El verano pasado tuve una experiencia que me hizo descubrir un aspecto de mi sexualidad que no conocía. Estaba con mi marido en la playa de Cádiz. Se permite el nudismo, y yo lo hice. Me despisté un poco, paseando por la orilla desnuda, y cuando me quise dar cuenta mi marido se había ido ya con la tabla de windsurf mar adentro. Entonces oí una voz a mi espalda, que decía: "Señora no se permite elnudismo más allá de aquella señal". Me volví y era un policía montado en un quad. Me quedé paralizada. Yo allí desnuda frente a un poli, de esos que llevan las esposas colgadas del cinturón. Me disculpé como pude y salí corriendo de un modo ridículo hacia donce tenía la toalla, a unos cientos de metros. "No se mueva", me gritó. "Tengo que acompañarla para comprobar su documentación, ya que tengo que denunciarla". Le dije que estaba muy nerviosa, pero él se empeñó en seguirme. Imaginaros el espectáculo, yo pensé que estaba detenida. Una vez en las toallas, le enseñé mi DNI, tomó los datos y me impuso una multa de 200 EUROS. Y se marchó. No se lo contñe a mi marido, pero después, ya sola, me dí cuenta que me había excitado mucho. Y tango muchas fantasías en las que un poli me detiene, me cachea y me pone las esposas. ¿Alguna tiene alguna fantasía similar? ¿Lo entienden vuestras parejas para hacer algun juego de rol?
Mónica