Los hombres casados y el sexo afuera...
Yo también soy amante de un hombre casado. Y también se masturba pensando en mí. Y también dice que a su esposa ya no le interesa el sexo, pero sé que la adora, tienen un buen matrimonio. Excusa, me puse a hablarte de mí, y este es tu espacio. Lo que quiero decirte es que entiendo cosas de tu sentimiento, de tu preocupación, de esta lógica femenina extraña en la que nos dan todas las señales, de frente, e insistimos en querer redimirlos: ellos se aprovechan de eso. ¿Para qué tenía que casarse si ya en ese momento deseaba escaparse contigo? ¿Cinco meses de matrimonio y ya no hay sexo? Creo que a los hombres les interesa "mantener fogoncitos encendidos", es decir, con seguridad encuentra en ti mucho de maravilloso, y claro, no lo quiere perder, como tampoco quiere perder lo que tiene con su esposa, pero igual, más adelante (o ya mismo) no querrá perderse lo de esta otra que tiene esto otro maravilloso... amarte o no amarte, ese no es el asunto con ellos, es mi humilde opinión. Este personaje lo que demuestra es un deseo de coleccionar y nada perder; ¿estará dispuesto a hacer algo por ti, aparte de masturbarse por no poder tenerte -sexualmente-?
El tema con tu esposo, ¿quieres dejarlo? ¿por qué no te busca sexualmente? ¿no te interesa saberlo? tal vez, y perdona la franquesa, pero viví esa situación, es que él tiene "sucursal"... revisa el tema antes de que sea ya muy tarde, antes de que alguien se tome tu lugar y tú no lo detengas por estar jugando a que "tal vez" el hombre recién casado con otra de verdad te ama a ti, pero lo obligaron a casarse (eso no pasa en realidad, creo).
Tengo 45 años, soy la ... de un hombre de familia, eso no me enorgullece, pero lo acepto como mi realidad, y me pongo en mi lugar: la esposa es la esposa. Si eso NO es lo que quieres para ti, entonces sal de ahí antes de que te enredes más... yo no me salí a tiempo y mi situación hoy es lamentable, en el sentido de que estos profundamente enamorada de ese hombre, de que soy su bastón, su ventana, su descanso, su liberación... pero no soy nada y no tengo derecho a nada, ni siquiera a sentirme triste, porque finalmente es lo que acepté. Mírate en mí: te insisto, si tienes aún algo bello en tu hogar, ve por ello, construir un matrimonio es, también para nosotras, no solo para ellos, renunciar a otras posibilidades. Un saludo. Buena vida, querida, buena vibra.