En respuesta a cortes_5169339
Hola. Estoy pasando por una situación tantito similar. entíendase la ironía.
Por un lado tengo la líbido alborotada, acabo de pasar los 30 igual que ustedes pienso mucho en sexo.
Soy casada hace 10 años y mi esposo es un sujeto maravilloso, siento que lo amo. El problema es que él no es tan sexual como yo. Cuando comenzamos yo le pedía sexo una o dos veces a la semana, pero él se negaba muchas veces. Estaba cansado o le dolía su cabeza, entonces comencé a reprimir mis deseos sexuales al punto que sueño teniendo sexo con él, pero apenas lo veo en físico se me pasa. Hemos hablado algunas veces al respecto, pues mi esposo me reclama por que nunca le volví a insinuar nada, pero simplemente no me apetece o me nace decirle. Él dice que le gusta el seo conmigo y a mi me gusta con él, pero me cansé de sentirme rechazada.
Hace algunas semanas comencé a conversar con un compañero de trabajo de otro país, situación que es cotidiana para mi, pero siento que hemos enganchado un montón. Él ahora por escrito o teléfono me llama a diario durante el horario de atención al público. Siento que disfrutamos platicar el uno con el otro y si se acaba el tema el busca uno nuevo y me vuelve a preguntar. Algunos hombres me dicen que soy atractiva, pero nunca he puesto atención a los alagos. Pero ahora estoy asustada, pues me siento muy atraida por este compañero y si seguimos trabajando juntos nos tendremos que encontrar en algun momento y mis deseos sexuales de repente se volcaron sobre un hombre al que siquiera he visto en persona y tengo miedo de ser debil y engañar a mi esposo.Alguna me puede contar como termino su historia.
A mí me pasó algo parecido con una compañera de trabajo,por cosas de trabajo pasábamos mucho tiempo juntos nos caímos muy bien ella era muy abierta a la hora de hablar de sexualidad y eso me gustaba mucho pasábamos buenos ratos hablando de ello , pero llegó un momento en que me di cuenta de que la deseaba sexualmente, incluso me excitaba hablando con ella. Luego tuvimos varias cenas , no solos con más compañeros y siempre acabábamos juntos tomando algo( muchos compañeros pensaban que estábamos liados) pero no era así.Aunque alguna vez después de cenar y unas copas nos faltó poco para acostarnos , porque ella también se sentía atraída por mi. Los dos pasábamos una temporada floja con nuestras parejas y eso hacia que nos deseáramos más. Una noche acabamos los dos en su casa (no estaba su marido) empezamos a hablar sobre que nos deseábamos nos besamos y tal pero al final decidimos dejarlo ahí y no llegamos a más ,pero nos costó un esfuerzo a los dos no acostarnos. La verdad no me arrepiento de no acostarme con ella, las cosas con mi pareja mejoraron mucho, ella al final se divorció, pero sigue siendo muy buena amiga mía. Esa es mi experiencia si te sirve de algo bien.
Un beso
