Esta claro que el hombre con solo verlas, si están bonitas, se le abre el apetito de tenerlas en su cama y gozarlas. ¡¡Negarlo sería una soberana tontería¡¡.
Pero por otro lado, en el caso de la mujer, por las razones que sea, no opera igual ese efecto visual; y para que acepten ser excitadas, se deben desplegar verdaderos culebrones venezolanos para que de buen grado acepten ir al placer.
Siendo esto tan diferente en uno y otro sexo, no sería una buena forma de acceder a algo que no es ningún delito, querer gozar del sexo con ustedes, que dicho sea de paso es un halago el desearlo, pues es una confesión implicita de los hermosas que las encontramos, simplemente compensando esa falta de deso inicial con algúna regalía material (seamos directos: dinero), pero para que se dejen excitar igualmente con dulzura y gentileza, de manera de, además de ganarse unos piticlines, obtener placer del encuentro....
En esas condiciones, estarías dispuesta a esa transacción?