Me había dejado de llamar y me he rayado por eso, es normal si pasamos de llamarnos todos los días a no hacerlo en 5, el dice que por esa misma regla de tres se podía haber rayado él y que como yo no le proponía quedar, él lo ha dejado correr, pero que no se va a rayar por nadie.
También sé algo que no le puedo decir y es que el viernes cuando quedamos y nos fuimos a las dos para casa porque él tenía que madrugar, estuvo conectado a una red social hasta las 3 y poniendo me gusta en las fotos de una tía.
Ha pasado de que concretemos si nos vamos a ver a decirme ya nos veremos por ahí si no me voy a otro sitio, porque quizás me vaya a otro pueblo a una fiesta que hay
Ha pasado de proponerme las vacaciones con el y sus amigos o sola con él, a irse y no comentarme nada.
Anoche cuando le hablé de su cambio de actitud, me dijo que YO era una rayada, que le estoy agobiando y que por lo pronto, este fin de semana se va por ahí.
Yo no sé qué hacer, justamente por la actitud que está tomando ahora yo deje de insistirle, le estaba intentando borrar de mi mente intentando hacer una vida feliz, pero al cabo de una semana de no decirle nada volvió a aparecer en mi vida y tonta de mí que accedí a hablar y quedar con él de nuevo, cuando ya no tenía ni su número memorizado.
Este juego absurdo cada vez me hace más daño, ojalá y pudiera tener la fuerza de voluntad suficiente como para que la llamada que tuvimos anoche sea el fin, porque no me da nada, más que disgustos y además siento por su parte una gran falta de atención.
Qué necesidad tengo???
