Yo casi a los 15, él con 19, y mi madre no lo acepta.

Esto ya me está afectando realmente, y pues, necesitaba desahogarme de alguna forma. Dicen que para el amor no hay edad, pero cuando una situación de esta índole ocurre la sociedad pega el grito por el cielo, y la verdad, no sé por qué. ¿Es tan difícil creerlo? Tengo 14 años, cumpliré mis Primorosos 15 en junio, y estoy realmente liada con esta situación. Estoy perdidamente enamorada de un muchacho de 19 años, no voy a decir nombres ni lugares puesto que no vale la pena. Ya sé qué están pensando, Es una cría inmadura, ella no sabe de amor, sólo juega a ser noviecitos cuando está metida en su mundo de rosas y estupideces, pero no es así.

Es una persona realmente maravillosa. Todo de él, la manera en la que busca de superarse cada día, la forma en la que me sonríe cargado de un optimismo tal vez absurdo para afrontar todos nuestros problemas No he encontrado a ninguna otra persona que me entienda tanto como él lo hace, es el mejor compañero y cada vez que estoy en su compañía me lleno de júbilo. De hecho, tuve el valor para contarle un suceso realmente deprimente que me ocurrió en mi niñez, mismo del cual mis padres no se han enterado, por mi miedo a que se decepcionen, se molesten, o se frustren No lo sé. Desde hace ya un año que le amo, yo creía que no podrían ocurrir tales cosas pero de nuevo me he equivocado. Fuimos novios, y lo dejamos sin siquiera tener un año, ¿La razón? Mi madre cree que estoy muy chica, y que eso no es correcto.

Muy chica Lo irónico del asunto es que me dijo que si el tuviese mi misma edad, lo hubiese permitido. Pero no entiende que los muchachos de mi edad son realmente inmaduros al menos con los que me he topado, no quiero ofender a nadie-, son sólo niños que creen que porque ya manosean a una chica de la misma edad y la cambian a las dos semanas por otra nueva, son Geniales. Esos que creen que jugar a ser el más malo de todo el lugar rifa, que el sacar notas realmente mediocres rifa aún más, y pues, sólo consiguen gente mediocre que les acompañe en sus boberías. A mí me encanta leer sobre todos los temas, filosofía, psicología, sobre diversas doctrinas, política, ciencias, historia, arte, música y literatura. Esas son mis áreas favoritas. Me vislumbro en el futuro como un profesional sobresaliente, pero al mismo tiempo tengo el miedo de fracasar en lo que me especialice. Soy muy exigente, tal vez demasiado, y eso de andar con pelotudeces como si se fuese un infradotado mental, con la única excusa de Divertirse tampoco me hace la más mínima gracia cosas como gritar improperios cual poseso en una plaza, o por lo menos no tener ni una pizca de respeto ni por sí mismo ni por los demás al andar por la calle.- Prefiero quedarme en casa que salir un fin de semana, me gustan las pláticas interesantes y cosas por el estilo.

He pasado por muchas depresiones constantes. Las únicas discrepancias fuertes que han ocurrido entre mi amado y yo han sido por este tema. Ambos estamos frustrados. Él es un joven con mis mismos gustos, tranquilo, no fuma, no bebe. Llegando al punto cursi, siempre trata de demostrarme el amor que me tiene de alguna forma para que no se llegue a empobrecer. Me ha escrito infinidad de cartas, sí, tal vez con una caligrafía reprochable pero suspiro de felicidad cada vez que las leo una y otra vez, le amo. No lo sé, pero siempre se muestra atento conmigo, como un caballero, aunque no lo quiera cuando voy por la calle con él me coloca del lado que no da a la calle, me presta sus abrigos si tengo frío y me cede su asiento si yo no encuentro uno. Siempre se me queda mirando, y cuando lo noto por el rabillo de mis ojos se muestra muy tímido. Y siempre que nos tenemos el uno al otro, charlando a solas o disfrutando del silencio hacemos un esfuerzo por no abrazarnos y besarnos pues sabemos que no le agrada a mi madre. Aunque creo que las muestras leves de cariño no son sucias, tampoco incorrectas, si se hacen con la persona correcta y un respeto mutuo, pues Sencillamente no se puede.

Nuestras charlas se prolongaron más allá hasta la madrugada. Mi madre ya había acordado que podríamos seguirnos hablando, pero sólo como amigos. Sí, frustrados amigos. Sin embargo aún seguía sin agradarle que habláramos y siempre me reprochaba cuando me encontraba sentada al lado de él. No lo entiendo. Luego se estalló cierto asunto, por el hecho de que a algunas personas no les agradaba vernos juntos no sabía qué hacer e intenté cortar toda relación con él, aunque fue imposible, pues frecuentábamos los mismos lugares por obligación. Ocurrió cierto incidente de celos con una amiga suya, una plasta que sólo se la pasaba acosándole pero es que ya me tenía al borde la tonta esa.- y llorando fui a contárselo a mi madre, necesitaba desahogo, consuelo, y confesar que aún seguía frecuentándole y en más de una ocasión nos besamos. Al menos, yo no me pude contener.

Después de que revisase mi celular y viese la hora de los mensajes que él me mandaba, casi hasta las 3:00am, confiscó mi laptop y mi celular. Me prohibió hablar con él. Siguió siendo inevitable. Un simple Hola se prolongaba hasta un Lamento todos los problemas, pero te sigo amando, y quiero hacer todo lo posible para que esto funcione.

Ahora nos encontramos como estamos. Él quiere que le diga a mi madre que al menos, sigo hablándole, y también quiere disculparse por aquella mentira que fraguamos entre los dos. Realmente se encuentra arrepentido, y no lo culpo, la carne es débil sólo cuando se martillea con la corrupción incipiente para sazonarla con el egoísmo. Él nunca tuvo a ningún adulto que le guiara, su madre le concibió estando muy joven y su padre pues, un ausente total Esos factores le obligaron a que tuviese malas juntas y hábitos en sus 14 para arriba, pero los ha dejado, y ahora es un muchacho sano y recto. Pero, tal vez es por eso que desobedeció a lo que nos dijo mi madre.

No la culpo, ha de sentirse traicionada al igual que yo en algunas ocasiones. Pero tan sólo quisiera armarme de valor y decirle que tengo la madurez suficiente como para lidiar con esto, o al menos eso creo, que mis problemas sólo deberían afectarme a mí y no a ella, porque no es justo que se ande preocupando por mí cuando lo que menos quiero es causarle problemas, al menos no otra vez. La amo muchísimo, para mí es un ángel y es por eso que quisiera como mayor regalo que aceptase mis sentimientos, y que no me obligase a reprimirlos de forma tan brusca. ¿Hacerlo de nuevo a escondidas? No, quiero hacerlo todo bien para que lo acepte, tener la aprobación de la persona a la que más amo en este mundo, y no su decepción. ¿Y cómo no amarla si es la mujer que me dio la vida?

Tarde o temprano espero que lo acepte. Él y yo empezamos con distantes fantasías de un futuro juntos, pero ya se han vuelto tan palpables que no queremos pasar el resto de nuestras vidas con nadie más, tal vez casarnos y tener hijos. Es algo sumamente grande, ambos estamos jóvenes y tenemos la vida por delante, lo comprendo, pero no quisiera que fuese de otra forma. Ambos prometimos que no amaríamos a otra persona, no me importa si lo cumple o no, sólo quiero que sea feliz. Sólo, conmigo, con alguien más, pero que sea feliz aunque eso me duela. Y si ahora gozamos de estas esperanzas y esos sueños, ¿Por qué matar todo aquello que hemos estado construyendo?

No importa si alguien se burla o no lo lee entero, sólo quería desahogarme de alguna forma u otra. Si me quieren dar algún consejo adelante, será gustosamente bienvenido, o compartir alguna experiencia similar, también. Por ahora me queda armarme de valor para platicar con mi madre, son muchos los nervios y el miedo de que lo tome a mal, pero alguna vez me dijeron No temas al día que no has visto todavía.

Buenos días, tardes, o noches. Un abrazo.