No lo creo...
Recientemente se ha descubierto que no solo las mujeres cuenta con ese famoso y muy buscado punto G; ya que el hombre también tiene el propio, un sitio muy sensible, que si se sabe explorar, puede provocar orgasmos de dimensiones no experimentadas. Sin embargo muchos hombres se niegan a descubrirlo por considerarlo antihigiénico o por miedo a perder parte de su masculinidad, pero para quienes ya han experimentado este mágnifico encuentro no dudan en repetir esta experiencia extremadamente satisfactoria.
El llamado punto G masculino, se encuentra en la próstata, glándula que genera el líquido seminal que transporta a los espermatozoides. Esta parte al recibir un adecuado masaje, le provoca al hombre orgasmos muy intensos. Sin embargo, no es tan fácil que él puede estimularse a sí mismo, ya que su punto G está dentro del recto, por lo tanto es muy necesaria la participación de su pareja.