Preocupado
estimada Lisare. A mi me acaba de ocurrir lo mismo. Tengo 38 años, un hermoso hijo de 10, un matrimonio estable de 12 y hasta un bebé en camino. La verdad no tengo motivo alguno para arriesgar mi presente. Mi secretaria es una jovencita que estudia universidad y tiene apenas 19 años,
Te imaginas que mi esposa tuvo la idea de contratarla ella misma ya que en menos de tres semanas da a luz. Es algo que nunca me ha sucedido pero esta niña me flechó desde el comienzo.
. Estuvimos coqueteando por cerca de 1 mes pero yo no quería dar paso a nada y aunque hemos tenido festejos en la oficina ella nunca ha ido por lo que no se presentó oportunidad hasta este sábado que tuvimos que laborar solamente los dos. Como hacía mucho calor se me ocurrió comprar un six pack de cerveza. El trabajo no tomó tanto tiempo, y empezamos a conversar, como no he concersado con nadie. Ella se veía completamente nerviosa y yo, que se suponía tantas mujeres he tenido, parecía un niño de 15. Cuando ya nos íbamos no resistí mas la tentación y la besé. No llegamos a tener sexo pero nos besamos casi dos horas. La fui a dejar a su casa, mientras que en el trayecto conversamos como ibamos a manejar la situación, si vamos a escribirnos, llamarnos, etc.
No he dejado de pensar en ella. Le mandé un mensaje ese mismo día, y ahora la llamé pero no me contestó. La verdad creo que aunque me muero de ganas por tenerla en mis brazos, también espero que sea ella quien ya no quisiera verme mas porque siento que yo no voy a poder dejar de hacerlo.
No sabes lo hermos que fue escucharla decirme que la pongo nerviosa, que le gusto, que me extraña. No sabes lo bien que sentí el abrazarla semi desnuda, pero con lo poco de cabeza fria que me queda puedo decirte que debemos pisar el freno a fondo antes de que el asunto se haga mas grande y alguien, o algunos, sufran