tenía unos días sin comunicarme con Alfredo porque estaba entretenida con las nuevas citas, pero esta semana no hice ni una, así que le llamé y quedamos de vernos.
Resulta que Alfredo está enfermo, lleva como 15 días en tratamiento, y sufre fuertes dolores en los huesos, que no lo dejan dormir salvo dos horas aún tomando calmantes para el dolor.
Pues me dijo que este martes se murió su primo, así le decía de cariño a su mejor amigo, a mi a cada rato me lo mencionada, hasta me decía que si hacíamos un trío con su primo.
El señor murió al día siguiente que le diagnosticaron cáncer pulmonar, el lunes fue al hospital porque le dolía la espalda, y los doctores le comunicaron a los hijos que a su papá le quedaba 4 meses de vida, y el señor se murió sin saber que tenía cáncer, se fue a su casa y dijo que se iba acostar porque veía borroso y ya no se levantó.
Pobre Alfredo, enfermo y su mejor amigo muerto.
Y me siento un poco culpable, porque le dije que dejara de hablar de su enfermedad, porque me cortaba la inspiración.
Está adelgazando.
Se me antoja una dona, en la escuela las estaban vendiendo y sólo quedaban las aplastadas, pero olían muy rico, y ahorita se me antojan hasta las aplastadas.
Me voy hacer una quesadilla.
le dije a Alfredo que tuve dos citas, pero que no pienso tener sexo con ellos, sólo con él.
Ah por cierto, ya me pagaron mi aguinaldo, ando rica.
Ya casi salimos de vacaciones.
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