Hola a tod@s. Mi intención es contaros mi historia y que alguien que se sienta identificad@ me aconseje, igualmente espero que quien esté pasando algo parecido pueda sacar algún consejo también de ella.
Soy una chica española, tengo 20 años y soy estudiante universitaria. Con 17 años empecé una relación que hoy en día continúa, y la verdad es que en tan solo 3 años han pasado muchas cosas, buenas y malas; hemos tenido varias rupturas y otras tantas reconciliaciones, y ahora llevamos un tiempo bastante bien en comparación a todo lo que hemos vivido. Pero bueno, voy a comenzar por el principio.
Con 16 años me fui a estudiar a Madrid el bachillerato, y allí fue donde conocí a Luis. El trabajaba en un café al que solía ir con mis amigas, y desde que le vi me encantó. Era un chico muy atento, simpático, gracioso y con una sonrisa preciosa. Pero el primer año no pasó nada, yo salía de fiesta con mis amigas y nunca me planteé empezar una relación con nadie, solo había miradas y cierto feeling, pero nada más.
Al curso siguiente, en primero de bachillerato, mis notas empezaron a caer, digamos que mis compañías no eran las adecuadas y no me lo tomaba en serio; nunca iba a clase y mis padres después de ver mis notas en navidades comenzaron a llamar al instituto y a enterarse de que yo no pisaba las clases. Debido a eso mi relación con mis padres se convirtió en un infierno, todo eran discusiones y yo me sentía muy culpable por todo lo que ellos se habían gastado en mi educación. Corté mis amistades porque sabía que tenía que cambiar; y me quedé completamente sola. Ni amigos en Madrid, ni relación con mi familia cuando iba los fines de semana. Fue en estas circunstancias cuando empecé a salir con Luis. En ese momento yo lo veía como mi salvador, como el tronco al que se agarra un naúfrago para no hundirse; se convirtió en todo para mi, absolutamente todo, era mi mundo.
Mis notas comenzaron a mejorar, al igual que la relación con mis padres; pero mi vida social se quedó estancada por completo; solo él y sus amigos formaban parte de ella. Luis es un chico 9 años mayor que yo, al igual que estos amigos. Y bueno, la diferencia de edad puede no ser importante y puede serlo muchísimo, depende de muchas cosas.
El primer año y medio la cosa estuvo así, yo no salía, no me divertía, ni siquiera estaba en mi piso con mis compañeras, siempre estaba con él, en su casa, esperándole a que llegara del trabajo para ver una película juntos. Se puede decir que estaba casada con 17 años. Sin embargo eso no me importaba porque el lo era todo para mi, podía prescindir de todo si él estaba a mi lado.
Como he dicho, esto fue así el primer año y medio más o menos; después una parte de mi comenzó a echar de menos otras cosas; empecé a echar de menos tener amigas, salir a tomar un café, de tiendas... y sí, quería salir de fiesta y llegar tarde a casa; quería esa diversión que una persona de 18 años tiene que tener...quería una vida acorde a mi edad, a mi tiempo.
Por esto empecé a hacer amistades en clase, bastante buenas, y muy de vez en cuando comencé a ir a algún cumpleaños, o a alguna cena; a tener mis primeras tomas de contacto con la gente. Pero eso sí, nada de fiestas súper divertidas, fue un contacto bastante "recatado". Esto comenzó a crearme problemas con Luis, con sus celos; que ahora sé que no son más que inseguridades. No concebía que yo saliera sin él; pero es que cuando salíamos juntos la verdad era bastante aburrido y nos recogíamos tempranísimo porque el trabajaba cada sábado y cada domingo de mañana. Entonces cada vez que salíamos él venía, y a las 2 se quería ir a casa por este motivo, por supuesto yéndome yo con él. ¿Cómo iba a quedarme?
Y así comenzaron los tormentos y las crisis. Como dije, tuvimos varias rupturas porque yo empecé a darme cuenta de que estaba dejando de hacer muchas cosas por él, y en el fondo de mí sabía que llegaría un día en que me arrepentiría de haber dejado pasar tantas experiencias. Pero la otra cara de la moneda, de mucho peso, es que le quería, y le quiero.
No quiero extenderme más, así que iré ya al grano. Ahora mismo estamos bastante bien, llevamos un tiempo sin tener discusiones fuertes y la verdad es que creo que es uno de los mejores momentos de nuestra relación, si no el mejor. Pero, para mi sorpresa, yo no estoy bien...la verdad es que no estoy nada bien. Quizá sea porque he ido acumulando mucho, me he sentido como un pájaro enjaulado que veía al resto volar libres; y ahora todos esos sentimientos reprimidos me están pasando factura. Le quiero mucho, y me aporta cosas buenas, pero siento que necesito estar sola, necesito viajar... me gustaría irme fuera en verano a conocer otros países y aprender idiomas...me gustaría salir una noche hasta que amanezca y quedarme a dormir en casa de una amiga, para luego recordar todo al día siguiente... en fin, todas esas cosas que no he tenido desde muy joven. Y es que tengo 20 años, si no lo hago ahora sé que en un futuro no lo podré hacer... El problema está es que me resulta lo más difícil, la decisión más complicada de tomar... ¿Cómo dejar a una persona que se quiere? ¿Cómo decirle a alguien que quieres, que el motivo solo es que quiero ser libre? No podría soportar que él sufriera por mi.... además, es como si me hubiera vuelto adicta a él, creo que me costaría muchísimo dar dos pasos sola.... en fin amig@s, espero que mi historia les haya aportado algo, y desde luego, espero que ustedes me aporten algo a mí.
Si alguien quiere hablar de alguna situación parecida que estén viviendo, pueden dejarme sus correos y les agregaré. Un saludo a tod@s!