Técnicamente soy heterosexual, es decir; soy hombre, me atraen las mujeres, no me atraen los hombres.... Hasta ahí normal.
Pero no encajo en las dinámicas normativas heterosexuales. No me basta con ser amante de una mujer, además quiero ser una amiga más, mis gustos e intereses coincieden más con los de las mujeres como moda, estilo, jamás me gusta nada el futbol... etc He conocido el modo en que es considerado un novio formal y estoy disconforme, no me gusta permanecer racional en todo momento para equilibrar a la otra parte, ¿qué hay de malo en que ambos seamos emocionales cuando resultemos serlo y lo consideremos necesario? yo diría que mejor, no? cuanto más en común mejor, menos probabilidad de conflicto. Y mucho menos fingir que tengo un poder que no tengo, cuando lo que quiero es tener tal poder y que no se sepa, nisiquiera yo mísmo, al igual que ella. Me encanta tanto embrujar como ser embrujado, y que ninguno de los dos ni nadie se de cuenta.
Sin importar cuantas veces se me explique cómo es el verdadero funcionamiento de la heterosexualidad, no puedo evitar ofrecer lo que quiero recibir, en lugar de entregarme a los ''trueques simbióticos'' de los heteros al uso, tal simbiosis me da asco.
Si debo elegir entre ser complice de una mujer y ser su molestia (que es lo que observo suele significar un novio o amante para ella), prefiero ser complice aunque eso signifique no poder saborearla nunca. Si ser pareja implica que seas una especie de segundo padre o voz de la conciencia que o se impone o se le imponen, NO-LO-QUIE-RO. No soy un hombre que necesite a la mujer, sencillamente la adoro, y lo prefiero así a que sea al revés.
Tampoco estoy disconforme con mi anatomía, y en mi caso me considero bastante apuesto, compensación bien merecida despues de haber nacido bajo el sexo deschable. No considero que la mujer sea más bella, las anatomías femenina y masculina solo son diferentes, y la masculina a su manera puede ser bellísima cuando se le saca partido, aunque no parecen valorarla muchas mujeres, pero tengo la esperanza en que solo sea que no estarán acostumbradas toda vez que hasta hace muy muy poco tiempo sus necesidades herógenas y erótico-recreativas no habían sido atendidas.
Me gusta relacionarme afectivamente con mujeres además de desearlas sexualmente, aunque eso no significa que rechace a hombres en lo que a amistad se refiere siempre y cuando se trate de hombres de ese mísmo royo, pjmpl; los ambientes gays me encantan, me siento tan amparado como deseado, ojalá pudiera decir lo mísmo de los ambientes heteros.
Las mujeres que conozco parecen encontrase muy agusto conmigo y parece que las agrado y hasta fascino, pero en los hechos veo que no las atraigo, cosa absurda para mí , y es que lo que es lógico para un heterosexual ''normal'' para mí no lo es y vice-versa. 'Storm, explicate mejor', ok, lo haré, cualquiera diría que soy como soy apesar de que me gusten las mujeres, se equivocan, no es un 'apesar'...es un POR LO TANTO.
Qué opinais? Conoceis más casos así? qué os parece?