Hola a tod@s,
No se si muchas mujeres se sentirán identificadas con lo que voy a contar y me gustaría que si algúnhombre lee ésto me expresara su opinión.
Os cuento. Trabajo como Oficial administarativa en una empresa de informática. Para empezar mi trabajo es propio de un titulado (cosa que soy yo), pero aquí sólo tienen esa condición mis tres jefes y alguno más con suerte (qué curiososo, ¿no?).Digo que mi trabajo es de licenciada porque al ser licenciada en Derecho llevo todo el tema laboral de la empresa.
En fin, a lo que iba. En total debemos ser en la oficina unos 15, más o menos de los que 10 son hombres. Pues o yo no sé matemáticas o no entiendo por qué si mis compañeras no están o no pueden en ese momento, me toca coger el teléfono. ¿Será de mariquitas responder?¿en sus casas qué hacen?,¿El móvil no cuenta?, porque eso sí, al móvil no hay quien los descuelguen. Pero sigo. Los "hombretones" de mi oficina, como trabajan tanto(irónicamente, claro), pueden permitirse el lujo de bajar a desayunar. Y como no tenemos buzón cerca, las "chicas" que debe ser que somos más amables con el buzón , nos tenemos que patear media ciudad para buscarlo y echar el correo. Claro, una vez que hemos terminado nuestra agradable jornada laboral. Otro caso más sangrante aún que me pasó ayer. Auer fue uno de esos días en los que todo se te acumula. Para empezar nada más llegar uno de mis queridos "hombres-mancos-torpes-tontos-que cobra más que nadie" y que parece que no sabe hacer nada , me endosa un marrón de esos de "para ayer". Y ,¡venga!, deja tu trabajo del día y dedícate a hacer una cosa que es trabajo suyo propio. Cuando estoy terminando, viene un chico a firmar un contrato que, claro está, no había redactado. En el momento que consigo sentarlo a firmar, me llaman para recoger un finiquito (casi saco un turnomatic de pescaderia), y en ese moemto crucial viene uno de los jefes y me endosa otro marroncete (que majo él)y me ordena que deje todo lo que estoy haciendo para dedicarme en cuerpo y alma a ello. Si se hubiera podido ver, habría sido alucinante el humo que salía de mis orejillas porque lo qu eme emandaba este ser tan inteligente y trabajador era hacer un cálculo en una plantilla que ya tenía él.Pero claro, el pobre no debe concocer el teclado numérico porque "no sabía hacerlo". Y cuando ya no puedo más, viene el cachondo de mi compañero, se sienta al otro lado de mi mesa, me restriega por las narices que está muy relajado porque no tiene nada que hacer y ME PIDE QUE LLAME A NUESTRA SEDE EN BARNA Y LE CONECTE CON UNA PERSONA PARA QUE ÉL NO SE TENGA QUE LEVANTAR A SU SITIO A LLAMAR!!! (Esto si que va sin comentarios).
¿Y son ellos los supermachos??VENGA HOMBRE.
Lo peor es que en empresas como la mía, las mujeres estamos muy infravaloradas.¿Por qué hoy en día debemos eguir por debajo de ellos cuando valemos mucho más?
Besitos a todos