Frecuentemente nos encontramos con mujeres que adoptan en una pareja el Rol de Lame heridas, a qué nos referimos con esta denominación dada por el Dr. Nardone,en su libro Los errores de las mujeres en el Amor son aquellas mujeres que buscan consciente o inconscientemente a un hombre que viene destrozado por una relación pasada, y generalmente un pasado muy próximo, en plena etapa de duelo amoroso el cual no se animan a transitarlo solos, sino que buscan alguien que haga de soporte y lama sus heridas.
¿Cómo los detectas?
Pueden presentarse en un papel de víctima plena, abandonado, humillados, doloridos por la ingratitud de sus ex, desolados, buscando poder contar sus penas a quien quiera escucharlo y comprenderlo en su desdicha, pudiendo llegar a enumerar un sinfín de situaciones de padecimiento por las que ha transitado por culpa de su ex pareja. Y en este derrotero de comunicarle al mundo que lo rodea su historia, localiza fácilmente donde hay un espacio y una actitud abierta para curarlo, ¡encontrándote a ti! La que de ahora en más designará la mujer de sus sueños, que lo sacará de todo este tormento
Es posible que lo veas como el mejor hombre que puedes haber conocido, el más romántico, el más generoso, comienza dedicándote un interés inusual, regalos impensados para el corto tiempo que se conocen, sumamente atento a tus necesidades, puede llegar a pasar horas charlando de él mismo y su triste historia, y algo significativo, no tendrá un solo reconocimiento hacia su ex pareja, y tratará por todos los medios posibles que tú también te enojes con ella sin siquiera conocerla, situación que te convencerá aún más de que debes ser tú la Curadora, también necesitará contactarte de contínuo, sea por teléfono, chat, o en salidas románticas. Es sumamente hábil para mostrarse como la persona que estabas necesitando y que el universo tenía reservado para ti, el príncipe soñado que otra ha perdido. (¿O descartado?)
Y comienzas una historia de amor casi intempestiva que te abarca, te absorbe y lo peor de todo No te deja pensar, ni evaluar, ni discernir qué hay detrás de toda esa fachada, porque debería llamarte la atención que un hombre con todas esas cualidades venga de fracaso en fracaso con sus ex, pues es muy común que hayan tenido al menos dos o más relaciones importantes finalizadas en fracaso.
Y ahí estás tú enganchándote gustosa de hacerlo, desplegando una batería de cuidados intensivos dedicados exclusivamente a su persona, haciéndote cargo de éste ser dañado, transformándote en una rehabilitadora de hombres que cargan una mochila dolorosa de ruptura y de la que obviamente no se hacen, no pueden o no están dispuestos a hacerse cargo, ni responsabilizarse de la parte que le corresponde de esa historia pasada. Entonces, te conviertes en su consuelo, su enfermera emocional, su oreja, tratas de captar, intuir, vislumbrar todo lo qué le pasa y como curarlo, y sientes que sólo tú puedes hacerlo, comenzando a con/vivir al lado de un lisiado emocional.consumando tu objetivo de curación, de rehabilitación emocional total cumpliendo todos y cada uno de lo que consideras deberes que una mujer como tú debe hacer.
Reflexiona y Pregúntate:
Rehabilitarlo ¿para qué? ¿Para quién? ¿Para ti?
Ventajas y desventajas del rol que asumiste:
Las ventajas para el hombre en proceso de rehabilitación obviamente son todas, absorbe todo lo que necesita. Sin darte la seguridad que una vez que esté rehabilitado y nuevamente en pié vaya a quedarse a tu lado, y siempre existirá la posibilidad de que se marche sólo con lo que invirtió en la relación Nada, pues se sirve ampliamente de la relación pero emocionalmente no aporta nada, ni invierte sentimientos verdaderos ni compromisos a largo plazo, NO se involucra demasiado, pues ante el mínimo planteo de tu parte pidiendo algo más tendrá la excusa perfecta que necesita tiempo para curarse y poder brindarte lo mejor de él mismo, ya que te mereces mucho más que este despojo en lo que se ha convertido por culpa de una ingrata
Apunta Giorgio Nardone que existen tres posibles desenlaces:
Y si una vez rehabilitado, decide irse de tu lado, porque ya no tienes más nada que darleya se siente recuperado. Pasará de victima a victimario con la misma liviandad con la que llegó.
Si en cambio, no consigues curar sus heridas tendrás a tu lado un desamparado reclamando cuidados constantes que no te brindará nada satisfactorio en el plano emocional.
Y el más doloroso escenario, el rehabilitado hombre, vuelve a sentirse bien, pleno, y decide no sólo irse de tu lado, sino que puede hasta llegar a volver con su pareja anterior, la que disfrutará de tu trabajo realizado.
Y si esto sucede, ¿te has preguntado lo que puedes llegar a vivir? El sentimiento de fracaso, soledad, frustración una vez que se llevó todo lo que necesitaba?, porque ¿sabes qué? No diste amor, diste cuidados, tiempo, dedicación, para tener su presencia en tu vida. Fue un intercambio, y el vacío que dejará desatará malos tiempos contigo misma.
Muchos casos, demasiados, llegan a la consulta, buscando entender dónde se equivocaron y cómo salir de semejante agujero emocional, haciéndose cargo de tener que transitar un duelo para el que no estaban preparadas.
Deseas ser la próxima ingrata ¿? ¿Te ha pasado más de una vez?
¡Piénsatelo, detéctalos! Y busca ayuda profesional para revisar qué es lo que TE pasa frente a estas situaciones, qué se dispara en ti que te deja atrapada en una relación de estas características, qué necesitas, qué carencias tienes y ¡qué buscas!
Eres mucho más que el relleno de interioridades ajenas.
Lic. Beatriz Fernández Lere
Artículo publicado en página FB: Habita tu Vida. Talleres vivienciales- Mujeres en Amores-
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