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He dejado mi relación de cinco años... y todo es raro... no sé cómo me siento.

Última respuesta: 14 de octubre de 2016 a las 17:29
A
akiwi_a5fc60z
14/10/16 a las 11:15

Hola. Mi nombre es Noelia, y tengo 21 años. Hace una semana dejé la relación con mi pareja, con el que llevaba 5 años y medio... Y la verdad es que ahora mismo no sé cómo me siento.
Voy a explicaros un poco cómo ha sido nuestra relación y en la situación en la que estoy ahora, a ver qué me podéis decir...  Lo siento por el tocho, pero hay bastantes detalles que me gustaría contar. Y creo que ver todo esto escrito talvez me ayude un poco, ya que me siento super culpable y como la mala de una peli...

Empezamos a salir cuando yo tenía 16 años y él 17. Apenas nos conocíamos, sólo de vista en el instituto, y creo que este fue uno de los peores errores; el no conocernos, porque creo que nos idealizamos el uno al otro... De hecho, la relación no empezó nada bien, yo pensaba que lo había dejado con su ex y resultó ser mentira; seguía con ella. Me dejó una semana después de empezar, y hasta dos semanas después (el día de mi graduación) ni se dignó a hablarme. Dos semanas después me pidió salir... En fin, el caso es que el primer año transcurrió más o menos bien, excepto por el tema estudios, ya que mis padres no lo aceptaban muy bien (mi hermana y yo siempre hemos sido de 10 y MH y ese año yo empezaba bachillerato, y él repetía cuarto por segunda vez). Yo estaba bastante ilusionada y enamorada, y pensaba 'qué bien que nunca discutimos'... claro hasta que me di cuenta después de que nunca discutíamos porque yo me callaba todo xD por ejemplo, los viernes eran sagrados para salir con sus amigos, hubiese un plan más interesante o no (yo le decía que podíamos quedar el viernes para ir a X sitio, y que luego en el finde podía quedar con sus amigos sin problema, pero no había manera...), o estuve 'aguantando' mucho tiempo que se comiesen la nariz (literalmente, se la mordían jajaja) una amiga suya y él y cosas así, sinceramente no soy celosa, pero son cosas que me quemaban en ese momento... Por ejemplo que nada más empezar la relación se fue a Páis Vasco a ver a una de sus amigas, estuvimos 10 días sin hablar absolutamente nada, y cuando volvió no fue capaz ni siquiera de darme un beso. De hecho, el día que volvió me 'hizo' ir (lo pongo entre comillas, porque yo acepté ir) al cumpleaños de la hermana pequeña de uno de sus amigos :/ Imaginaos la situación, yendo al cumple de 10 años de la niña, yo que ni conocía a la familia ni nada, cabreada porque acababa de volver del viaje después de tanto tiempo sin hablarme y en fin xD De todo este tipo de cosas no se pudo hablar hasta tiempo después por dos motivos: él no aceptaba absolutamente nada, y a mí me daba miedo que me dejase.

A partir de las primeras vacaciones a las que fuimos juntos (con mi familia) las cosas cambiaron muchísimo. Discutimos un montón estando con mis padres en la playa, y a la vuelta no me sentía bien con él. En ese momento yo no sabía por qué, y creo que me di cuenta bastante después, de que lo que pasaba es que por primera vez yo estaba dando mi opinión sobre las cosas y estaba diciendo las actitudes y demás que me gustaban y las que no, y a él no le pareció bien... Conseguimos superar esta 'crisis', pero desde entonces, aunque me duela mucho reconocerlo, ya nada volvió a ser igual, no sentía la misma 'comodidad' que sentía antes estando con él. No me sentía enamorada... Llegué a autolesionarme en alguna ocasión debido a la desesperación que sentía cuando discutíamos. No se lo quería contar, porque para mi no era un medio de coacción ni nada así (y porque tampoco es algo de lo que me sienta orgullosa), pero al final lo vio y se cabreó muchísimo conmigo. Aunque realmente no sé si se enfadó porque yo me hubiese hecho daño o porque le recordaba a él: su ex le fue infiel y él decidió que lo mejor que podía haer era coger un cuchillo y rajarse los brazos (tiene el brazo derecho lleno de cicatrices enormes). En momentos como ese sentía que no me apoyaba, que más que eso yo le daba como 'yuyu'... Sin embargo le quería mucho, y él me decía que también me quería, así que seguimos juntos.

Durante todo este tiempo, hemos tenido rachas mejores y rachas peores. Momentos muy buenos y momentos muy malos, supongo que como en todas las parejas. La diferencia es que yo había ocasiones en las que sentía que no estaba bien con él, que no me hacía feliz. Incluso de llegar a casa y sentirme bien y 'segura', en el sentido de no tener que pasar más rato con él... Pero rápidamente desechaba la idea, y la enterraba en lo más hondo de mi pensamiento.

Siempre he sido una persona muy emocional,y por ello he sido la parte más sentimental de la relación y, en fin, supongo que la que más ilusiones se hacía. Sé perfectamente que no puedes esperar de la gente exactamente lo mismo que lo que tú les das, pero en ocasiones con él lo esperaba. Algún detalle porque sí, porque saliese de él (cosa que nunca llegó, por ejemplo yo le llevaba la merienda un montón de días a su casa, si veía alguna tontería que pudiese gustarle se la compraba...), algún 'qué guapa estas hoy' (cosa que tampoco llegó, algún 'te quiero' sin que tuviese que decirlo yo antes... Pero en fin, supongo que al final me terminé acostumbrando a cómo era y me resigné en ese sentido.
Es importante recalcar que él es una persona que presume de que se puede hablar de cualquier cosa con él, que es muy abierto etc... pero la realidad es de otra manera. Por ejemplo yo no podía hablar de dudas como ésta porque significaba comenzar una bronca. Pero de las grandes... Supongo que en este momento en el que vi que no había comunicación con mi pareja y que no la iba a haber, debería haber dejado la relación. Pero no lo hice, porque sentía que le quería.

Él nunca ha sido de salir mucho de casa y menos aún de salir de fiesta. Tanto él como yo jugamos videojuegos y tal, pero él hasta un punto un poco... extremo. Si no sale, se levanta por la mañana a las 10, juega hasta la hora de comer, juega desde después de comer hasta la hora de cenar, y desde después de cenar hasta las 4 de la mañana... Este es un tema del que hablaré después de todas formas. En fin, el caso es que como él no salía mucho, yo dejé de salir muchas veces con mis amigos y amigas de forma voluntaria para estar con él (error, lo sé y muchas veces cuando salía él venía...Imaginaos la situación: una persona que odia toda la música que esté relacionada con la fiesta (los dos somos 'heavys', pero yo cuando salgo me gusta bailar, cantar y demás...)que no bebe, no baila... y cuando él decidía que se iba a ir, yo a veces le decía 'quédate un ratito más con nosotros' (como mucho insistía dos o tres veces)y la mayoría de las veces ésto terminaba en bronca, porque decía que yo le coaccionaba a quedarse y a hacer algo que no le gustaba. Vale que igual era 'pesada' por insistir dos veces, pero creo que querer que tu novio se quede tampoco es tan raro :/ Pero en fin, podría aceptarlo sin más, yo le pedía perdón por ser una pesada y no aceptar lo que él quería, porque eso significaba que yo no respetaba su forma de ser, y fin de la historia... En el fondo siempre me he sentido culpable (incluso a día de hoy) por no aceptarle como era/es

El problema es que ésta fue la dinámica que empezaron a tomar todas las discusiones, especialmente estos dos últimos años. Normalmente, él siempre se molestaba por algo que yo hacía o decía, a mí me parecía que él me contestaba o me trataba muy mal en esa situación, pero me hacía ver que realmente quien la había cagado era yo, yo lloraba, me lamentaba, le pedía perdón por lo imbécil que había sido, y la cosa se quedaba ahí. Hasta que llegó un punto en el que pensé que tal vez yo tampoco fuese tan mala y que él de vez en cuando también metía la pata, pero para él era mentira... Siempre era yo el problema. Porque era pesada, o exagerada, o era muy emocional, me tomaba todo a pecho... Hasta el punto en el que, por poner un ejemplo, hace un mes estábamos cenando en una pizzería, donde él quería coger una promoción (cogiendo no sé qué pizza nos regalaban otra de nachos xD) y cuando llegamos allí nos dijeron que eso era para hacerlo online... se cogió un cabreo flipante. Yo le dije que no se preocupase, que pedía yo online con el móvil y que lo recogíamos en tienda,pero no pudimos hacerlo. Se cabreó más aún y yo le dije que no se enfadase tanto, que había cosas más importantes en el mundo por las que enfadarse, que aquello era una tontería... Bueno pues el rebote que se pilló creo que a día de hoy todavía no tiene nombre. No recuerdo exactamente qué me dijo, recuerdo que me gritó bastante allí delante de todo el mundo (alegando que no gritaba), y luego se sentó en la mesa a jugar con el móvil, y no me dirigió la palabra en media hora. Al final me tuve que ir al baño de la llorera que tenía pensando 'si es que esto no puede ser, si es que no podemos seguir así etc.' y cuando volví me dijo que era culpa mía por haberle insistido en que se calmase y decirle esas cosas. Y yo sentí que de verdad tenía la culpa, y que había sido una pesada y una idiota (y aún lo creo un poco... ) y acabé pidiéndole perdón muchas veces. Incluso ahora mismo me siento rastrera por contarlo así, porque me parece que me hago la víctima y le pongo a él como si fuese malísimo, y me da pena, y en el fondo pienso que él no puede ser así :/

Si tengo que decir que me he sentido apoyada y querida de verdad en esta relación mentiría. Discusiones como esas tuvimos mil, y es verdad que yo en el último año también terminaba por calentarme muchísimo y reaccionar gritando y demás.Pero había cosas que me ofendían demasiado, había cosas que sentía que no tenía que soportar, y cuando le pedía por favor hablar sobre los problemas que teníamos, él me decía que no tenía ningún problema, ni conmigo ni con la relación, que si yo veía problemas era cosa mía. Cada vez que discutíamos yo terminaba preguntándole si de verdad me quería, y su respuesta siempre era 'si no, ¿tú crees que iba a aguantar todo esto?' mientras me señalaba, porque muchas veces terminaba con ataques de ansiedad de la desesperación que me entraba de no poder solucionar nada.

Hay discusiones y reacciones por su parte que me han dejado marcada. Recuerdo uno de los años que se ha venido con nosotros de vacaciones, fuimos a dar una vuelta con la bici y yo me caí en una glorieta, en mitad de la carretera (soy así de torpe). Le llamé, y me vio, pero su reacción fue continuar con la bici y volvió casi 10 minutos después donde yo estaba. Cuando le pregunté llorando que por qué había hecho eso (porque sí, me sentí desprotegida y muy mal, realmente él no sabía si me había pasado algo grave o no), me dijo que había continuado para buscar un camino 'seguro' por el que dar la vuelta, y que era una histérica, que tampoco me había pasado nada... Esa misma noche intenté hablar con él sobre ello pero su respuesta fue la misma, y nunca lo 'solucionamos', porque la culpa simplemente era mía por sobrerreaccionar.

Fuimos a un concierto con unos amigos hace poco, en el que tocaban varios grupos y el que nos gustaba a nosotros era el último que tocaba. Estábamos aburridos, y estábamos hablando entre todos, haciendo tonterías y demás.Él llegó un punto en el que, aún no sabemos por qué, se abrochó la sudadera hasta arriba (a la altura de la nariz), se puso la capucha, se cruzó de brazos y estuvo media hora o más sin hablarnos a nadie. Y cada vez que le decía que me hablase o que no hiciese eso apelaba otra vez a su derecho a hacer lo que quisiese, y que le dejase en paz, que era lo que le apetecía hacer. Y yo le pedí perdón.

Estas últimas vacaciones estuvo super tenso las dos semanas que estuvimos con mi familia, aunque yo no entendía por qué (lo entendería más tarde, cuando me dijo que realmente vino porque sentía que si no iba yo me enfadaría, que fue obligado… cuando llevaba una semana diciéndole que si no quería venir no viniese). El caso es que al final yo también estaba muy tensa, y saltábamos por cualquier cosa y terminamos discutiendo casi todos los días… yo me sentía fatal por estar con mi familia y estar todo el rato de malas con él, y por el hecho de estar de vacaciones y estar así, pero cada vez que le decía que por qué me contestaba borde o por qué estaba raro, le quitaba importancia y sólo seguía comportándose de ese modo y jugando a Pokemon Go a todas horas con el móvil. Las discusiones que tuvimos fueron por diferentes motivos: por ejemplo porque decía que le agobiaba que yo hiciese bromas o comentarios del tipo ‘cuando vivamos juntos este será nuestro felpudo’, también discutimos por viajes, ya que decía que se negaba a ir a ninguno de los sitios en los que ya había estado antes con su familia, por ejemplo Italia o Londres, y yo no conseguía hacerle entender que a mí me encantaría visitar Italia con él (es un enamorado de la historia y yo del arte).Sé bien que el sitio es lo de menos, pero me molestaba mucho que dijese que se negaba y punto y no había más que hablar. Pero la ‘discusión’ que más me desconcertó fue cuando estaba en la playa jugando con él y mi hermana en una colchoneta de estas hinchables, nos subimos los tres a la vez y se rompió. Y se me ocurrió decir de broma: anda que ya te vale, justo te subes y se rompe !!!... Bueno pues se salió del agua y no me dirigió la palabra hasta por la noche :/ e intenté hablar con él, y al final terminé pidiéndole perdón por haber hecho esa broma, asegurándole que no iba a malas.

Cuando volvimos de vacaciones eran las fiestas de mi ciudad, y ‘salimos’ dos días; uno yo salí con mis amigos y él con los suyos y luego nos encontramos, y otro salimos los dos con sus amigos. El caso es que las dos noches terminamos discutiendo. Hasta las cinco de la mañana. Y lo peor es que ni siquiera recuerdo por qué empezaron las discusiones ni cómo, sólo sé lo mal que nos hablamos y lo mucho que nos calentamos, y que yo al final le dije que tantas discusiones iban a acabar por dejar huella y él simplemente respondió: si a ti te afectan las discusiones es cosa tuya, porque yo discuto y luego me voy a la cama tan tranquilo, duermo ‘fetén’ y a la mañana siguiente me levanto como si nada’. Es verdad que llegamos a faltarnos el respeto en muchas ocasiones, y no voy a negar que a veces le insulté, cosa que no debería haber hecho jamás, y de la que me arrepiento muchísimo. No lo justifico de ninguna manera, simplemente llegaba un punto en el que estaba tan desesperada y ya no sabía qué hacer, porque le dijese lo que dijese, intentase hablar o no, las cosas siempre terminaban igual de mal. De hecho, él en muchas ocasiones me decía después de discutir ‘yo ya no sé si quiero seguir con esto’ etc. y la verdad es que se convirtió en algo habitual. No quiero decir que me lo dijese a modo de ‘amenaza’, pero es verdad que se convirtió en una forma de terminar las discusiones. Porque a mí me entraba el miedo, le pedía perdón por todo y al día siguiente me levantaba con más ganas de arreglarlo y de hacer las cosas aún mejor… Sin embargo, a partir de la última discusión que tuvimos en las fiestas, ésto no fue así. No sé si el vaso se rebasó, no sé qué me ocurrió exactamente, pero sentía que algo dentro de mí se había roto. Entre otras cosas esa noche me dijo que siempre me había dicho que entendía por qué me había puesto ‘celosa’ al principio de la relación (estoy hablando de hace 5 años, de algo que ya había hablado con él y por lo que me arrepentí muchísimo y le pedí perdón, pero él me dijo que comprendía por qué me había puesto así etc), pero esa noche me soltó que nunca lo había entendido y que nunca lo iba a entender. Que había dejado de hablar con ellas por mi culpa, para que yo no me enfadase. Y sí, me sentí de lo peor. Me sentí como ese tipo de novia histérica que siempre había odiado y no quería ser… Y me volvió a repetir lo de que no sabía si quería estar conmigo. Pero la diferencia fue que esta vez a la mañana siguiente la que no sabía si quería volver era yo...

Por otro lado, lo que decía de no sentirme apoyada... En fin lo puedo ilustrar con cosas como que piensa que es una locura pagar 50 euros para estar en una asociación canina y poder ayudar a los perros, sacarles, darles de comer etc. porque eso no reporta ningún beneficio económico. Al igual que en una asociación de chavales en la que estoy, vamos con niños y niñas de 8 a 17 años los sábados por la tarde… y a eso lo llamaba la secta. Cosa que le dije mil veces que me ofendía, que yo no le pedía que le gustase pero que al menos lo respetase… y como siempre la contestación fue que él decía lo que quería y cuando quería, que si me ofende es mi culpa :/ al final la única solución que me dio fue que hubiese temas tabú, en plan temas de los que no hablaríamos como esta asociación, o temas de política, nada sobre su familia… Para que me entendáis: a mí me mueve intentar cambiar el mundo. Sé que suena super ambicioso y que es una locura, pero me encanta ayudar a la gente y a los animales, estudio Educación Infantil, y tal vez esté mal pensar así, pero a veces creía que el día de mañana iba a tener que dejar de hacer lo que me gusta y lo que me llena porque a él no le gusta, y porque me lo recriminaba muchas veces… y tampoco me gustaba demasiado esa idea. Además yo no entendía por qué tenía que meterse conmigo por lo de la asociación y decirme que no le parecía normal cuando él se pasa jugando 16 horas al día jugando online. Que tiene un ‘clan’ con gente con la que lleva jugando 8 años, que no conoce en persona y yo nunca le he dicho nada sobre ello, porque por muy ‘raro’ que me pudiese parecer a mí, si a él le gustaba y le hacía sentir bien pues ya está. El único comentario que le he podido hacer sobre esto ha sido que creía que jugaba demasiado. Y obviamente esto también terminaba en bronca, porque le onfendía y porque él podía hacer lo que quisiese y punto.

El tema de jugar y demás se ha visto ‘agravado’ en este último año, ya que él ha estado sin hacer nada, ni estudiar ni trabajar, de manera voluntaria. Y claro, estaba casi todo el día en casa, y jugaba todo el rato… Y el tema de lo de buscar trabajo y/o estudiar era otra guerra. Llegó un punto en el que no podía ni mencionarlo. Durante este año hizo dos cursos (de dos días cada uno) porque yo le pasé los links por si le interesaban, y encima se enfadó conmigo. Porque decía que era como su madre, que era una pesada y que no iba a hacer nada. Que además no iba a buscar ningún trabajo porque pasaba de estar en ningún curro de mierda mal pagado, pudiendo estar en su casa sin más, que él estaba muy bien en casa jugando. El tema se volvió tabú, y desde junio de este año no quise volver a mencionarlo porque tuvimos una bronca enorme hablando sobre ello. Me dijo que le agobiaba demasiado, que le dejase en paz, que si no quería trabajar ni estudiar no lo hacía y punto y que yo no era su madre para decirle lo que tenía que hacer (jamás le obligué a nada, o al menos yo no lo sentía así, creo que intentaba darle siempre mi opinión&hellip en definitiva, lo de siempre, que él era libre y podía hacer lo que quisiese y yo no tenía que decirle nada. Y sentí que tenía razón, así que me disculpé por haber intentado que hiciese algo que él no quería… Hace un mes me dijo de repente que realmente sí le habían llamado de una entrevista de trabajo que hizo para una pizzería, pero que no me lo había querido contar porque seguro que me iba a poner pesada y le iba a decir que fuese. Y que me lo contaba ahora porque había pasado mucho tiempo y ya habían cogido a otras personas para trabajar allí.

También es una persona super egoísta y egocéntrica, con cero empatía, que decía sentirse orgulloso de ello. Él siempre estaba por delante y encima de los demás por y para todo, no podía hacerle un favor a nadie (al menos de normal) y si lo hacía, lo recordaba durante mucho tiempo. Por la única que hacía algo de vez en cuando era por mí, eso tengo que reconocerlo, pero luego siempre me lo echaba en cara, a modo de ‘acuérdate de cuando te acompañé a…’ por ejemplo, cuando fue mi graduación de bachillerato él vino al acto pero no a la fiesta de después, a la que estaba invitado. No fue porque me dijo que no le apetecía, y que allí no pintaba nada. Pero resulta que el mismo día de mi graduación acabamos discutiendo porque me dijo que se tenía que ir pronto, porque se iba a la fiesta de después de la graduación de una amiga de sus amigos… Obviamente me enfadé. Y tal vez fui exagerada. Pero me sentí mal y ‘menospreciada’... y al final la respuesta fue la de siempre, que él hacía lo que quería y yo no tenía que hacerle sentir mal por ello.

Con mi familia pienso que tampoco se ha portado muy bien. Para mí mi familia es muy importante, especialmente mis padres, mi hermana y mis abuelos. Y mis abuelos muchas veces le han invitado a ir al pueblo, a la parcela, a comer con ellos a su casa etc. y él casi siempre lo ha rechazado. Y las veces que ha ido ha estado apático y luego me lo ha echado en cara, porque dice que ha ido porque se sentía obligado por mí. Con mi madre, en cinco años que hemos estado juntos y con todas las veces que ha estado en mi casa (porque muchas tardes de domingo consistían en que viniese a mi casa, jugaba a juegos en mi ordenador y yo miraba cómo jugaba, o veíamos vídeos en Youtube… ) no ha sido capaz de mantener una conversación. Mi madre le preguntaba qué tal, qué tal el instituto, sus padres y demás y la respuesta siempre era ‘bien’. Y ya está.

El tema de salir, casi siempre hacíamos lo mismo. O él venía a mi casa o yo iba a la suya y normalmente él jugaba en el ordenador, a veces también jugaba yo, veíamos vídeos en youtube, otras veces veíamos pelis… Pero salir lo que es salir, apenas salíamos. Como mucho íbamos a un centro comercial de aquí a dar una vuelta, y un par de veces a museos. No podíamos hacer otra cosa tampoco porque él decía que nunca tenía dinero (de hecho muchas de las veces que hemos salido le he invitado yo, cosa que no me molesta pero creo que se acostumbró a ello), y el poco dinero que tenía lo quería ahorrar para tatuarse. Los planes ‘diferentes’ casi nunca le apetecían o le parecían mal… No sé tal vez es que yo sea muy rara. Pero si a mí me está diciendo que no a salir de fiesta y luego lo hace con sus amigos, pues suena raro… y duele un poco. Pero ya no sólo salir de fiesta, irnos de vacaciones con unos amigos a una casa rural tampoco, ir a un camping tampoco, sólo si íbamos a su casa de la playa… cosas así.

A pesar de todo,me sentía (y en parte me siento) enganchada a él. A sus besos, a sus abrazos. A su forma ambivalente de quererme. Porque en cinco minutos pasaba de estar gritándome y echándome cosas en cara, a abrazarme o darme un beso, cosas así… supongo que esto es lo que más me unía a él… y el sentimiento de que nadie más va a quererme, de que no valgo la pena… de que en realidad sí soy una loca, que soy una exagerada… que la única forma de amor que merezco es ésta.

El caso es que después de muchas conversaciones con mi madre y con mi psicóloga, el miércoles pasado me decidí a hablar con él en serio, quisiese o no. El martes le dije que por favor el miércoles necesitaba hablar con él, y en lugar de decirme que vale o lo que fuese, se enfadó muchísimo y me pidió que lo que tuviese que decir se lo dijese por wassap… como si le dejaba, que se lo dijese por wassap y punto. Yo le dije que no, que a la cara… y el miércoles estuvo super a la defensiva. Me dijo que él no venía absolutamente ningún problema en la relación, que si yo veía alguno era cosa mía. Y que en caso de haber habido algún problema, ha sido mi culpa. Cualquier problema que haya habido en la relación ha sido cosa mía , y me dijo que si miraba atrás en toda la relación, él no pensaba que hubiese hecho nada mal. Le intenté comentar cosas que me habían molestado y demás y me volvió a decir que él hacía y decía lo que quería y  que me dejas de gilipolleces y le dijese lo que le tuviese se que decir. Así que a pesar de que me costó muchísimo decidí dejarlo. Mentiría si digo que me fue fácil, de hecho lo que más me costó fue irme… porque además él parecía que se arrepentía ligeramente de haberse portado así. En cuanto al contacto, le dije que él decidía, pero que creía que éramos adultos y que tampoco era necesario cortar absolutamente todo de raíz. Menudo error… desde el miércoles por la noche pasado (día que lo dejamos) hasta este martes por la noche me ha estado hablando por wassap constantemente, y cuando digo constantemente es que me hablaba más ahora que cuando estábamos juntos. Diciéndome que de repente se había dado cuenta de lo mal que me había tratado. Que ahora caía en que yo le tenía por un apoyo y que él me había fallado, por ejemplo cuando le conté que iba a la psicóloga y él le restó importancia y cosas así (sinceramente más que ablandarme me sentó como una patada en el culo que me dijese que después de cinco años se daba cuenta AHORA de que yo le había tenido por un apoyo). Que de la noche del miércoles a la mañana del jueves se dio cuenta de que había hecho mal y me pedía desesperadamente otra oportunidad, que esta vez cambiaría, que además él no veía las cosas tan mal, que creía que tenía solución, que yo era muy exagerada porque las cosas no estaban tan mal… El tema es que 1) me sentía muy agobiada porque si acabamos de dejarlo, y de la manera en la que lo dejamos, por favor no estés agobiándome a mensajes cada hora por wassap… y 2) nunca he terminado de creerme sus disculpas, porque cada vez que me pide perdón por algo añade que yo soy exagerada, que si no lo arreglamos es porque yo no quiero etc. Y tal vez tiene razón y es que ahora ya no quiero… igual me he cansado, no sé si con motivo o sin él. Hoy estamos a viernes y no le he vuelto a contestar desde el martes. ¿Por qué? porque me ha dicho cosas muy feas, que puedo llegar a entender por la situación en la que él está, pero cosas muy injustas… me sigue culpando por todo, a pesar de que se disculpe, siempre añade algo culpándome. Además, él cree que es porque hay otro chico. Lo cual me jode aún más, porque me hace darme cuenta de que realmente no se arrepiente de nada, porque no ve el error, simplemente me dice que estoy pasando por una etapa rara de mi vida, que estoy en una crisis en mi familia, en la universidad y demás y que el problema que tengo con él realmente viene de esta crisis. Me jode, porque realmente cree que no había nada mal en la relación.

Ahora mismo me siento gilipollas. Porque tengo una mezcla de sentimientos. Por un lado, me siento como una persona horrible, me siento fatal por haberle dejado, por hacerle pasarlo mal y porque además aún sigo creyendo que tengo la culpa de todas estas cosas, y de que la relación no haya funcionado. Y lo triste es pensar que le quiero… y dudar si he hecho bien, si he hecho mal, si tal vez no voy a lograr superarlo. Me da mucho miedo todo… Racionalmente hablando sé que no podíamos seguir así, y después de años intentando buscar una solución no la hemos encontrado, así que simplemente tal vez lo nuestro no funcionaba. No sé. El caso es que la mala y la que no quiere darle ahora otra oportunidad soy yo. ¿Y si ahora de verdad cambiase? Pero es que, por mucho que quiera creerlo, en el fondo sé que no. Primero porque las personas no cambian nunca, y segundo porque yo no quiero estar con una persona a la que estoy ‘obligando’ a cambiar. Creo que hay cosas que deben salir de uno mismo, y si esto no es así pues tal vez no estamos hechos para estar juntos, no encajamos… El hecho es que yo siento que tal vez he tirado la toalla muy pronto. Y además, contando todo esto, me siento mala persona. Me siento victimista. Porque tal vez sí he sido una exagerada todo este tiempo y él sólo ha estado sufriendo las consecuencias de mis reacciones y demás… no sé.

Por otro lado, tengo a gente a mi alrededor preguntándome si estoy ciega. Mi hermana ha estado delante en muchas de estas discusiones, o ha venido con nosotros muchas de las veces que hemos quedado… y ella lleva diciéndome años que actúa muy raro y que nuestra relación no era sana. Que abra los ojos. Me han dicho que me ha tenido manipulada hasta el punto de llegar a creer de mí misma que estoy loca o que me imagino que hay problemas en la relación cuando no las hay, que siempre me ha hecho sentir culpable por todo y yo me he acostumbrado, y por eso ahora también sigo sintiéndome culpable. No sé.

Por qué no puedo olvidarle sin más… Me gustaría dejar de quererle y punto. Todo sería más fácil. Me sería más fácil ver todo esto más claro si a pesar de todo no sintiese que hay algún sentimiento que me une a él. Lo miro desde fuera, y si fuese mi hermana la que me contase algo así con su novio, yo le recomendaría que lo dejasen porque se están haciendo daño mutuamente. Pero no entiendo por qué no puedo verlo así conmigo, por qué cada vez que pienso que me ha podido manipular me lo niego y soy incapaz de verle de esa manera…. En fin. Me gustaría saber qué pensáis de todo esto, si tal vez he sido una exagerada de verdad, o qué veis en una relación así…. No sé.

Gracias por leer todo el tocho (y aún así me he dejado muchas cosas)

 

Ver también

A
apanda_ff035fz
14/10/16 a las 15:25
En respuesta a akiwi_a5fc60z

Hola. Mi nombre es Noelia, y tengo 21 años. Hace una semana dejé la relación con mi pareja, con el que llevaba 5 años y medio... Y la verdad es que ahora mismo no sé cómo me siento.
Voy a explicaros un poco cómo ha sido nuestra relación y en la situación en la que estoy ahora, a ver qué me podéis decir...  Lo siento por el tocho, pero hay bastantes detalles que me gustaría contar. Y creo que ver todo esto escrito talvez me ayude un poco, ya que me siento super culpable y como la mala de una peli...

Empezamos a salir cuando yo tenía 16 años y él 17. Apenas nos conocíamos, sólo de vista en el instituto, y creo que este fue uno de los peores errores; el no conocernos, porque creo que nos idealizamos el uno al otro... De hecho, la relación no empezó nada bien, yo pensaba que lo había dejado con su ex y resultó ser mentira; seguía con ella. Me dejó una semana después de empezar, y hasta dos semanas después (el día de mi graduación) ni se dignó a hablarme. Dos semanas después me pidió salir... En fin, el caso es que el primer año transcurrió más o menos bien, excepto por el tema estudios, ya que mis padres no lo aceptaban muy bien (mi hermana y yo siempre hemos sido de 10 y MH y ese año yo empezaba bachillerato, y él repetía cuarto por segunda vez). Yo estaba bastante ilusionada y enamorada, y pensaba 'qué bien que nunca discutimos'... claro hasta que me di cuenta después de que nunca discutíamos porque yo me callaba todo xD por ejemplo, los viernes eran sagrados para salir con sus amigos, hubiese un plan más interesante o no (yo le decía que podíamos quedar el viernes para ir a X sitio, y que luego en el finde podía quedar con sus amigos sin problema, pero no había manera...), o estuve 'aguantando' mucho tiempo que se comiesen la nariz (literalmente, se la mordían jajaja) una amiga suya y él y cosas así, sinceramente no soy celosa, pero son cosas que me quemaban en ese momento... Por ejemplo que nada más empezar la relación se fue a Páis Vasco a ver a una de sus amigas, estuvimos 10 días sin hablar absolutamente nada, y cuando volvió no fue capaz ni siquiera de darme un beso. De hecho, el día que volvió me 'hizo' ir (lo pongo entre comillas, porque yo acepté ir) al cumpleaños de la hermana pequeña de uno de sus amigos :/ Imaginaos la situación, yendo al cumple de 10 años de la niña, yo que ni conocía a la familia ni nada, cabreada porque acababa de volver del viaje después de tanto tiempo sin hablarme y en fin xD De todo este tipo de cosas no se pudo hablar hasta tiempo después por dos motivos: él no aceptaba absolutamente nada, y a mí me daba miedo que me dejase.

A partir de las primeras vacaciones a las que fuimos juntos (con mi familia) las cosas cambiaron muchísimo. Discutimos un montón estando con mis padres en la playa, y a la vuelta no me sentía bien con él. En ese momento yo no sabía por qué, y creo que me di cuenta bastante después, de que lo que pasaba es que por primera vez yo estaba dando mi opinión sobre las cosas y estaba diciendo las actitudes y demás que me gustaban y las que no, y a él no le pareció bien... Conseguimos superar esta 'crisis', pero desde entonces, aunque me duela mucho reconocerlo, ya nada volvió a ser igual, no sentía la misma 'comodidad' que sentía antes estando con él. No me sentía enamorada... Llegué a autolesionarme en alguna ocasión debido a la desesperación que sentía cuando discutíamos. No se lo quería contar, porque para mi no era un medio de coacción ni nada así (y porque tampoco es algo de lo que me sienta orgullosa), pero al final lo vio y se cabreó muchísimo conmigo. Aunque realmente no sé si se enfadó porque yo me hubiese hecho daño o porque le recordaba a él: su ex le fue infiel y él decidió que lo mejor que podía haer era coger un cuchillo y rajarse los brazos (tiene el brazo derecho lleno de cicatrices enormes). En momentos como ese sentía que no me apoyaba, que más que eso yo le daba como 'yuyu'... Sin embargo le quería mucho, y él me decía que también me quería, así que seguimos juntos.

Durante todo este tiempo, hemos tenido rachas mejores y rachas peores. Momentos muy buenos y momentos muy malos, supongo que como en todas las parejas. La diferencia es que yo había ocasiones en las que sentía que no estaba bien con él, que no me hacía feliz. Incluso de llegar a casa y sentirme bien y 'segura', en el sentido de no tener que pasar más rato con él... Pero rápidamente desechaba la idea, y la enterraba en lo más hondo de mi pensamiento.

Siempre he sido una persona muy emocional,y por ello he sido la parte más sentimental de la relación y, en fin, supongo que la que más ilusiones se hacía. Sé perfectamente que no puedes esperar de la gente exactamente lo mismo que lo que tú les das, pero en ocasiones con él lo esperaba. Algún detalle porque sí, porque saliese de él (cosa que nunca llegó, por ejemplo yo le llevaba la merienda un montón de días a su casa, si veía alguna tontería que pudiese gustarle se la compraba...), algún 'qué guapa estas hoy' (cosa que tampoco llegó, algún 'te quiero' sin que tuviese que decirlo yo antes... Pero en fin, supongo que al final me terminé acostumbrando a cómo era y me resigné en ese sentido.
Es importante recalcar que él es una persona que presume de que se puede hablar de cualquier cosa con él, que es muy abierto etc... pero la realidad es de otra manera. Por ejemplo yo no podía hablar de dudas como ésta porque significaba comenzar una bronca. Pero de las grandes... Supongo que en este momento en el que vi que no había comunicación con mi pareja y que no la iba a haber, debería haber dejado la relación. Pero no lo hice, porque sentía que le quería.

Él nunca ha sido de salir mucho de casa y menos aún de salir de fiesta. Tanto él como yo jugamos videojuegos y tal, pero él hasta un punto un poco... extremo. Si no sale, se levanta por la mañana a las 10, juega hasta la hora de comer, juega desde después de comer hasta la hora de cenar, y desde después de cenar hasta las 4 de la mañana... Este es un tema del que hablaré después de todas formas. En fin, el caso es que como él no salía mucho, yo dejé de salir muchas veces con mis amigos y amigas de forma voluntaria para estar con él (error, lo sé y muchas veces cuando salía él venía...Imaginaos la situación: una persona que odia toda la música que esté relacionada con la fiesta (los dos somos 'heavys', pero yo cuando salgo me gusta bailar, cantar y demás...)que no bebe, no baila... y cuando él decidía que se iba a ir, yo a veces le decía 'quédate un ratito más con nosotros' (como mucho insistía dos o tres veces)y la mayoría de las veces ésto terminaba en bronca, porque decía que yo le coaccionaba a quedarse y a hacer algo que no le gustaba. Vale que igual era 'pesada' por insistir dos veces, pero creo que querer que tu novio se quede tampoco es tan raro :/ Pero en fin, podría aceptarlo sin más, yo le pedía perdón por ser una pesada y no aceptar lo que él quería, porque eso significaba que yo no respetaba su forma de ser, y fin de la historia... En el fondo siempre me he sentido culpable (incluso a día de hoy) por no aceptarle como era/es

El problema es que ésta fue la dinámica que empezaron a tomar todas las discusiones, especialmente estos dos últimos años. Normalmente, él siempre se molestaba por algo que yo hacía o decía, a mí me parecía que él me contestaba o me trataba muy mal en esa situación, pero me hacía ver que realmente quien la había cagado era yo, yo lloraba, me lamentaba, le pedía perdón por lo imbécil que había sido, y la cosa se quedaba ahí. Hasta que llegó un punto en el que pensé que tal vez yo tampoco fuese tan mala y que él de vez en cuando también metía la pata, pero para él era mentira... Siempre era yo el problema. Porque era pesada, o exagerada, o era muy emocional, me tomaba todo a pecho... Hasta el punto en el que, por poner un ejemplo, hace un mes estábamos cenando en una pizzería, donde él quería coger una promoción (cogiendo no sé qué pizza nos regalaban otra de nachos xD) y cuando llegamos allí nos dijeron que eso era para hacerlo online... se cogió un cabreo flipante. Yo le dije que no se preocupase, que pedía yo online con el móvil y que lo recogíamos en tienda,pero no pudimos hacerlo. Se cabreó más aún y yo le dije que no se enfadase tanto, que había cosas más importantes en el mundo por las que enfadarse, que aquello era una tontería... Bueno pues el rebote que se pilló creo que a día de hoy todavía no tiene nombre. No recuerdo exactamente qué me dijo, recuerdo que me gritó bastante allí delante de todo el mundo (alegando que no gritaba), y luego se sentó en la mesa a jugar con el móvil, y no me dirigió la palabra en media hora. Al final me tuve que ir al baño de la llorera que tenía pensando 'si es que esto no puede ser, si es que no podemos seguir así etc.' y cuando volví me dijo que era culpa mía por haberle insistido en que se calmase y decirle esas cosas. Y yo sentí que de verdad tenía la culpa, y que había sido una pesada y una idiota (y aún lo creo un poco... ) y acabé pidiéndole perdón muchas veces. Incluso ahora mismo me siento rastrera por contarlo así, porque me parece que me hago la víctima y le pongo a él como si fuese malísimo, y me da pena, y en el fondo pienso que él no puede ser así :/

Si tengo que decir que me he sentido apoyada y querida de verdad en esta relación mentiría. Discusiones como esas tuvimos mil, y es verdad que yo en el último año también terminaba por calentarme muchísimo y reaccionar gritando y demás.Pero había cosas que me ofendían demasiado, había cosas que sentía que no tenía que soportar, y cuando le pedía por favor hablar sobre los problemas que teníamos, él me decía que no tenía ningún problema, ni conmigo ni con la relación, que si yo veía problemas era cosa mía. Cada vez que discutíamos yo terminaba preguntándole si de verdad me quería, y su respuesta siempre era 'si no, ¿tú crees que iba a aguantar todo esto?' mientras me señalaba, porque muchas veces terminaba con ataques de ansiedad de la desesperación que me entraba de no poder solucionar nada.

Hay discusiones y reacciones por su parte que me han dejado marcada. Recuerdo uno de los años que se ha venido con nosotros de vacaciones, fuimos a dar una vuelta con la bici y yo me caí en una glorieta, en mitad de la carretera (soy así de torpe). Le llamé, y me vio, pero su reacción fue continuar con la bici y volvió casi 10 minutos después donde yo estaba. Cuando le pregunté llorando que por qué había hecho eso (porque sí, me sentí desprotegida y muy mal, realmente él no sabía si me había pasado algo grave o no), me dijo que había continuado para buscar un camino 'seguro' por el que dar la vuelta, y que era una histérica, que tampoco me había pasado nada... Esa misma noche intenté hablar con él sobre ello pero su respuesta fue la misma, y nunca lo 'solucionamos', porque la culpa simplemente era mía por sobrerreaccionar.

Fuimos a un concierto con unos amigos hace poco, en el que tocaban varios grupos y el que nos gustaba a nosotros era el último que tocaba. Estábamos aburridos, y estábamos hablando entre todos, haciendo tonterías y demás.Él llegó un punto en el que, aún no sabemos por qué, se abrochó la sudadera hasta arriba (a la altura de la nariz), se puso la capucha, se cruzó de brazos y estuvo media hora o más sin hablarnos a nadie. Y cada vez que le decía que me hablase o que no hiciese eso apelaba otra vez a su derecho a hacer lo que quisiese, y que le dejase en paz, que era lo que le apetecía hacer. Y yo le pedí perdón.

Estas últimas vacaciones estuvo super tenso las dos semanas que estuvimos con mi familia, aunque yo no entendía por qué (lo entendería más tarde, cuando me dijo que realmente vino porque sentía que si no iba yo me enfadaría, que fue obligado… cuando llevaba una semana diciéndole que si no quería venir no viniese). El caso es que al final yo también estaba muy tensa, y saltábamos por cualquier cosa y terminamos discutiendo casi todos los días… yo me sentía fatal por estar con mi familia y estar todo el rato de malas con él, y por el hecho de estar de vacaciones y estar así, pero cada vez que le decía que por qué me contestaba borde o por qué estaba raro, le quitaba importancia y sólo seguía comportándose de ese modo y jugando a Pokemon Go a todas horas con el móvil. Las discusiones que tuvimos fueron por diferentes motivos: por ejemplo porque decía que le agobiaba que yo hiciese bromas o comentarios del tipo ‘cuando vivamos juntos este será nuestro felpudo’, también discutimos por viajes, ya que decía que se negaba a ir a ninguno de los sitios en los que ya había estado antes con su familia, por ejemplo Italia o Londres, y yo no conseguía hacerle entender que a mí me encantaría visitar Italia con él (es un enamorado de la historia y yo del arte).Sé bien que el sitio es lo de menos, pero me molestaba mucho que dijese que se negaba y punto y no había más que hablar. Pero la ‘discusión’ que más me desconcertó fue cuando estaba en la playa jugando con él y mi hermana en una colchoneta de estas hinchables, nos subimos los tres a la vez y se rompió. Y se me ocurrió decir de broma: anda que ya te vale, justo te subes y se rompe !!!... Bueno pues se salió del agua y no me dirigió la palabra hasta por la noche :/ e intenté hablar con él, y al final terminé pidiéndole perdón por haber hecho esa broma, asegurándole que no iba a malas.

Cuando volvimos de vacaciones eran las fiestas de mi ciudad, y ‘salimos’ dos días; uno yo salí con mis amigos y él con los suyos y luego nos encontramos, y otro salimos los dos con sus amigos. El caso es que las dos noches terminamos discutiendo. Hasta las cinco de la mañana. Y lo peor es que ni siquiera recuerdo por qué empezaron las discusiones ni cómo, sólo sé lo mal que nos hablamos y lo mucho que nos calentamos, y que yo al final le dije que tantas discusiones iban a acabar por dejar huella y él simplemente respondió: si a ti te afectan las discusiones es cosa tuya, porque yo discuto y luego me voy a la cama tan tranquilo, duermo ‘fetén’ y a la mañana siguiente me levanto como si nada’. Es verdad que llegamos a faltarnos el respeto en muchas ocasiones, y no voy a negar que a veces le insulté, cosa que no debería haber hecho jamás, y de la que me arrepiento muchísimo. No lo justifico de ninguna manera, simplemente llegaba un punto en el que estaba tan desesperada y ya no sabía qué hacer, porque le dijese lo que dijese, intentase hablar o no, las cosas siempre terminaban igual de mal. De hecho, él en muchas ocasiones me decía después de discutir ‘yo ya no sé si quiero seguir con esto’ etc. y la verdad es que se convirtió en algo habitual. No quiero decir que me lo dijese a modo de ‘amenaza’, pero es verdad que se convirtió en una forma de terminar las discusiones. Porque a mí me entraba el miedo, le pedía perdón por todo y al día siguiente me levantaba con más ganas de arreglarlo y de hacer las cosas aún mejor… Sin embargo, a partir de la última discusión que tuvimos en las fiestas, ésto no fue así. No sé si el vaso se rebasó, no sé qué me ocurrió exactamente, pero sentía que algo dentro de mí se había roto. Entre otras cosas esa noche me dijo que siempre me había dicho que entendía por qué me había puesto ‘celosa’ al principio de la relación (estoy hablando de hace 5 años, de algo que ya había hablado con él y por lo que me arrepentí muchísimo y le pedí perdón, pero él me dijo que comprendía por qué me había puesto así etc), pero esa noche me soltó que nunca lo había entendido y que nunca lo iba a entender. Que había dejado de hablar con ellas por mi culpa, para que yo no me enfadase. Y sí, me sentí de lo peor. Me sentí como ese tipo de novia histérica que siempre había odiado y no quería ser… Y me volvió a repetir lo de que no sabía si quería estar conmigo. Pero la diferencia fue que esta vez a la mañana siguiente la que no sabía si quería volver era yo...

Por otro lado, lo que decía de no sentirme apoyada... En fin lo puedo ilustrar con cosas como que piensa que es una locura pagar 50 euros para estar en una asociación canina y poder ayudar a los perros, sacarles, darles de comer etc. porque eso no reporta ningún beneficio económico. Al igual que en una asociación de chavales en la que estoy, vamos con niños y niñas de 8 a 17 años los sábados por la tarde… y a eso lo llamaba la secta. Cosa que le dije mil veces que me ofendía, que yo no le pedía que le gustase pero que al menos lo respetase… y como siempre la contestación fue que él decía lo que quería y cuando quería, que si me ofende es mi culpa :/ al final la única solución que me dio fue que hubiese temas tabú, en plan temas de los que no hablaríamos como esta asociación, o temas de política, nada sobre su familia… Para que me entendáis: a mí me mueve intentar cambiar el mundo. Sé que suena super ambicioso y que es una locura, pero me encanta ayudar a la gente y a los animales, estudio Educación Infantil, y tal vez esté mal pensar así, pero a veces creía que el día de mañana iba a tener que dejar de hacer lo que me gusta y lo que me llena porque a él no le gusta, y porque me lo recriminaba muchas veces… y tampoco me gustaba demasiado esa idea. Además yo no entendía por qué tenía que meterse conmigo por lo de la asociación y decirme que no le parecía normal cuando él se pasa jugando 16 horas al día jugando online. Que tiene un ‘clan’ con gente con la que lleva jugando 8 años, que no conoce en persona y yo nunca le he dicho nada sobre ello, porque por muy ‘raro’ que me pudiese parecer a mí, si a él le gustaba y le hacía sentir bien pues ya está. El único comentario que le he podido hacer sobre esto ha sido que creía que jugaba demasiado. Y obviamente esto también terminaba en bronca, porque le onfendía y porque él podía hacer lo que quisiese y punto.

El tema de jugar y demás se ha visto ‘agravado’ en este último año, ya que él ha estado sin hacer nada, ni estudiar ni trabajar, de manera voluntaria. Y claro, estaba casi todo el día en casa, y jugaba todo el rato… Y el tema de lo de buscar trabajo y/o estudiar era otra guerra. Llegó un punto en el que no podía ni mencionarlo. Durante este año hizo dos cursos (de dos días cada uno) porque yo le pasé los links por si le interesaban, y encima se enfadó conmigo. Porque decía que era como su madre, que era una pesada y que no iba a hacer nada. Que además no iba a buscar ningún trabajo porque pasaba de estar en ningún curro de mierda mal pagado, pudiendo estar en su casa sin más, que él estaba muy bien en casa jugando. El tema se volvió tabú, y desde junio de este año no quise volver a mencionarlo porque tuvimos una bronca enorme hablando sobre ello. Me dijo que le agobiaba demasiado, que le dejase en paz, que si no quería trabajar ni estudiar no lo hacía y punto y que yo no era su madre para decirle lo que tenía que hacer (jamás le obligué a nada, o al menos yo no lo sentía así, creo que intentaba darle siempre mi opinión&hellip en definitiva, lo de siempre, que él era libre y podía hacer lo que quisiese y yo no tenía que decirle nada. Y sentí que tenía razón, así que me disculpé por haber intentado que hiciese algo que él no quería… Hace un mes me dijo de repente que realmente sí le habían llamado de una entrevista de trabajo que hizo para una pizzería, pero que no me lo había querido contar porque seguro que me iba a poner pesada y le iba a decir que fuese. Y que me lo contaba ahora porque había pasado mucho tiempo y ya habían cogido a otras personas para trabajar allí.

También es una persona super egoísta y egocéntrica, con cero empatía, que decía sentirse orgulloso de ello. Él siempre estaba por delante y encima de los demás por y para todo, no podía hacerle un favor a nadie (al menos de normal) y si lo hacía, lo recordaba durante mucho tiempo. Por la única que hacía algo de vez en cuando era por mí, eso tengo que reconocerlo, pero luego siempre me lo echaba en cara, a modo de ‘acuérdate de cuando te acompañé a…’ por ejemplo, cuando fue mi graduación de bachillerato él vino al acto pero no a la fiesta de después, a la que estaba invitado. No fue porque me dijo que no le apetecía, y que allí no pintaba nada. Pero resulta que el mismo día de mi graduación acabamos discutiendo porque me dijo que se tenía que ir pronto, porque se iba a la fiesta de después de la graduación de una amiga de sus amigos… Obviamente me enfadé. Y tal vez fui exagerada. Pero me sentí mal y ‘menospreciada’... y al final la respuesta fue la de siempre, que él hacía lo que quería y yo no tenía que hacerle sentir mal por ello.

Con mi familia pienso que tampoco se ha portado muy bien. Para mí mi familia es muy importante, especialmente mis padres, mi hermana y mis abuelos. Y mis abuelos muchas veces le han invitado a ir al pueblo, a la parcela, a comer con ellos a su casa etc. y él casi siempre lo ha rechazado. Y las veces que ha ido ha estado apático y luego me lo ha echado en cara, porque dice que ha ido porque se sentía obligado por mí. Con mi madre, en cinco años que hemos estado juntos y con todas las veces que ha estado en mi casa (porque muchas tardes de domingo consistían en que viniese a mi casa, jugaba a juegos en mi ordenador y yo miraba cómo jugaba, o veíamos vídeos en Youtube… ) no ha sido capaz de mantener una conversación. Mi madre le preguntaba qué tal, qué tal el instituto, sus padres y demás y la respuesta siempre era ‘bien’. Y ya está.

El tema de salir, casi siempre hacíamos lo mismo. O él venía a mi casa o yo iba a la suya y normalmente él jugaba en el ordenador, a veces también jugaba yo, veíamos vídeos en youtube, otras veces veíamos pelis… Pero salir lo que es salir, apenas salíamos. Como mucho íbamos a un centro comercial de aquí a dar una vuelta, y un par de veces a museos. No podíamos hacer otra cosa tampoco porque él decía que nunca tenía dinero (de hecho muchas de las veces que hemos salido le he invitado yo, cosa que no me molesta pero creo que se acostumbró a ello), y el poco dinero que tenía lo quería ahorrar para tatuarse. Los planes ‘diferentes’ casi nunca le apetecían o le parecían mal… No sé tal vez es que yo sea muy rara. Pero si a mí me está diciendo que no a salir de fiesta y luego lo hace con sus amigos, pues suena raro… y duele un poco. Pero ya no sólo salir de fiesta, irnos de vacaciones con unos amigos a una casa rural tampoco, ir a un camping tampoco, sólo si íbamos a su casa de la playa… cosas así.

A pesar de todo,me sentía (y en parte me siento) enganchada a él. A sus besos, a sus abrazos. A su forma ambivalente de quererme. Porque en cinco minutos pasaba de estar gritándome y echándome cosas en cara, a abrazarme o darme un beso, cosas así… supongo que esto es lo que más me unía a él… y el sentimiento de que nadie más va a quererme, de que no valgo la pena… de que en realidad sí soy una loca, que soy una exagerada… que la única forma de amor que merezco es ésta.

El caso es que después de muchas conversaciones con mi madre y con mi psicóloga, el miércoles pasado me decidí a hablar con él en serio, quisiese o no. El martes le dije que por favor el miércoles necesitaba hablar con él, y en lugar de decirme que vale o lo que fuese, se enfadó muchísimo y me pidió que lo que tuviese que decir se lo dijese por wassap… como si le dejaba, que se lo dijese por wassap y punto. Yo le dije que no, que a la cara… y el miércoles estuvo super a la defensiva. Me dijo que él no venía absolutamente ningún problema en la relación, que si yo veía alguno era cosa mía. Y que en caso de haber habido algún problema, ha sido mi culpa. Cualquier problema que haya habido en la relación ha sido cosa mía , y me dijo que si miraba atrás en toda la relación, él no pensaba que hubiese hecho nada mal. Le intenté comentar cosas que me habían molestado y demás y me volvió a decir que él hacía y decía lo que quería y  que me dejas de gilipolleces y le dijese lo que le tuviese se que decir. Así que a pesar de que me costó muchísimo decidí dejarlo. Mentiría si digo que me fue fácil, de hecho lo que más me costó fue irme… porque además él parecía que se arrepentía ligeramente de haberse portado así. En cuanto al contacto, le dije que él decidía, pero que creía que éramos adultos y que tampoco era necesario cortar absolutamente todo de raíz. Menudo error… desde el miércoles por la noche pasado (día que lo dejamos) hasta este martes por la noche me ha estado hablando por wassap constantemente, y cuando digo constantemente es que me hablaba más ahora que cuando estábamos juntos. Diciéndome que de repente se había dado cuenta de lo mal que me había tratado. Que ahora caía en que yo le tenía por un apoyo y que él me había fallado, por ejemplo cuando le conté que iba a la psicóloga y él le restó importancia y cosas así (sinceramente más que ablandarme me sentó como una patada en el culo que me dijese que después de cinco años se daba cuenta AHORA de que yo le había tenido por un apoyo). Que de la noche del miércoles a la mañana del jueves se dio cuenta de que había hecho mal y me pedía desesperadamente otra oportunidad, que esta vez cambiaría, que además él no veía las cosas tan mal, que creía que tenía solución, que yo era muy exagerada porque las cosas no estaban tan mal… El tema es que 1) me sentía muy agobiada porque si acabamos de dejarlo, y de la manera en la que lo dejamos, por favor no estés agobiándome a mensajes cada hora por wassap… y 2) nunca he terminado de creerme sus disculpas, porque cada vez que me pide perdón por algo añade que yo soy exagerada, que si no lo arreglamos es porque yo no quiero etc. Y tal vez tiene razón y es que ahora ya no quiero… igual me he cansado, no sé si con motivo o sin él. Hoy estamos a viernes y no le he vuelto a contestar desde el martes. ¿Por qué? porque me ha dicho cosas muy feas, que puedo llegar a entender por la situación en la que él está, pero cosas muy injustas… me sigue culpando por todo, a pesar de que se disculpe, siempre añade algo culpándome. Además, él cree que es porque hay otro chico. Lo cual me jode aún más, porque me hace darme cuenta de que realmente no se arrepiente de nada, porque no ve el error, simplemente me dice que estoy pasando por una etapa rara de mi vida, que estoy en una crisis en mi familia, en la universidad y demás y que el problema que tengo con él realmente viene de esta crisis. Me jode, porque realmente cree que no había nada mal en la relación.

Ahora mismo me siento gilipollas. Porque tengo una mezcla de sentimientos. Por un lado, me siento como una persona horrible, me siento fatal por haberle dejado, por hacerle pasarlo mal y porque además aún sigo creyendo que tengo la culpa de todas estas cosas, y de que la relación no haya funcionado. Y lo triste es pensar que le quiero… y dudar si he hecho bien, si he hecho mal, si tal vez no voy a lograr superarlo. Me da mucho miedo todo… Racionalmente hablando sé que no podíamos seguir así, y después de años intentando buscar una solución no la hemos encontrado, así que simplemente tal vez lo nuestro no funcionaba. No sé. El caso es que la mala y la que no quiere darle ahora otra oportunidad soy yo. ¿Y si ahora de verdad cambiase? Pero es que, por mucho que quiera creerlo, en el fondo sé que no. Primero porque las personas no cambian nunca, y segundo porque yo no quiero estar con una persona a la que estoy ‘obligando’ a cambiar. Creo que hay cosas que deben salir de uno mismo, y si esto no es así pues tal vez no estamos hechos para estar juntos, no encajamos… El hecho es que yo siento que tal vez he tirado la toalla muy pronto. Y además, contando todo esto, me siento mala persona. Me siento victimista. Porque tal vez sí he sido una exagerada todo este tiempo y él sólo ha estado sufriendo las consecuencias de mis reacciones y demás… no sé.

Por otro lado, tengo a gente a mi alrededor preguntándome si estoy ciega. Mi hermana ha estado delante en muchas de estas discusiones, o ha venido con nosotros muchas de las veces que hemos quedado… y ella lleva diciéndome años que actúa muy raro y que nuestra relación no era sana. Que abra los ojos. Me han dicho que me ha tenido manipulada hasta el punto de llegar a creer de mí misma que estoy loca o que me imagino que hay problemas en la relación cuando no las hay, que siempre me ha hecho sentir culpable por todo y yo me he acostumbrado, y por eso ahora también sigo sintiéndome culpable. No sé.

Por qué no puedo olvidarle sin más… Me gustaría dejar de quererle y punto. Todo sería más fácil. Me sería más fácil ver todo esto más claro si a pesar de todo no sintiese que hay algún sentimiento que me une a él. Lo miro desde fuera, y si fuese mi hermana la que me contase algo así con su novio, yo le recomendaría que lo dejasen porque se están haciendo daño mutuamente. Pero no entiendo por qué no puedo verlo así conmigo, por qué cada vez que pienso que me ha podido manipular me lo niego y soy incapaz de verle de esa manera…. En fin. Me gustaría saber qué pensáis de todo esto, si tal vez he sido una exagerada de verdad, o qué veis en una relación así…. No sé.

Gracias por leer todo el tocho (y aún así me he dejado muchas cosas)

 

Hola, te he leído todo. No voy a darte ningún consejo , las relaciones son complicadas y tú mejor que nadie sabrás lo que hacer. Sólo ánimo y poco a poco el tiempo pondrá las cosas en su lugar. Un saludo.

A
aquokka_4c9ba4z
14/10/16 a las 16:06

Era una relación enfermiza, que bueno que terminaron, ese chico no está bien y honestamente tu tampoco nena. Tuviste una dependencia emocional por un tipo que te trataba muy mal, eres muy joven, aprende de esa experiencia. No te vendria nada mal hacer terapia para resolver algunos asuntillos y tener la orientación de un/a profesional, mucha suerte.

Z
zu2000
14/10/16 a las 17:29
En respuesta a akiwi_a5fc60z

Hola. Mi nombre es Noelia, y tengo 21 años. Hace una semana dejé la relación con mi pareja, con el que llevaba 5 años y medio... Y la verdad es que ahora mismo no sé cómo me siento.
Voy a explicaros un poco cómo ha sido nuestra relación y en la situación en la que estoy ahora, a ver qué me podéis decir...  Lo siento por el tocho, pero hay bastantes detalles que me gustaría contar. Y creo que ver todo esto escrito talvez me ayude un poco, ya que me siento super culpable y como la mala de una peli...

Empezamos a salir cuando yo tenía 16 años y él 17. Apenas nos conocíamos, sólo de vista en el instituto, y creo que este fue uno de los peores errores; el no conocernos, porque creo que nos idealizamos el uno al otro... De hecho, la relación no empezó nada bien, yo pensaba que lo había dejado con su ex y resultó ser mentira; seguía con ella. Me dejó una semana después de empezar, y hasta dos semanas después (el día de mi graduación) ni se dignó a hablarme. Dos semanas después me pidió salir... En fin, el caso es que el primer año transcurrió más o menos bien, excepto por el tema estudios, ya que mis padres no lo aceptaban muy bien (mi hermana y yo siempre hemos sido de 10 y MH y ese año yo empezaba bachillerato, y él repetía cuarto por segunda vez). Yo estaba bastante ilusionada y enamorada, y pensaba 'qué bien que nunca discutimos'... claro hasta que me di cuenta después de que nunca discutíamos porque yo me callaba todo xD por ejemplo, los viernes eran sagrados para salir con sus amigos, hubiese un plan más interesante o no (yo le decía que podíamos quedar el viernes para ir a X sitio, y que luego en el finde podía quedar con sus amigos sin problema, pero no había manera...), o estuve 'aguantando' mucho tiempo que se comiesen la nariz (literalmente, se la mordían jajaja) una amiga suya y él y cosas así, sinceramente no soy celosa, pero son cosas que me quemaban en ese momento... Por ejemplo que nada más empezar la relación se fue a Páis Vasco a ver a una de sus amigas, estuvimos 10 días sin hablar absolutamente nada, y cuando volvió no fue capaz ni siquiera de darme un beso. De hecho, el día que volvió me 'hizo' ir (lo pongo entre comillas, porque yo acepté ir) al cumpleaños de la hermana pequeña de uno de sus amigos :/ Imaginaos la situación, yendo al cumple de 10 años de la niña, yo que ni conocía a la familia ni nada, cabreada porque acababa de volver del viaje después de tanto tiempo sin hablarme y en fin xD De todo este tipo de cosas no se pudo hablar hasta tiempo después por dos motivos: él no aceptaba absolutamente nada, y a mí me daba miedo que me dejase.

A partir de las primeras vacaciones a las que fuimos juntos (con mi familia) las cosas cambiaron muchísimo. Discutimos un montón estando con mis padres en la playa, y a la vuelta no me sentía bien con él. En ese momento yo no sabía por qué, y creo que me di cuenta bastante después, de que lo que pasaba es que por primera vez yo estaba dando mi opinión sobre las cosas y estaba diciendo las actitudes y demás que me gustaban y las que no, y a él no le pareció bien... Conseguimos superar esta 'crisis', pero desde entonces, aunque me duela mucho reconocerlo, ya nada volvió a ser igual, no sentía la misma 'comodidad' que sentía antes estando con él. No me sentía enamorada... Llegué a autolesionarme en alguna ocasión debido a la desesperación que sentía cuando discutíamos. No se lo quería contar, porque para mi no era un medio de coacción ni nada así (y porque tampoco es algo de lo que me sienta orgullosa), pero al final lo vio y se cabreó muchísimo conmigo. Aunque realmente no sé si se enfadó porque yo me hubiese hecho daño o porque le recordaba a él: su ex le fue infiel y él decidió que lo mejor que podía haer era coger un cuchillo y rajarse los brazos (tiene el brazo derecho lleno de cicatrices enormes). En momentos como ese sentía que no me apoyaba, que más que eso yo le daba como 'yuyu'... Sin embargo le quería mucho, y él me decía que también me quería, así que seguimos juntos.

Durante todo este tiempo, hemos tenido rachas mejores y rachas peores. Momentos muy buenos y momentos muy malos, supongo que como en todas las parejas. La diferencia es que yo había ocasiones en las que sentía que no estaba bien con él, que no me hacía feliz. Incluso de llegar a casa y sentirme bien y 'segura', en el sentido de no tener que pasar más rato con él... Pero rápidamente desechaba la idea, y la enterraba en lo más hondo de mi pensamiento.

Siempre he sido una persona muy emocional,y por ello he sido la parte más sentimental de la relación y, en fin, supongo que la que más ilusiones se hacía. Sé perfectamente que no puedes esperar de la gente exactamente lo mismo que lo que tú les das, pero en ocasiones con él lo esperaba. Algún detalle porque sí, porque saliese de él (cosa que nunca llegó, por ejemplo yo le llevaba la merienda un montón de días a su casa, si veía alguna tontería que pudiese gustarle se la compraba...), algún 'qué guapa estas hoy' (cosa que tampoco llegó, algún 'te quiero' sin que tuviese que decirlo yo antes... Pero en fin, supongo que al final me terminé acostumbrando a cómo era y me resigné en ese sentido.
Es importante recalcar que él es una persona que presume de que se puede hablar de cualquier cosa con él, que es muy abierto etc... pero la realidad es de otra manera. Por ejemplo yo no podía hablar de dudas como ésta porque significaba comenzar una bronca. Pero de las grandes... Supongo que en este momento en el que vi que no había comunicación con mi pareja y que no la iba a haber, debería haber dejado la relación. Pero no lo hice, porque sentía que le quería.

Él nunca ha sido de salir mucho de casa y menos aún de salir de fiesta. Tanto él como yo jugamos videojuegos y tal, pero él hasta un punto un poco... extremo. Si no sale, se levanta por la mañana a las 10, juega hasta la hora de comer, juega desde después de comer hasta la hora de cenar, y desde después de cenar hasta las 4 de la mañana... Este es un tema del que hablaré después de todas formas. En fin, el caso es que como él no salía mucho, yo dejé de salir muchas veces con mis amigos y amigas de forma voluntaria para estar con él (error, lo sé y muchas veces cuando salía él venía...Imaginaos la situación: una persona que odia toda la música que esté relacionada con la fiesta (los dos somos 'heavys', pero yo cuando salgo me gusta bailar, cantar y demás...)que no bebe, no baila... y cuando él decidía que se iba a ir, yo a veces le decía 'quédate un ratito más con nosotros' (como mucho insistía dos o tres veces)y la mayoría de las veces ésto terminaba en bronca, porque decía que yo le coaccionaba a quedarse y a hacer algo que no le gustaba. Vale que igual era 'pesada' por insistir dos veces, pero creo que querer que tu novio se quede tampoco es tan raro :/ Pero en fin, podría aceptarlo sin más, yo le pedía perdón por ser una pesada y no aceptar lo que él quería, porque eso significaba que yo no respetaba su forma de ser, y fin de la historia... En el fondo siempre me he sentido culpable (incluso a día de hoy) por no aceptarle como era/es

El problema es que ésta fue la dinámica que empezaron a tomar todas las discusiones, especialmente estos dos últimos años. Normalmente, él siempre se molestaba por algo que yo hacía o decía, a mí me parecía que él me contestaba o me trataba muy mal en esa situación, pero me hacía ver que realmente quien la había cagado era yo, yo lloraba, me lamentaba, le pedía perdón por lo imbécil que había sido, y la cosa se quedaba ahí. Hasta que llegó un punto en el que pensé que tal vez yo tampoco fuese tan mala y que él de vez en cuando también metía la pata, pero para él era mentira... Siempre era yo el problema. Porque era pesada, o exagerada, o era muy emocional, me tomaba todo a pecho... Hasta el punto en el que, por poner un ejemplo, hace un mes estábamos cenando en una pizzería, donde él quería coger una promoción (cogiendo no sé qué pizza nos regalaban otra de nachos xD) y cuando llegamos allí nos dijeron que eso era para hacerlo online... se cogió un cabreo flipante. Yo le dije que no se preocupase, que pedía yo online con el móvil y que lo recogíamos en tienda,pero no pudimos hacerlo. Se cabreó más aún y yo le dije que no se enfadase tanto, que había cosas más importantes en el mundo por las que enfadarse, que aquello era una tontería... Bueno pues el rebote que se pilló creo que a día de hoy todavía no tiene nombre. No recuerdo exactamente qué me dijo, recuerdo que me gritó bastante allí delante de todo el mundo (alegando que no gritaba), y luego se sentó en la mesa a jugar con el móvil, y no me dirigió la palabra en media hora. Al final me tuve que ir al baño de la llorera que tenía pensando 'si es que esto no puede ser, si es que no podemos seguir así etc.' y cuando volví me dijo que era culpa mía por haberle insistido en que se calmase y decirle esas cosas. Y yo sentí que de verdad tenía la culpa, y que había sido una pesada y una idiota (y aún lo creo un poco... ) y acabé pidiéndole perdón muchas veces. Incluso ahora mismo me siento rastrera por contarlo así, porque me parece que me hago la víctima y le pongo a él como si fuese malísimo, y me da pena, y en el fondo pienso que él no puede ser así :/

Si tengo que decir que me he sentido apoyada y querida de verdad en esta relación mentiría. Discusiones como esas tuvimos mil, y es verdad que yo en el último año también terminaba por calentarme muchísimo y reaccionar gritando y demás.Pero había cosas que me ofendían demasiado, había cosas que sentía que no tenía que soportar, y cuando le pedía por favor hablar sobre los problemas que teníamos, él me decía que no tenía ningún problema, ni conmigo ni con la relación, que si yo veía problemas era cosa mía. Cada vez que discutíamos yo terminaba preguntándole si de verdad me quería, y su respuesta siempre era 'si no, ¿tú crees que iba a aguantar todo esto?' mientras me señalaba, porque muchas veces terminaba con ataques de ansiedad de la desesperación que me entraba de no poder solucionar nada.

Hay discusiones y reacciones por su parte que me han dejado marcada. Recuerdo uno de los años que se ha venido con nosotros de vacaciones, fuimos a dar una vuelta con la bici y yo me caí en una glorieta, en mitad de la carretera (soy así de torpe). Le llamé, y me vio, pero su reacción fue continuar con la bici y volvió casi 10 minutos después donde yo estaba. Cuando le pregunté llorando que por qué había hecho eso (porque sí, me sentí desprotegida y muy mal, realmente él no sabía si me había pasado algo grave o no), me dijo que había continuado para buscar un camino 'seguro' por el que dar la vuelta, y que era una histérica, que tampoco me había pasado nada... Esa misma noche intenté hablar con él sobre ello pero su respuesta fue la misma, y nunca lo 'solucionamos', porque la culpa simplemente era mía por sobrerreaccionar.

Fuimos a un concierto con unos amigos hace poco, en el que tocaban varios grupos y el que nos gustaba a nosotros era el último que tocaba. Estábamos aburridos, y estábamos hablando entre todos, haciendo tonterías y demás.Él llegó un punto en el que, aún no sabemos por qué, se abrochó la sudadera hasta arriba (a la altura de la nariz), se puso la capucha, se cruzó de brazos y estuvo media hora o más sin hablarnos a nadie. Y cada vez que le decía que me hablase o que no hiciese eso apelaba otra vez a su derecho a hacer lo que quisiese, y que le dejase en paz, que era lo que le apetecía hacer. Y yo le pedí perdón.

Estas últimas vacaciones estuvo super tenso las dos semanas que estuvimos con mi familia, aunque yo no entendía por qué (lo entendería más tarde, cuando me dijo que realmente vino porque sentía que si no iba yo me enfadaría, que fue obligado… cuando llevaba una semana diciéndole que si no quería venir no viniese). El caso es que al final yo también estaba muy tensa, y saltábamos por cualquier cosa y terminamos discutiendo casi todos los días… yo me sentía fatal por estar con mi familia y estar todo el rato de malas con él, y por el hecho de estar de vacaciones y estar así, pero cada vez que le decía que por qué me contestaba borde o por qué estaba raro, le quitaba importancia y sólo seguía comportándose de ese modo y jugando a Pokemon Go a todas horas con el móvil. Las discusiones que tuvimos fueron por diferentes motivos: por ejemplo porque decía que le agobiaba que yo hiciese bromas o comentarios del tipo ‘cuando vivamos juntos este será nuestro felpudo’, también discutimos por viajes, ya que decía que se negaba a ir a ninguno de los sitios en los que ya había estado antes con su familia, por ejemplo Italia o Londres, y yo no conseguía hacerle entender que a mí me encantaría visitar Italia con él (es un enamorado de la historia y yo del arte).Sé bien que el sitio es lo de menos, pero me molestaba mucho que dijese que se negaba y punto y no había más que hablar. Pero la ‘discusión’ que más me desconcertó fue cuando estaba en la playa jugando con él y mi hermana en una colchoneta de estas hinchables, nos subimos los tres a la vez y se rompió. Y se me ocurrió decir de broma: anda que ya te vale, justo te subes y se rompe !!!... Bueno pues se salió del agua y no me dirigió la palabra hasta por la noche :/ e intenté hablar con él, y al final terminé pidiéndole perdón por haber hecho esa broma, asegurándole que no iba a malas.

Cuando volvimos de vacaciones eran las fiestas de mi ciudad, y ‘salimos’ dos días; uno yo salí con mis amigos y él con los suyos y luego nos encontramos, y otro salimos los dos con sus amigos. El caso es que las dos noches terminamos discutiendo. Hasta las cinco de la mañana. Y lo peor es que ni siquiera recuerdo por qué empezaron las discusiones ni cómo, sólo sé lo mal que nos hablamos y lo mucho que nos calentamos, y que yo al final le dije que tantas discusiones iban a acabar por dejar huella y él simplemente respondió: si a ti te afectan las discusiones es cosa tuya, porque yo discuto y luego me voy a la cama tan tranquilo, duermo ‘fetén’ y a la mañana siguiente me levanto como si nada’. Es verdad que llegamos a faltarnos el respeto en muchas ocasiones, y no voy a negar que a veces le insulté, cosa que no debería haber hecho jamás, y de la que me arrepiento muchísimo. No lo justifico de ninguna manera, simplemente llegaba un punto en el que estaba tan desesperada y ya no sabía qué hacer, porque le dijese lo que dijese, intentase hablar o no, las cosas siempre terminaban igual de mal. De hecho, él en muchas ocasiones me decía después de discutir ‘yo ya no sé si quiero seguir con esto’ etc. y la verdad es que se convirtió en algo habitual. No quiero decir que me lo dijese a modo de ‘amenaza’, pero es verdad que se convirtió en una forma de terminar las discusiones. Porque a mí me entraba el miedo, le pedía perdón por todo y al día siguiente me levantaba con más ganas de arreglarlo y de hacer las cosas aún mejor… Sin embargo, a partir de la última discusión que tuvimos en las fiestas, ésto no fue así. No sé si el vaso se rebasó, no sé qué me ocurrió exactamente, pero sentía que algo dentro de mí se había roto. Entre otras cosas esa noche me dijo que siempre me había dicho que entendía por qué me había puesto ‘celosa’ al principio de la relación (estoy hablando de hace 5 años, de algo que ya había hablado con él y por lo que me arrepentí muchísimo y le pedí perdón, pero él me dijo que comprendía por qué me había puesto así etc), pero esa noche me soltó que nunca lo había entendido y que nunca lo iba a entender. Que había dejado de hablar con ellas por mi culpa, para que yo no me enfadase. Y sí, me sentí de lo peor. Me sentí como ese tipo de novia histérica que siempre había odiado y no quería ser… Y me volvió a repetir lo de que no sabía si quería estar conmigo. Pero la diferencia fue que esta vez a la mañana siguiente la que no sabía si quería volver era yo...

Por otro lado, lo que decía de no sentirme apoyada... En fin lo puedo ilustrar con cosas como que piensa que es una locura pagar 50 euros para estar en una asociación canina y poder ayudar a los perros, sacarles, darles de comer etc. porque eso no reporta ningún beneficio económico. Al igual que en una asociación de chavales en la que estoy, vamos con niños y niñas de 8 a 17 años los sábados por la tarde… y a eso lo llamaba la secta. Cosa que le dije mil veces que me ofendía, que yo no le pedía que le gustase pero que al menos lo respetase… y como siempre la contestación fue que él decía lo que quería y cuando quería, que si me ofende es mi culpa :/ al final la única solución que me dio fue que hubiese temas tabú, en plan temas de los que no hablaríamos como esta asociación, o temas de política, nada sobre su familia… Para que me entendáis: a mí me mueve intentar cambiar el mundo. Sé que suena super ambicioso y que es una locura, pero me encanta ayudar a la gente y a los animales, estudio Educación Infantil, y tal vez esté mal pensar así, pero a veces creía que el día de mañana iba a tener que dejar de hacer lo que me gusta y lo que me llena porque a él no le gusta, y porque me lo recriminaba muchas veces… y tampoco me gustaba demasiado esa idea. Además yo no entendía por qué tenía que meterse conmigo por lo de la asociación y decirme que no le parecía normal cuando él se pasa jugando 16 horas al día jugando online. Que tiene un ‘clan’ con gente con la que lleva jugando 8 años, que no conoce en persona y yo nunca le he dicho nada sobre ello, porque por muy ‘raro’ que me pudiese parecer a mí, si a él le gustaba y le hacía sentir bien pues ya está. El único comentario que le he podido hacer sobre esto ha sido que creía que jugaba demasiado. Y obviamente esto también terminaba en bronca, porque le onfendía y porque él podía hacer lo que quisiese y punto.

El tema de jugar y demás se ha visto ‘agravado’ en este último año, ya que él ha estado sin hacer nada, ni estudiar ni trabajar, de manera voluntaria. Y claro, estaba casi todo el día en casa, y jugaba todo el rato… Y el tema de lo de buscar trabajo y/o estudiar era otra guerra. Llegó un punto en el que no podía ni mencionarlo. Durante este año hizo dos cursos (de dos días cada uno) porque yo le pasé los links por si le interesaban, y encima se enfadó conmigo. Porque decía que era como su madre, que era una pesada y que no iba a hacer nada. Que además no iba a buscar ningún trabajo porque pasaba de estar en ningún curro de mierda mal pagado, pudiendo estar en su casa sin más, que él estaba muy bien en casa jugando. El tema se volvió tabú, y desde junio de este año no quise volver a mencionarlo porque tuvimos una bronca enorme hablando sobre ello. Me dijo que le agobiaba demasiado, que le dejase en paz, que si no quería trabajar ni estudiar no lo hacía y punto y que yo no era su madre para decirle lo que tenía que hacer (jamás le obligué a nada, o al menos yo no lo sentía así, creo que intentaba darle siempre mi opinión&hellip en definitiva, lo de siempre, que él era libre y podía hacer lo que quisiese y yo no tenía que decirle nada. Y sentí que tenía razón, así que me disculpé por haber intentado que hiciese algo que él no quería… Hace un mes me dijo de repente que realmente sí le habían llamado de una entrevista de trabajo que hizo para una pizzería, pero que no me lo había querido contar porque seguro que me iba a poner pesada y le iba a decir que fuese. Y que me lo contaba ahora porque había pasado mucho tiempo y ya habían cogido a otras personas para trabajar allí.

También es una persona super egoísta y egocéntrica, con cero empatía, que decía sentirse orgulloso de ello. Él siempre estaba por delante y encima de los demás por y para todo, no podía hacerle un favor a nadie (al menos de normal) y si lo hacía, lo recordaba durante mucho tiempo. Por la única que hacía algo de vez en cuando era por mí, eso tengo que reconocerlo, pero luego siempre me lo echaba en cara, a modo de ‘acuérdate de cuando te acompañé a…’ por ejemplo, cuando fue mi graduación de bachillerato él vino al acto pero no a la fiesta de después, a la que estaba invitado. No fue porque me dijo que no le apetecía, y que allí no pintaba nada. Pero resulta que el mismo día de mi graduación acabamos discutiendo porque me dijo que se tenía que ir pronto, porque se iba a la fiesta de después de la graduación de una amiga de sus amigos… Obviamente me enfadé. Y tal vez fui exagerada. Pero me sentí mal y ‘menospreciada’... y al final la respuesta fue la de siempre, que él hacía lo que quería y yo no tenía que hacerle sentir mal por ello.

Con mi familia pienso que tampoco se ha portado muy bien. Para mí mi familia es muy importante, especialmente mis padres, mi hermana y mis abuelos. Y mis abuelos muchas veces le han invitado a ir al pueblo, a la parcela, a comer con ellos a su casa etc. y él casi siempre lo ha rechazado. Y las veces que ha ido ha estado apático y luego me lo ha echado en cara, porque dice que ha ido porque se sentía obligado por mí. Con mi madre, en cinco años que hemos estado juntos y con todas las veces que ha estado en mi casa (porque muchas tardes de domingo consistían en que viniese a mi casa, jugaba a juegos en mi ordenador y yo miraba cómo jugaba, o veíamos vídeos en Youtube… ) no ha sido capaz de mantener una conversación. Mi madre le preguntaba qué tal, qué tal el instituto, sus padres y demás y la respuesta siempre era ‘bien’. Y ya está.

El tema de salir, casi siempre hacíamos lo mismo. O él venía a mi casa o yo iba a la suya y normalmente él jugaba en el ordenador, a veces también jugaba yo, veíamos vídeos en youtube, otras veces veíamos pelis… Pero salir lo que es salir, apenas salíamos. Como mucho íbamos a un centro comercial de aquí a dar una vuelta, y un par de veces a museos. No podíamos hacer otra cosa tampoco porque él decía que nunca tenía dinero (de hecho muchas de las veces que hemos salido le he invitado yo, cosa que no me molesta pero creo que se acostumbró a ello), y el poco dinero que tenía lo quería ahorrar para tatuarse. Los planes ‘diferentes’ casi nunca le apetecían o le parecían mal… No sé tal vez es que yo sea muy rara. Pero si a mí me está diciendo que no a salir de fiesta y luego lo hace con sus amigos, pues suena raro… y duele un poco. Pero ya no sólo salir de fiesta, irnos de vacaciones con unos amigos a una casa rural tampoco, ir a un camping tampoco, sólo si íbamos a su casa de la playa… cosas así.

A pesar de todo,me sentía (y en parte me siento) enganchada a él. A sus besos, a sus abrazos. A su forma ambivalente de quererme. Porque en cinco minutos pasaba de estar gritándome y echándome cosas en cara, a abrazarme o darme un beso, cosas así… supongo que esto es lo que más me unía a él… y el sentimiento de que nadie más va a quererme, de que no valgo la pena… de que en realidad sí soy una loca, que soy una exagerada… que la única forma de amor que merezco es ésta.

El caso es que después de muchas conversaciones con mi madre y con mi psicóloga, el miércoles pasado me decidí a hablar con él en serio, quisiese o no. El martes le dije que por favor el miércoles necesitaba hablar con él, y en lugar de decirme que vale o lo que fuese, se enfadó muchísimo y me pidió que lo que tuviese que decir se lo dijese por wassap… como si le dejaba, que se lo dijese por wassap y punto. Yo le dije que no, que a la cara… y el miércoles estuvo super a la defensiva. Me dijo que él no venía absolutamente ningún problema en la relación, que si yo veía alguno era cosa mía. Y que en caso de haber habido algún problema, ha sido mi culpa. Cualquier problema que haya habido en la relación ha sido cosa mía , y me dijo que si miraba atrás en toda la relación, él no pensaba que hubiese hecho nada mal. Le intenté comentar cosas que me habían molestado y demás y me volvió a decir que él hacía y decía lo que quería y  que me dejas de gilipolleces y le dijese lo que le tuviese se que decir. Así que a pesar de que me costó muchísimo decidí dejarlo. Mentiría si digo que me fue fácil, de hecho lo que más me costó fue irme… porque además él parecía que se arrepentía ligeramente de haberse portado así. En cuanto al contacto, le dije que él decidía, pero que creía que éramos adultos y que tampoco era necesario cortar absolutamente todo de raíz. Menudo error… desde el miércoles por la noche pasado (día que lo dejamos) hasta este martes por la noche me ha estado hablando por wassap constantemente, y cuando digo constantemente es que me hablaba más ahora que cuando estábamos juntos. Diciéndome que de repente se había dado cuenta de lo mal que me había tratado. Que ahora caía en que yo le tenía por un apoyo y que él me había fallado, por ejemplo cuando le conté que iba a la psicóloga y él le restó importancia y cosas así (sinceramente más que ablandarme me sentó como una patada en el culo que me dijese que después de cinco años se daba cuenta AHORA de que yo le había tenido por un apoyo). Que de la noche del miércoles a la mañana del jueves se dio cuenta de que había hecho mal y me pedía desesperadamente otra oportunidad, que esta vez cambiaría, que además él no veía las cosas tan mal, que creía que tenía solución, que yo era muy exagerada porque las cosas no estaban tan mal… El tema es que 1) me sentía muy agobiada porque si acabamos de dejarlo, y de la manera en la que lo dejamos, por favor no estés agobiándome a mensajes cada hora por wassap… y 2) nunca he terminado de creerme sus disculpas, porque cada vez que me pide perdón por algo añade que yo soy exagerada, que si no lo arreglamos es porque yo no quiero etc. Y tal vez tiene razón y es que ahora ya no quiero… igual me he cansado, no sé si con motivo o sin él. Hoy estamos a viernes y no le he vuelto a contestar desde el martes. ¿Por qué? porque me ha dicho cosas muy feas, que puedo llegar a entender por la situación en la que él está, pero cosas muy injustas… me sigue culpando por todo, a pesar de que se disculpe, siempre añade algo culpándome. Además, él cree que es porque hay otro chico. Lo cual me jode aún más, porque me hace darme cuenta de que realmente no se arrepiente de nada, porque no ve el error, simplemente me dice que estoy pasando por una etapa rara de mi vida, que estoy en una crisis en mi familia, en la universidad y demás y que el problema que tengo con él realmente viene de esta crisis. Me jode, porque realmente cree que no había nada mal en la relación.

Ahora mismo me siento gilipollas. Porque tengo una mezcla de sentimientos. Por un lado, me siento como una persona horrible, me siento fatal por haberle dejado, por hacerle pasarlo mal y porque además aún sigo creyendo que tengo la culpa de todas estas cosas, y de que la relación no haya funcionado. Y lo triste es pensar que le quiero… y dudar si he hecho bien, si he hecho mal, si tal vez no voy a lograr superarlo. Me da mucho miedo todo… Racionalmente hablando sé que no podíamos seguir así, y después de años intentando buscar una solución no la hemos encontrado, así que simplemente tal vez lo nuestro no funcionaba. No sé. El caso es que la mala y la que no quiere darle ahora otra oportunidad soy yo. ¿Y si ahora de verdad cambiase? Pero es que, por mucho que quiera creerlo, en el fondo sé que no. Primero porque las personas no cambian nunca, y segundo porque yo no quiero estar con una persona a la que estoy ‘obligando’ a cambiar. Creo que hay cosas que deben salir de uno mismo, y si esto no es así pues tal vez no estamos hechos para estar juntos, no encajamos… El hecho es que yo siento que tal vez he tirado la toalla muy pronto. Y además, contando todo esto, me siento mala persona. Me siento victimista. Porque tal vez sí he sido una exagerada todo este tiempo y él sólo ha estado sufriendo las consecuencias de mis reacciones y demás… no sé.

Por otro lado, tengo a gente a mi alrededor preguntándome si estoy ciega. Mi hermana ha estado delante en muchas de estas discusiones, o ha venido con nosotros muchas de las veces que hemos quedado… y ella lleva diciéndome años que actúa muy raro y que nuestra relación no era sana. Que abra los ojos. Me han dicho que me ha tenido manipulada hasta el punto de llegar a creer de mí misma que estoy loca o que me imagino que hay problemas en la relación cuando no las hay, que siempre me ha hecho sentir culpable por todo y yo me he acostumbrado, y por eso ahora también sigo sintiéndome culpable. No sé.

Por qué no puedo olvidarle sin más… Me gustaría dejar de quererle y punto. Todo sería más fácil. Me sería más fácil ver todo esto más claro si a pesar de todo no sintiese que hay algún sentimiento que me une a él. Lo miro desde fuera, y si fuese mi hermana la que me contase algo así con su novio, yo le recomendaría que lo dejasen porque se están haciendo daño mutuamente. Pero no entiendo por qué no puedo verlo así conmigo, por qué cada vez que pienso que me ha podido manipular me lo niego y soy incapaz de verle de esa manera…. En fin. Me gustaría saber qué pensáis de todo esto, si tal vez he sido una exagerada de verdad, o qué veis en una relación así…. No sé.

Gracias por leer todo el tocho (y aún así me he dejado muchas cosas)

 

Hola. Primero que nada decirte que eres una chica muy madura para tu edad. Ya que a mi me costó tomar esa decisión ya a mis 23 años. Cuando te leo me recuerdo a mi misma, era exactamente igual a ti y en la misma situación. Déjame decirte que has tomado la mejor decisión, alejarte de ese chico por mucho que lo quieras. Decirte que no es amor lo que te ata a él, en todo estos años él pudo tenerte en sus manos y ahora que te alejas por primera vez tiene algo de miedo. No dejes que eso vuelva a pasar, 5 años no es pronto para tirar la toalla. 5 años son más q suficientes para conocer perfectamente a las personas. Has caso a tu familia tu mami y tu hermana son quienes te aman incondicionalmente y quieren sólo tu bien. Tu familia es a quien debes acudir, refugiate en ellos, son quienes te darán fortaleza. Amiga, tranquila, ese chico no merece tu amor, ni un poco. Te ha manipulado al punto de acrte culpable de todo y tú creerlo, con el tiempo te darás cuenta que no valió la pena pero que aprendiste a ser fuerte y no volverás a caer tan bajo. Tiempo es lo que necesitas lejos de él. Cero contacto porq va intentar reconquistarte. No aceptes. Besos y sigue adelante.

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ISDIN Si-Nails

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