Lo que me gusta.
Supongo que depende de cada tipo de persona. Yo soy tranquila y ordenada, y a lo mejor tiene que ver eso en cómo me gusta el sexo.
Cuando más me gusta es cuando mi pareja lleva un orden de zonas erógenas de menos sensibles a más sensibles. Por ejemplo, lo primero besitos en la cara y caricias en el pelo que hacen que me relaje. A continuación, beso largo en la boca. Luego, besos en el cuello, un ratito. Luego, pezones, un buen ratito; si está el suficiente rato en mis pezones y me los trabaja bien (besos, lametones y chupetones, y nada de dientes), siento que pierdo el sentido, es maravilloso; ahí puedo tener mi primer orgasmo. Ahora seguirá para abajo, me tocará un momento mis muslos, mis nalgas, para ir abriéndose paso hacia mi sexo. Me lame el clítoris con movimientos rápidos (como las serpientes), sin tocar nada más que con la puntita de su lengua y sin tocar con esa lengua nada más que mi clítoris (muy importante, para sentirlo solo ahí). Con eso puedo correrme varias veces.