Gracias
Muchas gracias por responder.
Puede que sí tenga algunas de las conductas propias de un dependiente emocional, pero lo cierto es que algunas puedo asegurarte que no.
Por ejemplo, no intento siempre satisfacerle en todo, sé que él debe preocuparse por mí al igual que lo hago yo, y la mayoría de las veces lo hace, suele estar pendiente de lo que necesito, hacer cosas que me gustan y le encanta verme feliz.
Además, no me considero mala compañía, antes al contrario, sé que tengo unos valores y unas cualidades que reconozco a diario. No tengo problemas con mi imagen física, en todo caso es él quien se ha descuidado mucho y no tiene buen aspecto.
Sí me gustaría que cambiase algunas cosas y aunque ha habido una mejoría por su parte, soy consciente de que no puedo cambiar a nadie.
En cuanto a lo de estar siempre en pareja, he tenido todo tipo de relaciones, breves, algunas más largas, pero en suma he estado más tiempo soltera que emparejada, y no he tenido la necesidad vital de tener a alguien a toda costa. Sí soñaba con que llegara un día esa persona con la que compartiría muchos momentos de mi vida, e incluso mi hogar.
Sobre el sexo, me esfuerzo pero no de forma sumisa, para hacerle sentir bien sólo a él, quiero que él también se esfuerce y se lo digo abiertamente.
Lo que SÍ es cierto en mi caso es que las discusiones o conflictos me llenan de ansiedad, lloro con mucha frecuencia y temo que mis problemas (que existían antes de conocerle) sean la causa de mi inseguridad. Veo sus defectos tanto como veo los míos, hablo claramente de mis emociones y frustraciones e intento que me entienda, a veces lo consigo, otras no. A día de hoy estoy desolada porque las noticias sobre mi salud no son buenas y aún así se ha ido, son sólo unos días, pero me habría gustado que estuviera a mi lado. En cuanto a espiarle, seré sincera, lo hice una vez, no más, durante el mes que estuvo fuera. Jamás lo volví a hacer, ni el pc ni el móvil, nada. Lo hice hoy porque me había dado datos tan vagos sobre su viaje y estaba tan enfadada que necesitaba saber algo más.
El piensa que no confío en él, y no le falta razón. Sé que debo buscar ayuda, lo intenté en un par de ocasiones y he de decir que algunos psicólogos dejan mucho que desear, los de pago incluidos. Me rendí cuando la terapia resultaba simplemente en vano.