Hola, quiero contarles mi historia, esto no es mentira es un relato de vida, se los cuento con el fin de que me ayuden puesto que estoy muy confundido y no se que hacer, recurro a este medio puesto que me da mucha pena contar esto a las personas que conozco, de seguro quien sabe de que me tildaran. Espero que puedan ayudar aconsejándome sobre que debo hacer.
Tengo 19 años y mi hermana tiene 21, la verdad es que nos hemos enamorado profundamente desde hace un año más o menos. No puedo negar que ella es muy hermosa, tanto de rostro como de cuerpo, eso me lo decían siempre mis amigos; pero ella y yo peleábamos mucho más que todo porque ella es muy estricta con el orden y la limpieza y yo era un poco desordenado, por ello no es que lleváramos la mejor de las relaciones, pero aun así nos queríamos mucho y nos apoyábamos como es lógico entre hermanos.
Todo empezó un sábado por la mañana, mis padres estaban fuera de la ciudad, yo tenia que ir a jugar un partido de futbol con el equipo de la universidad y estaba retrasado, mi hermana tenia clases ese día en la misma universidad, así que como yo se cuanto se demora ella cuando entra al baño me le adelante (solo tenemos un cuarto de baño) ella se enfureció mucho y empezó a insultarme desde afuera y yo solo me reía a carcajadas, de repente ella entro al baño, con la toalla puesta, yo me asuste mucho, me tape con las manos y le dije: ¿Oye que estas haciendo? y abrió la puerta de la ducha, se quito la toalla, entro, y me dijo con voz autoritaria: Largo de aquí, yo le dije: ¿A donde me voy a ir?, ¿No ves que estoy enjabonado?, luego me dijo poniendo una cara sarcástica: ¿Sorprendido? y empezó a reírse a carcajadas de ver mi cara apenada y sorprendida, (¿Sorprendido? era un juego que hacíamos cuando niños del que consistía en siempre tratar de sorprender al otro, haciendo algo que nos habían prohibido para demostrar que se eras capaz y no tenias miedo, como el otro jamás se lo imaginaba, ponía una cara de sorprendido única y eso bastaba para carcajearse un buen rato) en ese momento me descubrí y empecé a reírme yo también, pues a pesar que me sentía un poco incomodo desnudo delante de ella, no pude evitar mirarla y ver lo hermosa y sensual que se veía desnuda y bañándose frente a mi, en que paraíso en el que me sentí, poco a poco mi mirada paso de ser normal a de deseo, y no pude evitar ponerme erecto y aunque trataba de voltearme y ocultárselo ella miraba y se sonreía, no le molesto, mas bien sentía cierta satisfacción, pude darme cuenta que me estaba mirando también con deseo, pero me asuste, nos terminamos de bañar rápido y nos fuimos. Durante muchos días quede pensativo, y se que ella también, pero a la vez no podía sacarme la imagen de ella desnuda de mi cabeza. Pero nunca hablamos de nada de eso y todo siguió igual.
Un día, unos dos meses después, cuando creí que ella había olvidado lo que paso, y mis padres no estaban, la sentí en la ducha y me desnude y me le metí, quería con ansias verla desnuda de nuevo pero solo eso, cuando abrí el baño se puso muy apenada, rojísima, y me dijo ¿Qué haces?, vete pero entre en la ducha y mientras ella no dejaba de taparse y decirme que me fuera, sentí como mi corazón latía mas fuerte cuando la tenia desnuda frente a mi otra vez, luego solo seguí mi impulso de agarrarla de la cintura y darle un beso, en ese momento sentí que ella perdió la fuerza, y después le dije: ¿Sorprendida? Y me le sonreí, pero ella en vez de sorprenderse lo que hizo fue abrazarme y darme un beso apasionado, nos empezamos a acariciar todo el cuerpo mientras nos besábamos, y cuando ella noto mi excitación me tomo del pene y empezó a masturbarme suavemente, yo sabia que ella estaba excitada cuando vi sus pezones paraditos y su cara roja, le acaricie sus partes intimas también y me abrazo, yo tenia el corazón a millón, pero me asuste otra vez me dije: Es mi hermana, ¿Qué estoy haciendo?, así que la tome de las manos, le di un beso y la abrace, nos terminamos de bañar y salimos de la ducha, pero ya afuera cuando nos íbamos a colocar la ropa ella entro a mi cuarto me beso de forma súper apasionada y me empujo en la cama, me toco nuevamente, y me deje llevar otra vez, admito que soy muy débil con ella, demasiado tal vez, y empecé a tocarla y besarle todo el cuerpo, hasta cuando ella empezó a bajar con sus besos y me beso la cabeza del pene, en ese momento no le pude decir que no, estaba muy excitado, y luego empezó a hacerme sexo oral, que luego fue mutuo, terminamos, nos besamos, nos vestimos y ella me hizo jurar que nadie podía saber esto jamás, yo le dije que esta bien, se sonrió y me beso de nuevo.