Juego: la frase interminable
Varon
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon
Ver también
¡ni son
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son
Lo
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son lo
Todos
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos
Que
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que
Ni
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni...
Están
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños, inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están...
Y
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y..........
Con
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con......
Le
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le
Ya que
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que
Su
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su
A pesar de que
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que...
Angie
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie...
Desgraciadamente
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente...
Iba
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba....
Habría
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá....Mejor habría
Sido
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido
Este es nuestro siguiente objetivo
Para la acción coordinada reivindicativa
Y
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y...
Por
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y estar... loca, loca de amor por...
Por
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y estar... loca, loca de amor por ...
Tierno
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y estar loca, loca de amor por un cachito tierno...
Y
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y estar loca, loca de amor por un cachito tierno, colorao y...
Suave
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y estar loca, loca de amor por un cachito tierno, colorao y suave...
Ardiente
Cuando tengo que imaginar lo más inverosímil, mi mente juega con actitudes insospechadas que me desestabilizan, y entonces pienso que estoy como una regadera. Pero, quizás pueda conseguir una cafetera y prepararme una dosis grande de sexo en sobre. Triste, me conecto con Lynar para que me explique lo puñetero que puedo llegar a ser.
Cada paso que dí creo que fue más débil. Pero actualmente nunca me canso cuando vivo más de mil días con Sirolira y descubro un nuevo amanecer junto a mis foreros.
Sin embargo, temo que vengan demonios intentando revivir viejos recuerdos y amores desconocidos.
Tumbado en el sofá, me meneo compulsivamente mientras el timbre no me deja concentrarme.
Levantándome, me acerco hacia el movil y marco con rapidez el número de la policía científica, cuando de pronto el horno estalló y todo se llenó de humo.
Con paciencia empecé a volar junto a la maleza que lloraba como un ángel negro.
Cansado de esperar decidí ponerme a escuchar los sonidos lejanos para meditar sobre Deyanara, la más maravillosa tirita para mis sangrientas heridas imaginarias de frío de nostalgia absorbente.
Fue Triskilla, con el apoyo de la mirada de Sellah, la que planeó hurgar en los bolsillos de mis amados sueños. Inconfundibles trozos puntiagudos de realidad chocaron entre éstos y los diáfanos sentimientos y planes de Frankk.
Repentinamente, Varon exclamó: ¡Ni son todos los que están ni están todos los que son! Y cogió el cuchillo con ansia y lo clavó en tí poseído de ciencia ficción!
Pero algo le perturbó, ya que su mano sangraba descomunalmente a pesar de que Angie y Natalieceline fueron abducidas.
Desgraciadamente yo iba borracha, colocá, drogá.... Mejor habría sido no dormir y estar loca, loca de amor por un cachito tierno, colorao y suave como la esperanzadora ilusión ardiente