi boca, la comisura de mis labios parecía que se iban a rasgar.
Me bajó la cabeza llevándola hasta sus enormes huevos llenos de leche, totalmente depilado.
_ lámelos, cómemelos como se los comes a tu novio.
Me arriesgue a lo que pudiera pasar, y apreté mis dientes en uno de sus testículos, para mi sorpresa ni se inmolo, parece que no apreté lo suficiente como para provocarle dolor.
Sus compañeros ya no me sostenían, se estaban pajeando como locos frente a aquella escena.
Estaba muy caliente, sus gemidos roncos denotaban su excitación.
Esta vez fue él quien se apoyo sobre el auto. Me tomó de la cintura rápidamente, fue el único instante que había quedado totalmente liberada, pero fueron fracciones de segundos, no más, solo me dio tiempo a tirar un par de trompadas al aire intentando dar en su rostro.
Quedando yo de espaldas, me abrió las piernas, metió sus dedos en mi vagina, y con un brusco movimiento me aplastó sobre él, sentí un profundo dolor, mi estrechez frenaba la entrada de todo su aparato, arrancándome un grito que retumbaba en el silencio de la noche.
_ no quise hacerte doler bebe, quiero gozarte, pero no dañarte.
Se quedó inmóvil por un momento, hasta que calculó que el dolor había desaparecido.
Y volvió a la carga otra vez ahora se movía formando círculos dentro de mí, estaba buscando hacer lugar para meterla toda, sentía como golpeaba la cabeza de la pija en las finas paredes de mi estrecha concha.
Cuándo se conformó del pedazo que había logrado entrar me pidió que lo cabalgara.
_Cógeme vos, cabálgame, haceme explotar de placer
Lo hice, lo cabalgue lo más fuerte que pude, quería que acabara pronto. Al fin se estaba acercando el final de la pesadilla.
CONTINUARÁ
ESTARÉ ATENTAS A SUS COMENTARIOS, POR FAVOR NO SE VAYAN SIN ANTES DEJARME AUNQUE MENOS NO SEA UNAS BREVES PALABRAS SOBRE LO QUE HAN LEÍDO.
Como toda persona que le gusta escribir historias ME GUSTA LEER SUS APRECIACIONES SOBRE EL MISMO.
Pueden hacerme llegar sus comentarios tb a mi email elblogdelaperversa@hotmail.es
Y SEGUIR LEYENDO EL CUENTO U OTROS EN MI BLOG PERSONAL
www.misrelatoshot.wordpress.co m
Gracias por la atención prestada. Buenas Noches tengan todos.
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Te envidio
OYE QUE BUENA COJIDA TE DIERON ESTOS TIPOS ERES AFORTUNADA ESPERO SIGA TU RELATO ME GUSTA ME PONE CALIENTE
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Que muertecillo esta todo
no vale la pena seguir posteando ya
Muy triste
q pena q lean, y no se dignen a comentar
Eso estubo genial
ne gusto mucho c me puso dura al leerla