1 año de novios y 2 de convivencia. Felicidad al máximo por parte de ambos, Compenetración, apoyo, comprensión....amor. Las dos últimas semanas habíamos planeado las vacaciones, una mudanza, y además me tenía como a una reina, me decía lo mucho que me amaba, que no sabría que hacer sin mi amor, me sentía muy amada y protegida. Y el miércoles por la noche al volver del trabajo me dice que quiere dejarlo, que me quiere más que a nadie n el mundo, que soy su mejor y única amiga, pero que ha dejado de amarme. Que sabe el daño que me está haciendo pero que para él es la única salida, que las dos últimas semanas había intentado tirar del carro, mostrándome su amor en demasía por si acaso lo recuperaba, pero que no pudo ser, que se acabó. Y ahí estoy yo, sin derramar una sola lágrima para no ponerle las cosas más difíciles, sintiendo que mi vida se había desvanecido en apenas dos minutos. Mi día a día, mi futuro desapareció en un instante. Se marchó sin llevarse nada y al cerrar la puerta, todo el silencio de la casa se me vino encima. Anoche hablé con él y se encuentra muy bien por la decisión que ha tomado. Pero su decisión me roto los esquemas de mi vida completamente. No puedo dejar de amar a una persona de la noche a la mañana. Una persona a la que he entregado mi vida, mis ilusiones, mi ser, mi futuro....Mi cama está demasiado fría y ya no me quedan lágrimas que derramar. Pero sé que la vida está esperándome para devolverme la sonrisa, al igual que sé que cuando el lunes regrese a casa y no estén sus cosas todo estará demasiado vacío, pero hay que cerrar una puerta para poder abrir otras mil más. No me culpo por no haberle hecho conservar el amor que aun yo le profeso. También sé que cuando lo vea se me romperá un poquito más el corazón, que cuando escuche su voz tan sólo desearé su abrazo, pero os aseguro que aunque él era y es, mi pasado, mi presente y mi futuro, tengo muchas cosas más, familia, amigos, compañeros, y una vida sin él por delante. No puedo ni comer ni dormir, porque el dolor de su pérdida atenaza todo mi ser, pero algún día podré abrir los ojos y dejar que la dicha me guíe, entonces mi cama se llenará de rosas y las lágrimas que derrame serán de felicidad. Y sé que cuando tenga algún problema, será a mí a la que llame, hemos compartido demasiado como para ignorarnos, y ahí me tendrá, ofreciéndole mi hombro y mi apoyo, porque sé que algún día dejaré de amarlo y será un amigo muy especial, como especial ha sido lo nuestro, que mientras duró fue muy hermoso. Nunca pretenderé olvidar esos tres años. Fueron demasiado bonitos y yo fui muy feliz, como para tirarlos al retrete sin más. Algún día los recordaremos juntos y los añoraremos juntos. No hay marcha atrás. El me amó mucho y yo le amé demasiado.
Tan sólo decir que la vida me está esperando y que no la haré esperar ni un segundo más. Por él. Pero sobre todo por mí.
Mi dirección de correo por si alguien quiere hablar: eithen@terra.es.
Un abrazo y esperanzas para todos.