Cómo controlar los celos de pareja
Como combatir los celos
Reconocer el problema. El principal punto a tratar, a la hora de empezar a controlar los celos, es realizar un autoanálisis y reconocernos como celosos. Muchas veces, necesitamos una mirada objetiva, para saber si lo que sentimos, sólo se debe a nuestra imaginación. Conversar con un amigo de confianza y pedirle su opinión, nos ayudará a tener otra mirada acerca de nuestro problema. Pero cuidado, no vayamos por la vida contándole a cualquier persona que este dispuesta a escucharnos, lo que nos sucede, porque esto, sólo nos generará más confusión. Es clave, escuchar la opinión de un ser querido para poder arribar el problema, pero no de todo el mundo.
Indagar sobre el origen de los celos. Una vez que reconocemos nuestro problema con los celos, debemos buscar el origen. Una conducta de nuestra pareja, nuestro pasado, un problema familiar. Cualquiera puede ser el origen, pero debemos descubrirlo para poder continuar.
Conversar. Es muy importante conversar con nuestra pareja, y explicarle como y porque nos sentimos de esta manera. Hablarlo puede ayudarnos a liberar la tensión que nos provocan los celos y a poder sentirnos más relajados para controlar el problema.
Voluntad. Tener la fortaleza y la voluntad de autodiciplinarnos, para que no se conviertan en celos enfermizos. Cada vez que notemos que aparecen los síntomas de los celos, debemos preguntarnos si tan sólo no se deben nuestra imaginación. Interrogarnos si se debe a las actitudes de nuestra pareja, o si somos nosotros mismos los creadores de nuestra inseguridad. Conversar con nuestros propios pensamientos, nos ayudará a sentirnos mejor.
Buscar nuevas ocupaciones. Si suele suceder, que cuando disponemos de tiempo libre, aparecen nuestros celos, debemos buscar la manera de estar ocupados en actividades propias, para contrarrestarlos. Muchas veces, los celos se originan por disponer de demasiado tiempo libre y tener una pareja que se encuentra continuamente ocupada. Entonces, nada mejor que buscar actividades propias, que nos permitan dispersar la mente y enfocar nuestros pensamientos en actividades productivas. Además, esto nos ayudará a aumentar nuestra autoestima.
Los celos, mayoritariamente, son producto de nuestras inseguridades y de nuestra baja autoestima. Por lo tanto, para combatirlos desde lo profundo, debemos trabajar con nuestras debilidades y transformarlas en puntos fuertes de nuestra personalidad.
Los celos pueden controlarse. La fórmula está en cada uno de nosotros, en nuestra lucha del día a día por controlar cada parte de nuestra mente.
Cuando podamos controlar nuestros pensamientos, conseguiremos un excelente control de nosotros mismos.