Tiene que ser precioso, el saberse enamorada. Levantar la mirada y desdeñar el universo en sus ojos, contar estrellas en el cielo de su boca, prender mil amaneceres en su cuerpo. Ser bonita para él, y saberlo en un suspiro en una día cualquiera.
Él lo más bello de los días, eso que miras con la perfección de tu mirada, donde las caricias amansa su alma. Sí yo no soy capaz de ver esto en mis ojos, sentirlo en mi alma, seguiré esperando a que un día el amor me aborde y me sorprenda.
Amor, ese que sin buscarlo te escoge.
Pienso, Luego Siento.