Bueno, lo que me pasó este fin de semana, fué, como poco, algo extraño y sorprendente para mí.
El Domingo pasado fuimos a comer mi novia, (con la cual llevo saliendo más de dos años y viviendo juntos, unos cuatro meses) y yo a casa de sus padres. La relación de mi novia con ellos es buena. Con su madre se lleva genial porque se entienden muy bien.
Pero con su padre, la relación deja algo que desear, porque hay que reconocer es un metepatas de cuidado y siempre hace chistes que molestan a su hija, aparte de sus continuas discusiones por chorradas y su imsolente forma de ser. Yo, dentro de un tono educado, yo paso bastante de él. Está ahí y punto.
Pero ahora os cuento lo que ocurrió: nada más entrar por la puerta de la casa de sus padres, nos saludamos los cuatro en el recibidor y en un momento dado que mi novia dejó una bolsa en el suelo para acariciar a la perra, que había salido a saludarnos también, le da un momento la espalda a su padre, que ni corto ni perezoso, ¡zas! le
suleta una palmada el el culo a su hija y, encima, delante de mí. Ella se dió la vuelta enseguida, con lo ojos como platos y mirándome con expresión de sorpresa. Ese gesto indicaba que no era muy normal ese tipo de gestos de su padre.
Yo me quedé más cortado que el pie de Kunta Kimte y no supe cómo reaccionar. La madre puso cara de no darle mucha importancia. A mí, la verdad, me molestó bastante, no por celos ni nada por el estilo, sino porque yo lo entiendo, gestos familiares de cariño
aparte, como una falta de respeto hacia mí.
Me tiré toda la velada un poco serio y ni ella ni yo hemos hablado del tema. Le dije que estaba un poco cansado para excusar mi actitud.
Me gustaría pensar qué opináis vosotros de la situación y si la habéis vivido,
contarme la experiencia.
Muchas gracias.