Empecé con mi novio hace poco más de un año y, como pasa con todas las relaciones, era maravilloso. Mi última relación había sido bastante tóxica y él me hizo volver a recuperar la ilusión; no discutíamos demasiado y cuando pasaba, era por chorradas, hasta que empezó el verano, cuando empezamos a tener discusiones cada semana, que resumiré en celos e inseguridades por su parte. En verano también fue cuando me enteré de que me había estado mintiendo: me dijo que se estaba sacando la prueba de acceso al grado superior, le estuve ayudando a estudiar y resultó que lo que estaba haciendo era el equivalente a 3ESO. Me pidió comprensión y se la di, aunque en ese momento sentí como que se rompió algo. Un mes después tuvimos una fuerte discusión por sus celos, en los que me acusaba de hablar con otro: para él, yo no me tendría que sentir dolida porque eso es que me quiere y que si no es verdad, que se lo explique con normalidad. Estas últimas semanas ha habido veces en las que, o se olvidó de que había quedado conmigo, o me retrasaba la hora, solo porque estaba con algún amigo suyo. Yo por estas cosas, que siempre he hablado con él y a las que el decía estar arrepentido, siguen pasando y yo no le encuentro como antes, pero hablo con el y me hace ver que soy una exagerada, que tampoco es para tanto y que no es motivo para dejar una relación. He perdido la ilusión pero aún así, me falta un empujón para zanjarlo de una vez, porque tiendo a pensar que quizás soy yo la que está equivocada y la que ha hecho mal las cosas, y me voy a arrepentir siempre si lo dejo.
Agradecería mucho vuestras opiniones y experiencias si habeis pasado por algo parecido