A ver... Eran las fiestas de la ciudad, volvíamos de beber y pasamos un momento por su casa a dejar algunas botellas. Íbamos a regresar los dos para terminar la noche, pero el alcohol le sentó mal y quiso quedarse en casa. Insistí en quedarme con él, o en ir y volver para avisar a nuestros amigos, que nos estaban esperando, pero insistió en que fuera yo y que él ya vendría cuando se le pasara. Con todo se nos hizo tarde y apenas estuve una hora fuera. La fiesta se acababa, le envié algunos mensajes (que contestó) y fui a su casa a ver como se encontraba.
Se enfadó porque, según él, debería de haber llamado para ver si le había pasado algo (aunque le envié algunos mensajes que contestó). Empezó a golpearme, me ahogó y me arrastró para echarme de su casa. Cuando se dio cuenta de lo que hacía empezó a disculparse, pero yo cogí mis cosas y me fui.
Entiendo el efecto del alcohol, pero no creo que sirva para justificar la escena. En general no bebe, y no me había tratado mal nunca. Es un chico maduro, pero demasiado impulsivo en algunos aspectos.
Ahora hace dos semanas y media que no nos vemos, aunque sí que hemos hablado por Facebook. Me pidió perdón y todo eso, yo aún le quiero y le hecho mucho de menos, pero no puedo vivir del amor y pasar por encima de mí misma.
Ha pedido hora en el psicólogo (creo que esto muestra, al menos, un intento de cambio). Hemos quedado en vernos cuando ya haya empezado a ir. ¿Qué hago? Me cuesta hacerme a la idea de que se ha acabado, porque continúa habiendo amor en ambas partes, y además está haciendo un esfuerzo para mejorar. Pero ¿creéis que es posible que la cosa vaya bien después de esto? ¿Sería faltarme al respeto a mí misma continuar la relación? (Aunque para ello tendría que ver un cambio).