No se si esto interesará a alguien, pero nunca he contado a nadie la historia de mi relación y los problemas con mi pareja y me apetece compartirlos.
Me llamo Arturo y tengo 32 años. Hasta hace 2 años convivía con una chica, María, con la que llevaba 7 años de relación y 5 de vida en común.
Las cosas comenzaron a ir mal al año de vivir juntos, su deseo sexual era cada vez menor hasta que se convirtió en inexistente. Los últimos 3 años de relación no mantuvimos relaciones sexuales. Por lo demás era cariñosa, generosa y una bellísima persona, siempre pensando en los demás y buscando sorprender, se hizo mejor amiga de mis amigos de lo que yo fui nunca.
No le dí importancia a la falta de sexo, "una mala racha", pensé, y cuando la cosa se alargó demasiado comencé a buscar la ayuda de "profesionales" del sexo. Casa de citas, escorts... y al final me volví adicto al mundo del sexo de pago y comencé a buscar chicas mediante anuncios.
En uno de esos anuncios contacté con mi actual pareja, Susana. Susana pasaba una mala racha económica y era ardiente y apasionada en la cama, por lo que a mí me venía muy bien su compañía y a ella mejor aún mi dinero.
Con el tiempo mis ahorros comenzaron a menguar y decidí dejar tan vacía afición y centrarme en intentar recuperar a mi pareja.
Pero Susana me había calado hondo, no eran solo nuestros encuentros, con ella me sentía vivo y con María no.
Quiso el destino que meses después me reencontrara con Susana y eso desencadenó el final de mi relación con María.
Susana en aquel momento ejercía de forma profesional, dando servicio a 5, 6, 7 hombres en un mismo día, 7 días a la semana y yo, falto de compañía por mi ruptura con María la acompañaba a todas partes.
Horas interminables esperando que saliera de hoteles, miles de consejos de mi época de buscador de chicas y desconfianza infinita por su parte.
Finalmente, llegamos a ser pareja. Con el tiempo, ella dejó su profesión y se dedicó a "gestionar" a otras chicas que estaban en la misma situación que ella al principio y nos fuimos a vivir juntos.
Primero fue el deseo de que dejara su profesión y luego fue el intentar ayudarla, en el fondo si miro hacia atrás veo que nunca he estado realmente enamorado de ella.
Ahora llevamos 2 años juntos y su negocio va mal, Es tremendamente cabezota y a la vez negada para sacarlo adelante y necesita continuas ayudas económicas por mi parte.
Y yo me veo en un callejón sin salida. Por un lado vivo con una mujer de la que no estoy enamorado y que sé que es un problema para mí. Toda mi historia con ella es un error, al igual que las circunstancias que la motivaron, pero el pasado no se puede cambiar.
Por otro lado, ella está sola. Su relación con sus padres es pésima y no tiene amigos ni apoyo aparte de mí. Honestamente el cuerpo me pide dejar la relación, pero no me veo capaz de abandonarla a su suerte.
Llevo tiempo pensando y pensando y pensando y no me veo capaz de llegar a ninguna solución, y mientras tanto me encuentro cada vez más deprimido y más solo, porque la única persona que sabe toda la verdad es la misma Susana.
Me gustaría que, si alguien ha vivido situaciones similares en uno u otro sentido me contactara y me contara sus experiencias.
En cualquier caso, muchas gracias por leerme.
Arturo.
