Comparto mi historia... tal vez le sirva a alguien.

Hola...

Escribo estas pequeñas líneas como una manera de compartir mi historia personal por un deseo propio de liberación y porque tal vez lo que acá escriba pueda servirle a alguien para sentirse acompañado/a.

Soy hombre y tengo alrededor de 30 años de edad.

Hasta hace poco me había considerado un tipo fuerte, decidido, que iba labrando su propio camino... confiado en mi mismo, en mi inteligencia, en mi capacidad de persuasión y en mi apariencia me sentía en control de la situación.... Mi vida en la edad temprana no fue fácil, mi padre fue un alcohólico, que ha pesar de ser un hombre honesto y trabajador; empañaba la vida de su familia con la violencia... Por ello, crecí recibiendo mucho maltrato y viendo a mi madre sometida... era un niño tímido e inseguro; temeroso de estar en casa y temeroso de enfrentarme a un mundo de niños - adolescentes que yo no conocía, por el estricto control de mi padre... hasta que a la edad de 16 años me enfrente a una decisión: podía pasarme la vida dejando que otros me pasaran encima o podía agarrar la vida con mis manos y hacerme a mi mismo...construirme como un hombre "invulnerable"; como un hombre deseado pero no alcanzado; en ese momento me propuse alcanzar la perfección y jamás dejarme caer en las manos de nadie, ni física, ni emocionalmente.

Así paso el tiempo, y fui creciendo, estudie ingeniería, trabaje viaje al exterior a estudiar un postgrado y viví fuera de mi país por cerca de tres años; al regresar inicié una buena carrera profesional, con negocios propios; un buen prestigio... Para esta época había conocido a la que ahora es mi pareja... una mujer bella e inteligente, a quién siempre he valorado y respetado y de quién me enamoré profunda y sinceramente....vivimos juntos cerca de 6 años...en donde hasta donde cabe mi entendimiento, la respeté como mujer y la hice sentir querida....

En ese punto, de alguna manera sentía que estaba en control de mi vida, aunque había algo que me hacía sentir aún una especie de vacío...

Un determinado día, mi pareja me comentó que tenía deseos de ir a estudiar un postgrado fuera del país, así que lo hablamos y acordamos en apoyar los dos esa iniciativa, que en su momento, yo ya la había tomado, quedándose ella en nuestro país.

Llego el momento de su partida (prevista para un año y un poco más), y se fue... Yo continué trabajando en mis negocios, y las cosas pintaban bastante bien, nuevas posesiones, más reconocimiento...y muchas mujeres que de repente aparecieron en mi vida (un par de amigas de ella), de una manera muy sutil; así que tuve que aprender a marcar distancias, y en los momentos más difíciles de la soledad, aprender a decir no, y atenerme al compromiso que tenía con mi pareja...nunca hice nada... me costo como el diablo, pero no lo hice..

Un día en una conversación por skype, las cosas estaban algo raras, y como un cuchillo salió de mi boca una pregunta: Me fuiste infiel?..un silencio corto...y la respuesta: Si, si paso...hace una semana.... una presión en el pecho me taladraba el alma, no sabía que decir ni que hacer; solo vi una cierta actitud arrogante... una frialdad en decir las cosas, con una entremezcla de verguenza y arrepentimiento.... No podía más...dije adiós y cerré la conversación. Cuando apague la computadora, me quede mirando a la pared en blanco, como fulminado por un rayo; una de las peores sensaciones que he tenido en mi vida; estuve así por espacio de dos minutos, y de repente como por el golpe de un martillo en mi cabeza, caí de rodillas al piso llorando como un niño... vinieron a mi cabeza todas las imágenes de mis errores, de mis propias vanidades, de mis logros....y después la auto compasión; lloré por 30 minutos de manera desconsolada... un día hace, me sentía física y mentalmente fuerte, atractivo y deseado, me sentía exitoso...y en ese momento me sentía la peor mierda del mundo... Luego de una hora, me reincorporé y empecé a "querer" odiarla; tome mi auto y salí a buscar a alguien para conversar... fue un fin de semana horrendo; angustiante y desconcertante, sentía que todo había sido un engaño, sentía como que yo mismo hubiese sido un engaño... no pude más y el día lunes por la mañana acudí por ayuda sicológica, aún dejando de lado una junta de trabajo importante. En mi oficina me trataron de localizar todo el día, y yo no quería saber nada del mundo..ignoré todas las llamadas... se que lo maneje pésimamente, pero debo decir, que en esos momentos me sentía verdaderamente miserable y solo... mi "yo" de cristal se había quebrado.

Para ese entonces, como parte de mi empresa, yo estaba designado como jefe de proyecto para un cliente gubernamental sumamente grande e importante; por lo que tenía partners asociados con esa mentalidad de " compite, mastica y escupe"; esperando la mínima oportunidad para hacerse de lo que me a mí me había costado. En estas circunstancias debía justificar mi inasistencia aquel lunes a una reunión de gabinete ministerial; esa justificación debía ser de manera formal y documentada para evitar problemas contractuales, por lo que tuve que aducir problemas médicos. Y para apegarme a la verdad solicité un certificado médico a mi sicóloga... Nunca me imaginé lo que se venía después... Mi estado emocional esta despedazado y no prestaba mucha atención a ciertos detalles; pero basto aquel certificado médico para que corran los rumores de pasillo sobre mi salud mental y mi capacidad de estar a cargo del proyecto, por lo tanto se ponía en duda mi capacidad para cumplir con el contrato... fue cuestión de dos o tres semanas (no lo recuerdo bien) para que los rumores se hicieran gritos de mentiras infundadas (yo seguía asistiendo a la psicóloga) y que finalmente provocaran que yo perdiera el contrato... y bueno así empezó una época dura en mi vida...un par de meses después realicé un viaje de trabajo a china a la espera de concretar un negocio importante; y no funcionó...perdí dinero, ganas..y al final perdí hasta mi vehículo que tuve que venderlo para saldar las deudas que había contraído...además como parte del problema del contrato (que por razones de espacio no incluyo aquí) la gente con la que había tenido roces me calumnio a morir, y generaron una prohibición para que pueda contratar con el estado... En esos meses creo que pude ver toda la maldad humana generada por la avaricia, el egoísmo y el orgullo insano...

Lo había perdido todo...sentía que el mundo se me había venido encima y que yo ya no tenía la confianza ni la fuerza para hacerle frente. Desde ese entonces han pasado 7 meses... Horribles y constructivos a la vez...Al principio pensé que todo era un castigo por algo que no recordaba haber hecho; ya que por lo general trato de manejarme de forma ética en mi vida con todos y para todo... pero la auto compasión y la búsqueda de culpables eran el camino más fácil. Pero poco a poco, leyendo, pensando, asistiendo con la psicóloga, practicando mucho deporte y poniendo de parte aunque sea un poquito, porque sentía a morir fui aprendiendo que no había sido ningún castigo... fue la consecuencia inaplazable de un aprendizaje obligado en mi vida... aprendí a empezar por la parte más dura de todas: perdonar y perdonarme.... estoy aprendiendo a construirme nuevamente sin venganza hacia nada ni hacia nadie...es terriblemente duro, y aún hoy duermo llorando sin entender plenamente que es lo que me pasa... pero sigo caminando.

Hay cosas que aprendí a comprender....sobre todo a entender que somos seres humanos, y que el error, la vulnerabilidad y el sufrimiento son tan intrínsecamente parte de la vida como lo son la prosperidad y la felicidad. Me dí cuenta de que aún en los momentos más duros de nuestra vida no debemos caer en desgobierno de nuestros sentimientos, ya que precisamente esa es la mayor grandeza del espíritu humano, el control de sus propios impulsos, la disciplina de nuestra mente y de nuestras emociones, aprendí que es cierto que la última de las libertades humanas es la elección de la actitud ante las circunstancias; y que aquello es algo que nada ni nadie puede quitar..excepto uno mismo.


Ahora sigo construyendo, poco a poco es cierto, pero trato de ser paciente conmigo mismo, de no dejarme abatir, y todos los días espero confiado en Dios y en la factibilidad de realizar mis sueños.

Mi aprendizaje sobre esto ha sido tremendamente doloroso, igual de fuerte que el de miles de personas; y solo he querido compartir esto para que alguien se sienta acompañado... tal vez nunca nos lleguemos a conocer, pero el hecho de haber experimentado dolores similares nos da una cercanía más profunda que la de muchas personas que están frente a frente...

Seamos fuerte, que lo podemos hacer. Hagamos de nuestro espíritu nuestra propia morada y tomemos los palos con que nos aporreo la vida para hacer un escalón más hacia nuestros sueños...La vida no es un juego, es una responsabilidad hacia nosotros mismos y hacia los demás.

Todavía hay noches en las que lloró, me siento triste, frustrado y traicionado...entonces hago el mayor de mis esfuerzos por cerrar los ojos, y cuando los abro, es otro día, el mundo giro y no he muerto... vivo con la mira en un sueño y avanzando un pasito a la vez, aunque a veces deba secar mis propias lágrimas, porque se que tarde o temprano pasará todo esto...porque ya lo he pasado antes, y solo me hice más fuerte...exactamente igual que tu...

Un abrazo...