¡un libro sobre la masturbación femenina!

¡buenisimo!
Bueno, no voy a añadir nada a lo que ya han dicho otr@s sobre este libro. Sólo dos cosas. Que es cierto que rompe con todos los tópicos que tenemos sobre la masturbación (masculina y femenina) y otros aspectos de la sexualidad en los que creemos. Y que me ha gustado mucho el poema de Antonio Machado con el que el autor abre el libro: "En mi soledad he visto cosas muy claras que no son verdad". Porque sobre este tema dod@s hemos ido a ciegas y nos hemos creido miles de tonterías que así nos tienen: ¡agarrotás!
Leedlo porque no os arrepentireis.

Te gusta masturbarte?
entra en este sitio!

http://es.groups.yahoo.com/group/masturbametu/

Grupo de hombres y mujeres que tienen como hobbie masturbarse... solo para celibes!
Aqui encontraras información al respecto

¡qué maravilla!
Da gusto encontrarse libros así, ¿o no?, a las mujeres nos queda por descubrir todavía mucho en esas cuestiones, que mejor que investigar más sobre nosotras mismas, y después, LA PRAXIS....

Es raro que lo haya escrito un hombre, pero también una maravilla porque ha centrado su atención en un tópico del que pocos se han interesado.

En fin, me encantaría leerlo...

Y gracias por la recomendación.

Me ha en-can-ta-do.
¡Qué fuerte! Pone al descubierto un montón de cosas que o ignoramos o no queremos ver. Y pone el dedo en la llaga cuando reprocha a tod@s la parte que nos corresponde en mantener un silencio que lejos de proteger a las mujeres las esclaviza y les impide la libre vivencia de su sexualidad.
He aprendido un montón y no sólo sobre sexualidad femenina...

Propaganda
¡Esto sí que es propaganda! Además, he visitado el lugar y me parece que sólo estais 4 personas.

Basicamente lo mismo que a tí
Me impresionó el silencio que se guarda sobre la circuncisión ritual masculina que muchas mujeres ven justificada. Es increible que no se hagan campaña contra eso que se realiza en las mismas deplorables condiciones higiénicas que las femeninas y se llevan por delante el frenillo, la zona placentera masculina.
No entiendo tal silencio, ni la anuencia femenina con ello. Su pongo que serán resabios hembrisas.

Algo inusual.
Otra cosa que me ha gustado del libro, porque creo que es inusual, es que en un momento determinado, el autor toma a las lesbianas como ejemplo para explicar cosas sobre la sexualidad de las mujeres heterosexuales. Lo habitual es que haga al revés.
Creo que ha sido un ejercicio de osadía por parte del autor. Aunque, para los pacatos tiempos que corren (lejos de lo que creemos) todo el libro es una osadía.
¡Bienvenida sea! A mi me ha servido mucho.

Gaudemihi y flavia1966
Gaude, ¿has leido ya el libro como dijistes? ¿Qué te parece?
Y ya que reapareces Flavia1966, ¿qué te parece el libro a tí?

Me ha encantado.
Desde luego, la que tenga sentimientos de culpa por masturbarse, se le quitan leyendo este libro.
Yo creo que nos es muy útil a las mujeres, porque nos permite enmarcar adecuadamente la masturbación y nos libera de viejas y erróneas ideas.
Pero también lo tienen que leer los hombres para que aprendan a contemplar con naturalidad la masturbación femenina. A alguno le he oido decir más de una tontería al respecto.
De modo que, chicas: leedlo. Y vosotros, chicos: leedlo (de verdad, os ilustrará un montón sobre esta práctica "femenina").

¡ay, ay, ay!
Si fuera psiquiatra te diría que has organizado todo de forma que te sea imposible leer el libro. Pero como no lo soy no te lo diré.
¿Por qué das tanto rodeo? ¿No te parece que con el procedimiento que has elegido te llegará en Abril también?

Estoy loca por comprarlo!!
Una amiga me lo recomendó ampliamente. Por mi parte quiero recomendarles el siguiente grupo dedicado a la masturbación:

http://groups.msn.com/jb8sffmeoh18oibtbvft4639f0

Saludos a todas,

Jano

Para shelove
¡Hola!

Como hombre que soy, te digo amiga Shelove que sólo a los "tíos" retrógrados les puede resultar rara una práctica tan sana y natural como es la masturbación femenina... Un saludo.

Filosex

Definitivo
Es realmente un libro sin pelos en la lengua. TODOS los tópicos en los que yo creía me ha enseñado que son eso: falsedades.
Además es un ungüento que aligera de culpas si alguien las tiene por masturbarse. Aunque sólo fuera para alcanzar este alivio, algunas deberían leerlo.
Y los chicos deberían leerlo también, porque así tendrán un conocimiento de nosotras que no tienen.
Me ha gustado un montón. No entiendo cómo no se anuncia por la tele, la radio y los periódicos. Libros como este rompen moldes sociales de una forma revolucionaria. Y eso que no es una apología de la masturbación. Pero ¡qué esclarecedor!

Me encantan hombres como tú.
Pero existen otros cavernícolas que no pueden admitir que haya mujeres capaces de masturbarse sin problemas. Eso les muestra que somos sexualmente autónomas y no lo pueden soportar. Se creen que con eso les hacemos de menos. Y si estás emparejada con alguno de ellos y se enteran de que lo sigues haciendo ¡para qué te quiero contar!

¡enhorabuena!
Eso quiere decir que eres muy popular en tu ciudad (o lo es tu dirección). Y en Correo han dicho: "¡Ah, es Gaude (o tu nombre verdadero, más bien), se lo enviaremos!".
Espero que te resulte cómoda su lectura. Espero tu opinión.
Un beso.

¡déjate ya de escusas!
¡A leerlo y a comentar... que nos tienes sobre ascuas!
Es broma ¿eh?

Bueno...
Ya ves que he abierto otro, aunque este no era malo del todo.

No me gusta la otra charla que has abierto.
En efecto, trata de todo menos del libro en cuestión. Está bien, pero no para discutir del libro.
¿Os habeis fijado en las frases más o menos famosas que encabezan cada capítulo? Son una antología por sí mismas. A mí me gusta una de Lain Entralgo: "No mi cuerpo y yo, sino mi cuerpo: yo". Que indica hasta qué punto no somos nada sin nuestro denostado cuerpo.

De acuerdo.
En principio me pareció una buena idea, pero lo cierto es que se está decantando hacia otros aspectos de la masturbación femenina más prácticos. Me parece bien que esté abierto. Pero si de hablar del libro se trata, yo también prefiero esta charla (lo siento Gaude).
Rodrigo, se te ha olvidado comentar que el capítulo encabezado por esa cita es el de Anatomía genital, lo que le da mayor valor aún pues viene a decir que "esas partes" (como se titula el capítulo) también son nosotras mismas. No que formen parte de nosotras, sino que son nosotras mismas. Con lo que dá a la sexualidad y a la masturbación una dimensión integradora impresionante.
Tiene un montón de lecturas este libro. Y este que sugieres, el de las citas, configuran un pequeño ensayo por sí mismas.

Extrañeza.
Sí. La verdad es que me extraña que no haya más comentarios sobre este libro. Quiero decir de otras personas diferentes a las que ya hemos dado nuestra opinión. ¿Es que nadie más lo ha leido?
En otro orden de cosas: ¿hay algo en el libro que no os haya gustado? ¿A mí, personalmente, me ha gustado todo y me he sentido identificada con todo lo que tiene escrito.

Texto de su presentación.
Lo subo porque me da pena que esté tan perdida esta charla.
Además, he encontrado el texto de presentación del libro por el autor en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid.
Lo podeis encontrar en www.webmujeractual.com. Concretamente en:

http://www.webmujeractual.com/noticias/encuentropl-acer.htm

No tiene desperdicio.

Sobra un guión.
No sale porque en la dirección que he puesto sobra un guión. La buena es ésta:

http://www.webmujeractual.com/noticias/encuentropl-acer.htm

Si se os lía la cosa, id directamente a www.webmujeractual.com y ya está. En su página de inicio figura la referencia al libro.

Otra vez el guión
http://www.webmujeractual.com/noticias/encuentropl-acer.htm

Sobra el guión entre /encuentropl-cer

Me he permitido...
...copiar el texto que dices al completo. Quien quiera visitar esa página puede hacerlo (hay cosas tan interesantes como ésta y más). Quien se sienta perezos@, ahí va:

"Presentamos un libro que trata de la masturbación femenina; un tema que a muy pocos deja indiferentes y que suele intimidar mucho, sobre todo a las mujeres. Es posible que esa sea la razón por la que se hable tan poco de ello hasta el punto que a veces parece como si no existiera. Quizás por eso nuestros conocimientos sobre el autoerotismo femenino sean tan parcos y lo poco que creemos saber unos y otras de él esté montado más sobre fantasías y errores que sobre realidades.

Acaso ésta sea la principal razón para escribir un libro que recoja los datos existentes sobre la masturbación femenina: conocerla mejor y situarla en su verdadero contexto dentro de la sexualidad de la mujer. Como veremos después, evitar un sufrimiento innecesario es otro de los motivos que hicieron que escribiera este libro.

Pero, antes de continuar quisiera advertirles que el presente texto no es un libro de autoayuda. No tiene la vana pretensión de enseñar a masturbarse a las mujeres. Ni intenta mostrarles fórmulas exóticas para hacerlo. Da por supuesto que las señoras saben cómo masturbarse sin necesidad de que nadie venga a enseñarles a hacerlo. Tampoco hace apología de la masturbación. Este libro es un ensayo sobre el autoerotismo femenino. Tiene un carácter ciertamente divulgativo, pero está sólidamente basado en los datos existentes sobre el mismo.

¿Se han preguntado alguna vez por qué las mujeres no hablan nunca de la masturbación femenina? No lo hacen ni siquiera entre sí, pese a su proverbial locuacidad en lo que se refiere a confesiones íntimas. ¿Se han preguntado por qué cuando lo hacen son menos directas y emplean más circunloquios y perífrasis que cuando se refieren a la masturbación masculina? ¿Por qué tantas niegan hacerlo cuando se les pregunta directamente? ¿Han advertido el perfil de presencia tan bajo que tiene el autoerotismo femenino en los medios de comunicación, en la literatura, en el teatro, en la cinematografía y en la televisión si lo comparamos con el masculino (que parece casi omnipresente)? Este libro repasa con cierto detalle las razones por las que las mujeres no se atreven a hablar de sus actividades autoeróticas: la influencia que tiene sobre ello su personal aprendizaje diferenciado de la masturbación respecto a los hombres, y el peso que ejercen sus creencias en ciertos tópicos (falsos) sobre algunos aspectos del modelo femenino que la sociedad les impulsa a asumir (a ellas y a nosotros los hombres).

Este libro profundiza en el análisis de lo que se encuentra bajo la espesa capa de silencio que envuelve a la masturbación femenina. Muestra lo que hace que una actividad tan inocente y natural, tan universalmente extendida entre el género femenino, sufra tamaño secuestro social. Y se cuestiona: ¿a quién beneficia tal ocultación? ¿y, sobre todo, a quién perjudica?

Existen razones personales que impiden a las mujeres liberarse del corsé que las angosta respecto a este tema. Este libro las analiza una por una. Pero también las hay sociales.

A nuestro entorno parece interesarle pasar de puntillas sobre el tema del autoerotismo femenino porque éste revela que las mujeres poseen una sexualidad autónoma, que le es propia, ajena al hombre y a los requerimientos reproductivos de la especie. Es algo que sólo depende de ellas y que comparten cuando les place. Esto es algo que no se quiere ver: la masturbación es una representación vicaria de los verdaderos impulsos sexuales femeninos. Silenciar la existencia de la masturbación femenina significa evitar tener que aceptar, como indican los numerosos datos que aporta este libro, que dos de cada tres señoras tienen deseos sexuales espontáneos frecuentes (a diario para algo más de la mitad de ellas) a los que, por otra parte, gustan satisfacer; y que no son indiferentes a la imaginería erótica respondiendo únicamente al romanticismo como dice el tópico. Callar implica desviar la vista del hecho de que un 42% de las mujeres se excita más rápida e intensamente que el promedio de los varones. Mantener el silencio significa no tener que plantearse que a ellas les "importa el tamaño" por razones tanto psicológicas como fisiológicas, pese a lo que se sostiene popularmente. Encubrirlo significa evitar tener que aceptar que las señoras son rápidas en su respuesta sexual frente al estímulo pertinente (10 segundos) y que pueden alcanzar el orgasmo en apenas cuatro minutos, lejos de la idea convencional que hemos heredado de la época victoriana. No pensar en esa actividad sirve para ocultar que la masturbación es el método más eficaz que ha tenido -y tiene- la mujer a lo largo de la historia para llegar al clímax, razón por la que es -y ha sido siempre- su principal y más constante fuente de orgasmos durante toda su vida (hasta el 80% de los orgasmos de las mujeres más activas sexualmente proceden del autoerotismo). Por eso no se quiere ver que esta es una actividad sexual que se extiende virtualmente a toda la población femenina orgásmica, hasta el extremo que afirmar de una mujer que es orgásmica es prácticamente sinónimo de decir que se masturba.

Pero nuestra sociedad no está muy segura de querer aceptar esto y por eso despliega toda suerte de estrategias intimidadoras para evitar que su realidad aflore. A nuestro grupo social le conviene mantener vivos los tópicos que cubren las lagunas de conocimiento que tiene la población sobre la masturbación femenina porque así no se ve la verdad. Los datos recogidos en este libro de la literatura científica y de los estudios realizados sobre la población general revelan que casi todo lo que creemos saber sobre el autoerotismo femenino (y masculino) es falso. Por eso me permito recomendarles su lectura.

Este libro muestra que las principales perjudicadas por este silencio son las mujeres (aunque no menos los hombres). Y lo son porque crecen en una completa orfandad social acerca de sus actividades autoeróticas. Muchas niñas se desarrollan con la íntima convicción de que son la única mujer que se masturba en el mundo, en un entorno social que afirma que eso sólo lo hacen los hombres y silencia que las demás mujeres también lo hagan. Además, se ven impulsadas a identificarse con un modelo femenino disfuncionante, pues los estudios existentes muestran que las pocas mujeres que no practican el autoerotismo son psicológicamente más inmaduras y socialmente menos asertivas que las que sí lo hacen, lejos de lo que señala el tópico. Lo que sin duda obstaculiza su adaptación a una vida sexual de pareja sana. Porque en ese inseguro ambiente de silencio ¿cómo se atreverán a comunicar a su pareja sus preferencias sensoriales? Y los hombres ¿cómo podrán adivinarlas si sólo son humanos y carecen del don de la clarividencia?

Hay que romper el silencio que se cierne en torno a la masturbación femenina para suprimir de una vez el sufrimiento innecesario que genera. El marco de referencia que dibuja el presente libro está muy lejos de los tópicos que actualmente sustentan nuestro "conocimiento" de la misma y que creemos como ciertos por la simple "evidencia" que proporciona la costumbre. Por eso representa el primer paso a dar para romper ese espeso muro de silencio. Porque los datos que contiene les hará reflexionar sin duda, y no les dejará indiferentes.

¿Creen ustedes que a las mujeres les resulta verdaderamente difícil descubrir la masturbación por la configuración anatómica de sus genitales? ¿Creen que ellas descubren tardíamente el autoerotismo? ¿Creen que no les atrae esta actividad por la lentitud de su respuesta sexual? ¿Creen verdaderamente que sólo descubren el autoerotismo después de ser iniciadas sexualmente por los varones? ¿Creen que la masturbación es menos frecuente entre las mujeres que entre los hombres? ¿Realmente creen que la masturbación femenina desaparece cuando la mujer inicia una vida sexual activa? ¿Creen que una mujer con una gran actividad sexual mantiene una escasa frecuencia autoerótica? ¿Creen que la masturbación en la mujer casada aparece cuando el paso del tiempo introduce el aburrimiento en su vida conyugal? ¿Saben cual es la probabilidad de que una mujer emparejada continúe masturbándose? ¿Creen que el autoerotismo aleja a las mujeres de los hombres (o de sus parejas femeninas) y de sus deseos de copular? ¿Saben ustedes cual es la principal y más frecuente fuente de orgasmos entre las mujeres? ¿Creen ustedes que es tan normal que una mujer se masturbe como que no lo haga? ¿Creen ustedes que la ausencia de masturbación es un signo de madurez psicológica en la mujer?

En el libro que les estoy presentando encontrarán las respuestas. Por eso vuelvo a permitirme recomendarles su lectura. Y les adelanto que una buena parte de tales respuestas les sorprenderán, pues se masturban entre el 85% y el 93% del conjunto de las mujeres (entre el 91% y el 99% si sólo se tienen en cuenta las que son orgásmicas, que lo son el 90% de las mujeres), lo hacen tanto las que no tienen relaciones sexuales como las que son más activas sexualmente (la probabilidad de que una mujer emparejada siga masturbandose está entre el 90% y el 96%), desde los 6-7 años hasta la ancianidad. Y lo más importante de todo: no por eso dejan de sentir ganas de mantener relaciones sexuales con sus parejas.

Muchas veces se ha señalado que la masturbación es una actividad contraria al orden natural de las cosas. Por eso el texto al que estoy haciendo referencia en esta presentación analiza los datos que muestran si la masturbación femenina se encuentra dentro o fuera del Orden propuesto por la Naturaleza.

La masturbación femenina no es un producto final de la sociedad civilizada donde la liberación de la sexualidad femenina le ha hecho alcanzar actividades hasta ahora vedadas para ellas. También se da con carácter universal entre las mujeres de los (llamados) pueblos primitivos. Y entre las hembras de nuestros primos hermanos los chimpancés bonobos. Y entre las de los restos de los simios... y entre las de los mamíferos más alejados de nosotros como pueden ser los puercoespines o los elefantes. Y las observaciones realizadas muestran que tales comportamientos son ajenos a las necesidades reproductivas de las especies. Nuestras parientes bonobos se masturban aisladas y en periodos alejados del estro: por puro placer. Y masturban también a sus congéneres para reforzar lazos amistosos. Y a los machos, para calmar su agresividad o, simplemente, jugar.

Estos comportamientos muestran que la masturbación femenina (que es el objeto de este libro) se encuentra dentro del Orden Natural de las cosas; lejos de las teorías que preconizan algunas ideologías.

Si los seres vivos heredamos de nuestros ancestros las conductas que resultan más adaptativas y los mamíferos compartimos las actividades autoeróticas desde nuestro antepasado común más lejano (de quien se supone que todos los mamíferos actuales lo han aprendido), podemos señalar que la masturbación femenina tiene una antigüedad de doscientos veinte millones de años. El momento en el que las actuales pruebas paleológicas sitúan la aparición del primer mamífero.

Es una especulación.
Como lo son las de las antiguas leyendas que señalan el origen de la masturbación nada menos que en la deidad germinal, la creadora de todo lo existente. Una leyenda pelasga, con más de tres mil años de antigüedad, nos da la versión femenina de tal origen. Otra egipcia, con más de cuatro mil años, aporta la masculina.

La masturbación ha ocupado la mente de muchas personas a lo largo de los siglos. Hoy nos encontramos lejos de la locura antiautoerótica que invadió el siglo XVIII y duró hasta bien adentrado el siglo XX. Pero el silencio que se guarda respecto a la masturbación femenina no permite adelantar el paso que es necesario para que se interiorice verdaderamente como la conducta natural e inocua que es. Por eso es tan importante hablar de ella: para conocerla mejor y darle la carta de normalización social que tiene en la actualidad la masculina.

Quizás por eso, el primer paso sea adquirir esos conocimientos de una fuente a mi juicio fiable, que si tiene algún mérito, es el de haber reunido en un solo volumen una cantidad importante de información que hasta ahora permanecía dispersa, posibilitando la adquisición de la perspectiva necesaria para lograrlo.

Por eso, modestamente, al finalizar la presentación de este libro, les vuelvo a recomendar su lectura crítica.
Muchas gracias por su atención".

¡uuufff!
¡No está mal! Me hubiera gustado estar presente porque, desde luego, el autor me habría convencido de comprarlo (lo hice, pero no por esas palabras, como se ve más abajo).

¡hola!
Hacía tiempo que no veia esta charla. Gracias por subirla Varón. El libro lo merece.
Juannnnn: eres un cretino.
Demuestras no solo no haber leido el libro, sino tampoco las críticas hechas en esta charla. El libro citado no es en modo alguno una guía de masturbación para las mujeres (ya nos apañamos solitas). Lo que hace es denunciar el silencio que la sociedad (y nosotras mismas) hace sobre este tema. Parece que al ocultarlo quiere no ver que tenemos impuslsos sexuales autónomos, que no tienen nada que ver ni con la reproducción, ni con el amor, ni con las necesidades de los hombres. Además se esfuerza en demostrar la normalidad y frecuencia de la masturbación femenina con un montón de datos que desmontan todo lo que creemos saber sobre este tema.
Créeme: no te vendría mla leerlo. Te aclararía muchas cosas.

¡qué alegría!
Qué alegría me ha dado ver otra vez esta charla que inicié hace ya...
Voy a contribuir a subirla cada vez que entre en el foro. Porque la verdad es que da pena que muchas de las cosas que pueden leerse en ese libro pasen desapercibidas para l@s forer@s.
Por cierto, Gaude: ¿conseguistes que leyeran el libro los de la televisión de tu país?

Me encantó.
Por ahí abajo están mis comentarios.
Es un libro muy recomendable. ¡Cuántas mentiras creemos que son ciertas, por favor! Libros como este son necesarios.

Lo subo.
El libro vale la pena.

Yo también lo subo

¡arriba caramba!
Que me gusta mucho este libro y es una pena que esté perido por ahí.
Muchas se beneficiarían de leerlo para sacudirse algunos complejos. Y otros muchos también, para que sepan de qué va la cosa.

¡jo!
¡Qué bueno! ¿No? Que un tío se preocupe por la mitad silenciada de la humanidad en un tema tan importante como ese es muy bueno ¿no?

Hola
Yo tengo uno muy bueno, que me hizo llegar una de las chicas del foro, no se si es el mismo libro, pero si es el mismo autor. El ejemplar es gratuito y esta en la web.

El libro se llama "Mujeres a solas", y es un libro para desaprender todos los tabues que nos han enseñado sobre la masturbacion femenina.