Yo lo probé pero no me gustó
Esperaba sentir asco o repulsión, estaba preparada para eso, y consentí porque deseaba hacer feliz al hombre que entonces era mi pareja, y que deseaba orinarse encima mío, era una de sus fantasías. Sin embargo, no sentí nada, es decir, no me dió tanto asco como esperaba, pero realmente no sentí placer alguno. Creo que él lo notó, porque no volvió a pedírmelo, aunque aseguraba haber disfrutado haciéndolo. En fin, cuando algo así no te gusta, suele notarse, aunque no digas nada. Al menos puedo contar la experiencia, pero en principio no volvería a repetirla.