Matrimonio feliz pero menos

No sé muy bien cómo empezar. Conocí a mi pareja con 20 años (tengo 31) y desde el primer momento fue un flechazo total y absoluto por ambas partes. Cuando empezamos a salir, me comentó como de pasada que estaba a tratamiento médico por una prostatitis y que de momento no podíamos tener relaciones sexuales por culpa de la medicación. En fin, pasó el tiempo y yo empecé a darme cuenta de que aquello no funcionaba como era debido. Cuando nos acostábamos, o bien no tenía una erección potente, o bien eyaculaba muy rápido, o simplemente le desaparecía la erección en mitad del acto. Esto fue degenerando de manera que era yo la que tenía que proponerle el tema siempre. Él no me buscaba nunca, y la verdad no me extraña porque para él era muy frustante. El caso es que yo a veces me enfadaba con él por eso y tampoco eso ayuda mucho. Han pasado los años y esto ha ido cuesta abajo sin freno. Yo he llegado a pensar de todo: que si tiene una amante, que si en realidad es homosexual... un montón de historias sin sentido. En el año 98 le "obligué" a ir a un sexólogo porque le hice ver que nos estaba perjudicando muchísimo en nuestra relación. He de decir que en la vida he encontrado a un hombre como él: es dulce, simpatiquísimo, me quiere con locura (me lo demostró cuando con 23 años yo estuve a punto de morir), y siempre ha apostado muy fuerte por mí. En el sexólogo nos dijeron que estaba completamente bloqueado, ya que físicamente está bien. El caso es que ahora llevamos 17 meses sin hacer el amor y yo estoy desesperada. Tengo temporadas que lo llevo mejor, pero cuando me pongo a pensar en ello me vuelvo loca. Me da la sensación que he perdido mi juventud y sin querer lo pago con él. Ahora, por iniciativa mía duermo en otra habitación desde hace 2 meses, a ver si reacciona, pero no. Le han recetado Viagra, pero ni siquiera ha intentado probarla. Yo he probado a ser yo la que lo intenta, a ser comprensiva y dulce, a no presionarle, a ignorarle y no hay forma humana. Otra cosa, nos besamos mucho y nos abrazamos, pero sin contenido sexual, y el caso es que yo ahora estoy empezando a rechazarle cuando me quiere besar de forma más profunda. No lo puedo evitar, pero es que ya no me atrae sexualmente. El caso es que lo quiero con locura, pero es un peso que llevo demasiado gordo. No sé que hacer. Tampoco se lo he podido decir nunca a nadie por respeto a él y me lo he comido todo yo sola. Sólo a mi madre y me dijo que me lo pensara bien antes de casarme con él. Pero claro, no todo es sexo, y sin embargo... Por favor, necesito otros puntos de vista.