Lobita, lobita, lobita con piel de corderita...
Tú que hinchas el corazón,
para luego deshincharlo sin compasión...
¿Qué le ocurrirá a la lobita cuando su corazón llore con razón?
Lobita, lobita, lobita con piel de corderita...
Tú que con la mirada hechizas,
para luego machacar las cenizas...
¿Qué le ocurrirá a la lobita cuando las llamas del deseo estén marchitas?
Lobita, lobita, lobita con piel de corderita...
Tú que olvidas tan mansamente,
lo que dijiste días antes fácilmente...
¿Qué le ocurrirá a la lobita cuando el fuego consuma palabras vivamente?
Lobita, lobita, lobita con piel de corderita...
Cubres con un velo la mente,
para luego consumirla rápidamente...
¿Qué le ocurrirá a la lobita cuando se consuma ella lentamente?
Lobita, lobita, lobita con piel de corderita...
Tú que de un día para otro cambias de camisa...
¿Qué le ocurrirá a la lobita cuando se le caiga el vestidito de corderita?