Hola a todos. Tengo 27 años. El motivo de compartir esta anécdota es con la finalidad escuchar a alguien que haya pasado o esté pasando por una situación similar, y en el proceso poder ayudar. Además de mostrarles a las chicas una cara distinta de la moneda.
Mi maldición comenzó hace 7 meses, estaba saliendo con una chica a quien realmente quería mucho. Realmente la quería. Me la pasaba excelente con ella. El tiempo no existía estando con ella. Llegó esa noche, LA MALDITA NOCHE la nombro, en la que íbamos pasar nuestra primera relación sexual. Un noche de películas, y todo muy bien. Comenzamos con los preliminares, y a la hora de la penetración, ocurrió mi desdicha. Me dio a lo que se le llama gatillazo. Creo que abre durado a lo mucho tres minutos. Después ya no pude contener la erección. Ya se imaginaran cómo me sentí en ese momento. Peor que basura.
La mente se me cerró, claro, tenía que quedar bien con la chica de mis sueños. Pero fallé. Ella actuó muy calmada. Y no tocamos el tema. Sin embargo algo dentro de mí decía que esto iba acabar mal; así fue. No la vi por dos días, por motivos de viajes, pero el cambio ya era presente. Ya no me escribía. Se había alejado.
Al volver a verla, porque trabajábamos muy cerca, se acercó a con la intención de contarme algo. Recuerdo bien sus palabras. Me dijo que en un convivio, entre las copas, se había besado con otro chico: “ya lo sabes, toma la decisión”. Quise entender la situación. Pero lo que entre dientes me decía era: “Ya no quiero seguir contigo”. Por consiguiente, esa ilusión de una bonita relación se terminó. Lo peor de todo fue por mi culpa.
Caí en una gran depresión. El saber que no fuiste lo suficiente hombre para la mujer con la que quieres estar duele. El motivo fue claro. Desde ese día, no saben cómo maldigo esa noche. Ya que días antes, había tenido unos problemas laborales y personales que me tenían muy triste y sobre estresado. También tengo que admitir que ella era mi tercera pareja sexual, ya que no soy de los que andan con una y con otra, para eso soy muy especial. No sé si fueron todo esos factores, puede que sí. Sólo me hubiera gustado que me hubiera dado otra oportunidad; pude haber buscado ayuda profesional; pude haber buscado la solución a ese detalle; es devastador que por un error, todo se haya ido a la mierda, por mi error.
Hubiera preferido mil veces la verdad. Porque sobre eso hubiera sabido en qué estaba mal, y claro, no soy el mejor amante del mundo, pero pude mejorar, soy muy bueno aprendiendo, pero no tuve un segundo chance. Ahora ella está con alguien que la llena en todo los sentidos.
Actualmente llevo una lucha psicológica para que no me vuelva a pasar lo mismo, al punto que prefiero no tener interacción con las mujeres, por miedo a que me pase otra vez. Y no volver a sentir que no sirve ni como hombre. Soy de los que siempre ha pensado en el pacer de la pareja, y si no puede darle eso a una mujer, qué caso tiene ser “hombre”. Realmente es muy triste. Espero un día poder superarlo.
No sé si esta historia sirva. Si alguien está pasando por algo así, sólo quiero que sepa que no es el único. Y chicas, si se encuentra a alguien que sufra de eso o de cualquier disfunción sexual, y es una gran persona, platíquenlo. Siempre es mejor una verdad, porque así nos abren los ojos. A todos nos puede llegar a pasar. Todos merecemos una oportunidad de mejorar. Me gustaría leer sus comentarios u opiniones sobre esto. Muchas gracias.