Hace unos meses me fuí a vivir con mi novio, que es suizo, en Suiza. Al principio no iba mal, y aunque yo había dejado todo atrás para venir a vivir con él me sentia muy acogida por su familia y muy bien los dos juntos en casa. Pero hace un tiempo que él empezó a estar menos atentivo. No me hacía caricias ni mimos distraídos (solo si quería sexo), dejó de decirme cosas bonitas, de tener detalles conmigo, de darme el beso de buenas noches... Cada vez que yo le pido de hacer algo juntos que no sea ver una película o ir a hacer la compra, me da largas, y no tiene ganas de hacer ningún plan juntos. Ya no salimos a cenar, ni al cine, y si le pido algo enseguida se pone a la defensiva, como si le quisiera obligar (cuando muchas veces solo quiero informarme de sus intenciones), He empezado ha hacer las cosas de la casa yo, para no ver como quedan por hacer. Y ya lo que me colma el vaso es que muchas veces cuando intento que haya comunicación me suelta un "Déjame en paz", que casi se ha convertido en una muletilla. Ayer me lo dijo 6 veces! y en ningún momento yo le pedí nada fuera de lo común (por ejemplo: ¿te vas a duchar ahora, o voy yo?), y a veces hasta lo dice sin que yo haya ni siquiera abierto la boca. Muchas veces también me lleva la contraria simplemente por llevármela, y la verdad yo no sé qué hacer.
Mientras que la vida sexual va bien (al menos follamos bastante y bien), me siento insatisfecha emocionalmente: no me da lo que me gustaría estar recibiendo, ni lo que necesito.
Además estoy lejos de mi familia y amigos, estoy sin trabajo y vivimos en una zona muy tranquila en la que no puedo distraerme mucho.
Cuando vine pensaba que todo iba a ir genial, pero no sé qué ha pasado para que él se muestre así conmigo.
Estoy pensando en dejarlo, porque simplemente no me siento feliz así, pero me da miedo afrontar esta desagradable situación viviendo en un piso de 30m2. Y también me da pavor pensar en volver a mi casa como si hubiera fracasado.
¿Alguien me puede dar algun consejo?