Buenos días a tod@s,
A través de una amistad común he conocido a una chica con quien me bloqueo cada vez que nos vemos, os pongo en situación y explico "antecedentes".
Hacía ya algún tiempo que esta persona en común me decía que conocía a mi "pareja ideal" y me consta que le decía a ella lo mismo. Hace unos días finalmente nos conocimos con la "excusa" de realizarle una reparación en su casa (efectivamente, había una reparación que hacer). Y, efectivamente y a pesar de acudir sin expectativa alguna (esta amistad común nunca ha acertado en mis "pareja ideal"), encaja en prácticamente todo lo que me gusta en alguien. Cabe decir que, si bien creo que nos hemos cruzado en alguna ocasión, no nos conocíamos previamente. También decir que ambos hemos pasado ya los 30.
Dado que no pude reparar el primer día, mantuvimos el contacto esporádicamente durante unos días, a veces iniciando yo la conversación, ella otros. Con alguna "pulla" que parece indicar que ella también está interesada. Han sido conversaciones cortas pero amenas y bastante cómplices.
Volvimos a vernos, fui a recoger la pieza estropeada, estuvimos una media hora hablando... Pero todo lo ameno e "interesante" que puede que le pareciese a través del móvil no apareció en persona. Totalmente bloqueado, hablaba como si hablase con cualquier persona. Mi lenguaje corporal, nulo, quizá algo nervioso, distante. Soy alguien a quien no le suele costar acercarme más, al menos indicándolo con, eso, el lenguaje corporal, que siempre ayuda. Pero ahí estábamos, sentado en paralelo, separados por 50 centímetros. Media hora y me volví a casa.
No esperaba una noche llena de "fuegos artificiales", me gusta ir más despacio, pero tampoco esperaba irme de ahí con la sensación de haber dejado una imagen de mi tan nefasta.
Con el móvil, a menos que esté errando totalmente al interpretar las "señales", ambos nos hemos dicho claramente -a base de indirectas- "me gustas", pero en persona... Lo dicho, me bloqueo y soy "otro yo". Como decía antes, no me cuesta mucho mostrar físicamente que alguien me atrae y, hablando, encontrar un momento en que sea adecuado un acercamiento e ir abriendo la conversación, encauzarla a ese momento en que ya sólo queda o a) el beso, o b) el decir "X, me gustas". Doy fe que ella ha tratado de dar pequeños pasos, tocándome el brazo, interesándose en mi, en mi trabajo, qué hago, qué me gusta... Y yo, nada de nada.
No sé si quizá el estar en su casa, terreno desconocido, puede haberme influido. O quizá el que a ambos no hayan estado hablando al uno del otro durante bastantes meses sin conocernos y, al fin, hacerlo ahora.
Ahora tengo fácil seguir hablando con ella, para informar de los progresos con su reparación, incluso para ir a tomar una cerveza que "me debe" (el "pago" de la reparación). Pero me da miedo equivocarme, haber creído que ella está interesada en mi y no sea así. Y aún más miedo el vernos de nuevo y volver a comportarme como un mentecato.
¿Quién sabría darme un consejo, o una bofetada de realidad, o un empujón, o lo que sea, que me haga espabilar e ir dando esos pasos que llevan a ese primer contacto físico en que todo parece detenerse por un instante?