Cuántas veces habré pensado esto viendo la feliz y despreocupada vida que llevan mis gatos... no madrugan para ir a trabajar... no se pelean con sus jefes... tienen todos los días su plato de comida puesto... duermen todo lo que quieren... si quieren estar un día entero sobando... lo hacen!!! y no pasa nada! tienen un techo donde dormir... en resumen, que hacen lo que les da la real gana y no tienen preocupaciones. Y techo y comida gratis! En fins.... jajajaja desvaríos de las 12 del mediodía. Pero no, en serio, anda que no lo he pensado millones de veces cuando llego a casa del curro rayada, calada del viento y la lluvia que ha hecho estos días y con el medio constipado que llevo encima, y entrar a la habitación de mi casa y verles dormiditos o esbozando un gran bostezo. uuuuuuuuuuuuuuuuf madre mía eso es felicidad! jajajaja