Foro / Pareja

Infiel

Última respuesta: 18 de julio de 2018 a las 3:08
T
thays_1020359
17/7/18 a las 2:17

Mi nombre es Nanci, tengo 30 años, me considero una mujer que trata de cuidar su cuerpo, para lo cual hago natación y gimnasio. Llevo 12 años de casada y tengo un hijo.

Soy maestra desde hace más de 10 años, pero siempre había trabajado en colegios particulares hasta hace un año que decidí realizar mi examen para tratar de ganarme una plaza en una primaria de gobierno, afortunadamente me quede, desafortunadamente estaba la escuela a una hora de mi casa, cosa que si me creaba cierto conflicto, ya que tenía que dejar más tiempo a mi hijo solo en casa, ya que mi esposo también trabaja, y para poder realizar un cambio a una primaria más cercana a mi domicilio tenía que estar de dos a tres años trabajando en la plaza  ir me habían asignado.

Mi trabajo hablaba por mí, y rápidamente me gane a la directora de mi escuela, al grado de contarle que todo me parecía muy bien a excepción de la distancia al trabajo, ella prometía averiguar si podía hacer algo al respecto.

El último viernes de cada mes no hay clases para los niños, ya que nos dan asesorías de supervisión en una escuela designada, el supervisor era un hombre un tanto atractivo, alto, delgado con el cabello un poco canoso y de unos 55 años, a algunas de mis compañeras les atraía este hombre. Las asesorías eran de 1:30 a 6:00 pm, es decir el mismo horario que teníamos de trabajo.

Cierto viernes cuando termino las asesorías en supervisión me disponía a retirarme, se me acerco él supervisión y me pidió que me quedara un momento, porque necesitaba platicar conmigo. Me dijo que la directora de mi escuela le había comentado mi situación de la distancia de mi trabajo con respecto a mi domicilio, me dijo que era algo complicado hacer un cambio antes de los dos años, pero que él podía interceder por mí para lograrlo, que tenía que meter unos documentos y que estaba seguro de que lograría a más tardar en dos meses realizar el cambio de plaza, estaba muy feliz, era la mejor noticia que podía haber escuchado, solo que necesitaba que el próximo viernes le firmara unos documentos y además le anexará mis documentos personales para iniciar el trámite, le dije que él me dijera la hora y yo iría a supervisión a buscarlo, me dijo que prefería invitarme a comer, cambie totalmente mi semblante y le dije en tono de reclamo porque no podía ser en su oficina, me respondió que iba a ser muy sincero conmigo, no es fácil conseguir el cambio, que él tendría que pedir unos favores y que aunado a eso el hecho de que una vez realizado el cambio ya no me volvería a ver, porque también mi supervisión cambiaría, que por lo menos le aceptará una invitación a comer para despedirnos, termino diciendo que no le contestara nada ahorita, que lo pensara y le llamara.

Salí y me fui a mi casa un tanto desconcertada, no sabía si contarle a mi esposo o de plano mandarlo a volar y es qué desde que me case nunca volví a salir con ningún hombre a solas, llegue a mi casa y el sábado por la noche cuando ya estábamos acostados mi esposo y yo, decidí contarle lo que había pasado, pensé que se pondría enojadísimo, pero para mi sorpresa cuando termine de platicarle me dijo que pensaba hacer, le dije que por supuesto no saldría con él, y me volvió a preguntar porque no?, le respondí que yo no me prestaba a esas cosas para conseguir algo, él me dijo que lo pensara muy bien porque realmente no me había insinuado nada, solamente salir a comer con él, después de eso me comenzó a besar y termino haciéndome el amor y cuando estábamos en el acto llego a preguntarme si me gustaba Fernando el supervisor, le respondí que no, volvió a insistir para que le dijera la vedad, lo notaba súper excitado y acabe respondiendo que era atractivo pero hasta ahí, sentí como creció más y me lo hizo con más fuerza, creo que no le desagradaba la idea de que saliera con otro.

El domingo ya no dije nada, pensé en llamar a Fernando el lunes y decirle que gracias por el favor pero que no saldría con él, cuando mi esposo volvió a tocar el tema diciéndome que por él no había ningún problema si salía con Fernando, que era mucho más lo que ganaría que lo que perdería, me dijo piénsalo y le pregunté si en verdad no se molestaría que saliera con él, me dijo que no, es más que le llamara para confirmar que iría con él.

Llame a Fernando estando mi esposo presente, porque quería escuchar la conversación, cuando escucho que era yo se puso feliz él supervisión, le confirme que iría a comer con él, pero que solamente podría ser después de las 6 de la tarde que era cuando yo terminaba mi jornada laboral, me dijo que no había problema por eso, ya que había hablado con la directora para que el próximo viernes me dejara salir a las 3 de la tarde, me moleste un poco porque él estaba seguro que aceptaría salir a comer.

Me dijo que también había una película que anhelaba ver y que, si podía ir con él al cine, le refute que el trato era solo comer, mi esposo se me acerco al oído y me dijo que aceptara, que no pasaba nada y acabe cediendo.

No estaba del todo convencida y estuve algo distante con mi esposo por la situación, y el lunes durante el camino pensé en llamar a Fernando y cancelarle, pero entrando a mi salón estaba en mi escritorio un enorme arreglo floral con una nota en un sobre, entró una compañera al tiempo que leía la tarjeta, era mi mejor amiga y le tenía mucha confianza, me pregunto si eran las flores de mi esposo y le conté lo que me había propuesto el supervisor y que las flores me las había enviado él, le conté que mi esposo me había dado permiso de salir con Fernando y ella me dijo, no seas tonta amiga, si tienes el permiso de tu esposo, aprovecha, además está muy guapo él supervisión y mira el detalle que te trajo, se dio la vuelta y se fue. 

Ya no le llame a Fernando, el me llamo a la hora de mi comida y le agradecí por las flores, pero que consideraba que no estaba bien que me enviara eso, y que se podía prestar a malas interpretaciones, ya que todos sabían que era una mujer casada, el me respondió que solo era un pequeño presente, sin darme cuenta se fueron 20 minutos platicando con él, le dije que ya me tenía que ir.

No le platique a mi esposo de las flores, al día siguiente al entrar a mi salón nuevamente encontré un regalo, está vez no estaba a la vista, era una caja de chocolates, y la tarjeta decía “gracias por aceptar salir conmigo”, nuevamente a las cuatro de la tarde me volvió a llamar para preguntarme si me habían gustado los chocolates, le respondí que me volvían loca pero que no era necesario que hiciera todo esto, nuevamente platicamos por teléfono cerca de 15 minutos, nada de esto le contaba a mi esposo. 

El día miércoles llegue nuevamente A mi salón, pero esta vez no encontré nada espere con ansias las cuatro de la tarde no sé por qué, pero ese día no me llamo tampoco. El día jueves nuevamente al entrar a mi salón, no encontré una bolsa grande, me di cuenta que dentro había unas zapatillas altísimas, una blusa negra semitransparente en la parte de enfrente, una minifalda muy corta, medias, y ropa interior (un brasier negro de media copa, y una tanga de encaje). A las 4 me volvió a llamar y le dije que porque me había enviado eso, me respondió que si por favor podía usar esa ropa el viernes, le dije que no estaba bien, que nunca había salido así vestida ni con mi esposo, termino diciéndome que lo considerara.

Llego el viernes y termine de bañarme, seguía dándome vueltas en la cabeza si usar lo que me había comprado Fernando, o usar un traje sastre, hasta que mi esposo se me acercó para preguntarme si la cita seguía en pie, le contesté que sí, me volvió a preguntar que usaría de ropa, le dije que el traje sastre negro, me dijo que con ese parecía monja y comenzó a reír un poco, me moleste y le dije que entonces le daría una sorpresa, el salió de la recámara y a las 12 del día estaba lista para irme al trabajo, cuando baje y me vio casi se le salen los ojos, pensé que me reclamaría por querer salir así vestida, pero fue todo lo contrario, me dijo que estaba bellísima y que el supervisor se quedaría impactado, me coloqué un saco para tapar un poco lo sugerente de la blusa y me fui al trabajo, antes mi esposo me dijo que ese día le tocaba trabajar y que pasaría a dejar al niño con su mama (él trabaja como trailero).

Al igual que mi esposo, mis compañeros de trabajo se quedaron impresionados al verme así vestida, la verdad al principio me sentí algo incomoda, hasta que mi amiga se me acercó y me dijo que estaba muy guapa y que había causado furor en la escuela. Sinceramente tenía mucho tiempo de no sentirme así, fue entonces que decidí quitarme de complejos y de culpas.

Fernando llego puntual a las tres de la tarde salí del escuela y ya me estaba esperando afuera en su auto, como todo un caballero y bajo y me abrió la puerta del carro no sin antes decirme que estabas muy guapa y que me agradecía mucho el haber aceptado salir con él y además usar la ropa que me había regalado, yo solamente le sonreí y subía su auto.

Me llevó a una zona muy exclusiva de la ciudad cuando llegamos a un restaurant muy elegante rápidamente bajo del auto y volvió abrirme la puerta esta vez me tendió su mano para ayudarme a salir, en verdad se comportaba como todo un caballero y eso a mí me agradaba mucho. Comimos muy rico comenzamos a hablar un poco del tema del cambio de plaza, le entregué mis papeles y firme los documentos que traía, una vez hecho esto él me dijo que era momento de disfrutar la tarde, entonces pago la cuenta y nuevamente me llevó hasta su auto, nos dirigimos hacia unos cines cerca de ahí, y una vez que me abrió nuevamente la puerta del auto debíamos caminar varios metros hasta la sala, fue cuando sentí que con su mano  izquierda me tomó de la cintura para caminar juntos, le dije que no estaba bien eso que nos podíamos ver, Y me dijo que no estábamos haciendo nada malo y no me soltó hasta llegar al cine, compro los boletos y entramos, ya dentro lo note que casi no veía la película, que más atención ponía en mis muslos, le dije que me ponía algo incomoda, el me respondió que si me molestaba, le respondí que tanto como molestarme no, ya que si fuera así no habría accedido a usar falda, entonces me dijo que era imposible no voltear a ver mis piernas, ya que estaban hermosas y además se veían aún mejor con las medias y los tacones tan altos que llevaba, sentí que me puse de mil colores, termino diciendo, me encantan.

Termino la película y pensé que todo había acabado, que me llevaría a mi casa, eran las 9 de la noche, me volvió a tomar de la cintura y me llevo hasta su auto, pero me di cuenta que no íbamos camino a mi casa, llegamos a el bar de un hotel muy lujoso, le dije que ya no podía quedarme más tiempo, que necesitaba que me llevara a mi casa, él me dijo que solo lo acompañara a tomarse una copa y enseguida nos iríamos, no me quedo de otra que aceptar, pidió una mesa en un rincón, donde había un sillón amplio, y estaba un tanto solitaria y con baja luz, antes de sentarme le dije que tenía que avisar a mi esposo, le envié un mensaje diciéndole que llegaría un poco más tarde, el me respondió que no había problema que disfrutara la noche, creo que ese mensaje de mi esposo Fue lo que cambió todo, a partir de ese momento me propuse ya no estar tan a la defensiva con Fernando, me sentía como una jovencita de 20 años, tratando de ser seducida por un hombre.

Antes de sentarme me ayudó a quitarme el saco argumentando que hacía calor, aunque realmente sabía que era para ver mi escote, fue muy amena la plática, me preguntaba de mi matrimonio, de mi hijo, mi trabajo, nos dieron cerca de las 11 de la noche conversando, yo ya me sentía mareada por lo que había estado bebiendo, cuando me di cuenta Fernando ya tenía entre sus manos una de mis piernas, y comenzaba a acariciarla, trate de quitar su mano diciéndole que era casada, me respondió que mis piernas lo estaban volviendo loco, que lo dejara, seguimos conversando y el no dejaba de acariciar mis muslos, me decía que le gustaban muchísimo, poco a poco se me fue acercando hasta que nos comenzamos a besar, el no dejaba de acariciar mis piernas, yo correspondía a sus besos, luego comenzó también a acariciar mis senos por encima de mi blusa, así estuvimos cerca de 15 minutos, hasta que le dije que por favor me llevara a mi casa, me dijo que estaba bien, durante el camino no dejo de agarrar mis piernas en su auto, en los semáforos me besaba. Cuando llegamos, me ayudó a bajar y me acompañó hasta la entrada de mi casa, me abrió la puerta, estaba todo apagado, le agradecí y lo despedí, me pidió un último beso y me jaló hacia él y me comenzó a besar nuevamente en la sala de mi casa, y esta vez bajo sus manos hasta tocar mis nalgas, las agarro como quiso, yo  tenía mis dos manos en su cuello, cuando de repente tomo una de mis manos y la puso en su pene, era enorme, yo también comencé a acariciarlo por encima del pantalón.

Me comenzó a decir muchísimas cosas al oído, que nunca había salido con ninguna mujer tan hermosa, que mi piel era tan suave, que mi boca sabía muy dulce, que olía muy bien y que tenía una nalgas muy duras y redondas, termino preguntando que, si me había puesto la ropa interior que me regalo, y me comenzó a besar nuevamente, al tiempo que acariciaba con más fuerza mis nalgas, me estremecí por primera vez y le respondí que sí, me pregunto para quién?, le respondí: para ti mi amor, estaba excitadísima. 

Me llevo hacia adentro nuevamente, se sentó en el sillón y yo en sus piernas, le dije que ya se fuera, que mi esposo podía bajar, me dijo que él sabía perfectamente que mi esposo no estaba, ya que, si fuera así, desde hace rato ya me hubiera corrido, me siguió besando y acariciando.

Comenzó a quitarme la blusa, luego siguió con la falda, me dijo que me parara enfrente de él, quería verme en ropa interior, comenzó a agarrar mis piernas nuevamente, mis nalgas, yo acariciaba su cabello, luego intercambiamos posiciones, yo me senté en el sillón, y el parado frente a mí, comencé a acariciar su pene, y lo saque de su pantalón y me lo metí en mi boca, comencé a lamerlo suavemente, no podía creer lo que estaba haciendo, con mi esposo era muy difícil que yo tuviera iniciativa al hacerle sexo oral y hasta cierto punto no me gustaba, jugaba con su pene, era enorme.

Me levante, lo agarre de la mano y lo jale hacia mí para besarlo, y mordiéndole suavemente su labio le dije: ya quiero ser tuya, y lo lleve a mi recamara, lo desnude, el me quito el brasier, beso y mordió mis senos, me quito la tanga, me hizo sexo oral unos minutos y después muy lentamente me penetro, gemí como nunca antes lo había hecho, lo disfrute tanto, esa noche lo hicimos dos veces.

Mi esposo regresa en dos días y no sé si contarle, o callármelo.

Fernando me sigue buscando y no sé qué hacer.




           

Ver también

T
thays_1020359
17/7/18 a las 2:47

Eso solo el
lo sabe

speakerjuancho2
speakerjuancho2
17/7/18 a las 5:30

Con mi esposa llevamos ese tipo de relación y aunque nuestro inicio fue de forma diferente te cuento que esa sensación de que la esposa disfrute con otro hombre es súper excitante. Lo importante es estar seguros de lo que hacen, saber exactamente si lo que se desea es una complicidad en la relación y sobre todo si existe el amor mutuo como pareja y no sea una excusa para cambiar de relación. Como esposo te comento que la aceptación de tu esposo no significa que él tenga otra pareja o que desee ampliar tus límites sobre él para que le permitas tener otra mujer, pero si es importante ponerse parámetros si en realidad desean mantener su matrimonio, es decir que por ejemplo tu esposo te permite y tu realmente deseas es el goce sexual de otro hombre y no empezar una nueva relación sentimental. Es mi humilde opinión desde mi experiencia personal.

T
thays_1020359
17/7/18 a las 5:48
En respuesta a speakerjuancho2

Con mi esposa llevamos ese tipo de relación y aunque nuestro inicio fue de forma diferente te cuento que esa sensación de que la esposa disfrute con otro hombre es súper excitante. Lo importante es estar seguros de lo que hacen, saber exactamente si lo que se desea es una complicidad en la relación y sobre todo si existe el amor mutuo como pareja y no sea una excusa para cambiar de relación. Como esposo te comento que la aceptación de tu esposo no significa que él tenga otra pareja o que desee ampliar tus límites sobre él para que le permitas tener otra mujer, pero si es importante ponerse parámetros si en realidad desean mantener su matrimonio, es decir que por ejemplo tu esposo te permite y tu realmente deseas es el goce sexual de otro hombre y no empezar una nueva relación sentimental. Es mi humilde opinión desde mi experiencia personal.

Gracias por tu comentario, ahora veo
que es mucho más común este tipo de relaciones

T
thays_1020359
17/7/18 a las 6:30

Guau, yo no sé si me qtrme vería a eso

speakerjuancho2
speakerjuancho2
17/7/18 a las 15:02
En respuesta a thays_1020359

Gracias por tu comentario, ahora veo
que es mucho más común este tipo de relaciones

Es más común de lo que la gente cree, generalmente en parejas con relaci Mes serias que llevan mucho tiempo compartiendo como pareja, es una forma de salir de la monotonía del matrimonio pero debe ser consensuado y se necesita mucha confianza y estabilidad matrimonial. Definitivamente tampoco es para todo el mundo.

T
thays_1020359
17/7/18 a las 17:48

Tienes razon

Q
qiumei_5840256
17/7/18 a las 18:12
En respuesta a thays_1020359

Mi nombre es Nanci, tengo 30 años, me considero una mujer que trata de cuidar su cuerpo, para lo cual hago natación y gimnasio. Llevo 12 años de casada y tengo un hijo.

Soy maestra desde hace más de 10 años, pero siempre había trabajado en colegios particulares hasta hace un año que decidí realizar mi examen para tratar de ganarme una plaza en una primaria de gobierno, afortunadamente me quede, desafortunadamente estaba la escuela a una hora de mi casa, cosa que si me creaba cierto conflicto, ya que tenía que dejar más tiempo a mi hijo solo en casa, ya que mi esposo también trabaja, y para poder realizar un cambio a una primaria más cercana a mi domicilio tenía que estar de dos a tres años trabajando en la plaza  ir me habían asignado.

Mi trabajo hablaba por mí, y rápidamente me gane a la directora de mi escuela, al grado de contarle que todo me parecía muy bien a excepción de la distancia al trabajo, ella prometía averiguar si podía hacer algo al respecto.

El último viernes de cada mes no hay clases para los niños, ya que nos dan asesorías de supervisión en una escuela designada, el supervisor era un hombre un tanto atractivo, alto, delgado con el cabello un poco canoso y de unos 55 años, a algunas de mis compañeras les atraía este hombre. Las asesorías eran de 1:30 a 6:00 pm, es decir el mismo horario que teníamos de trabajo.

Cierto viernes cuando termino las asesorías en supervisión me disponía a retirarme, se me acerco él supervisión y me pidió que me quedara un momento, porque necesitaba platicar conmigo. Me dijo que la directora de mi escuela le había comentado mi situación de la distancia de mi trabajo con respecto a mi domicilio, me dijo que era algo complicado hacer un cambio antes de los dos años, pero que él podía interceder por mí para lograrlo, que tenía que meter unos documentos y que estaba seguro de que lograría a más tardar en dos meses realizar el cambio de plaza, estaba muy feliz, era la mejor noticia que podía haber escuchado, solo que necesitaba que el próximo viernes le firmara unos documentos y además le anexará mis documentos personales para iniciar el trámite, le dije que él me dijera la hora y yo iría a supervisión a buscarlo, me dijo que prefería invitarme a comer, cambie totalmente mi semblante y le dije en tono de reclamo porque no podía ser en su oficina, me respondió que iba a ser muy sincero conmigo, no es fácil conseguir el cambio, que él tendría que pedir unos favores y que aunado a eso el hecho de que una vez realizado el cambio ya no me volvería a ver, porque también mi supervisión cambiaría, que por lo menos le aceptará una invitación a comer para despedirnos, termino diciendo que no le contestara nada ahorita, que lo pensara y le llamara.

Salí y me fui a mi casa un tanto desconcertada, no sabía si contarle a mi esposo o de plano mandarlo a volar y es qué desde que me case nunca volví a salir con ningún hombre a solas, llegue a mi casa y el sábado por la noche cuando ya estábamos acostados mi esposo y yo, decidí contarle lo que había pasado, pensé que se pondría enojadísimo, pero para mi sorpresa cuando termine de platicarle me dijo que pensaba hacer, le dije que por supuesto no saldría con él, y me volvió a preguntar porque no?, le respondí que yo no me prestaba a esas cosas para conseguir algo, él me dijo que lo pensara muy bien porque realmente no me había insinuado nada, solamente salir a comer con él, después de eso me comenzó a besar y termino haciéndome el amor y cuando estábamos en el acto llego a preguntarme si me gustaba Fernando el supervisor, le respondí que no, volvió a insistir para que le dijera la vedad, lo notaba súper excitado y acabe respondiendo que era atractivo pero hasta ahí, sentí como creció más y me lo hizo con más fuerza, creo que no le desagradaba la idea de que saliera con otro.

El domingo ya no dije nada, pensé en llamar a Fernando el lunes y decirle que gracias por el favor pero que no saldría con él, cuando mi esposo volvió a tocar el tema diciéndome que por él no había ningún problema si salía con Fernando, que era mucho más lo que ganaría que lo que perdería, me dijo piénsalo y le pregunté si en verdad no se molestaría que saliera con él, me dijo que no, es más que le llamara para confirmar que iría con él.

Llame a Fernando estando mi esposo presente, porque quería escuchar la conversación, cuando escucho que era yo se puso feliz él supervisión, le confirme que iría a comer con él, pero que solamente podría ser después de las 6 de la tarde que era cuando yo terminaba mi jornada laboral, me dijo que no había problema por eso, ya que había hablado con la directora para que el próximo viernes me dejara salir a las 3 de la tarde, me moleste un poco porque él estaba seguro que aceptaría salir a comer.

Me dijo que también había una película que anhelaba ver y que, si podía ir con él al cine, le refute que el trato era solo comer, mi esposo se me acerco al oído y me dijo que aceptara, que no pasaba nada y acabe cediendo.

No estaba del todo convencida y estuve algo distante con mi esposo por la situación, y el lunes durante el camino pensé en llamar a Fernando y cancelarle, pero entrando a mi salón estaba en mi escritorio un enorme arreglo floral con una nota en un sobre, entró una compañera al tiempo que leía la tarjeta, era mi mejor amiga y le tenía mucha confianza, me pregunto si eran las flores de mi esposo y le conté lo que me había propuesto el supervisor y que las flores me las había enviado él, le conté que mi esposo me había dado permiso de salir con Fernando y ella me dijo, no seas tonta amiga, si tienes el permiso de tu esposo, aprovecha, además está muy guapo él supervisión y mira el detalle que te trajo, se dio la vuelta y se fue. 

Ya no le llame a Fernando, el me llamo a la hora de mi comida y le agradecí por las flores, pero que consideraba que no estaba bien que me enviara eso, y que se podía prestar a malas interpretaciones, ya que todos sabían que era una mujer casada, el me respondió que solo era un pequeño presente, sin darme cuenta se fueron 20 minutos platicando con él, le dije que ya me tenía que ir.

No le platique a mi esposo de las flores, al día siguiente al entrar a mi salón nuevamente encontré un regalo, está vez no estaba a la vista, era una caja de chocolates, y la tarjeta decía “gracias por aceptar salir conmigo”, nuevamente a las cuatro de la tarde me volvió a llamar para preguntarme si me habían gustado los chocolates, le respondí que me volvían loca pero que no era necesario que hiciera todo esto, nuevamente platicamos por teléfono cerca de 15 minutos, nada de esto le contaba a mi esposo. 

El día miércoles llegue nuevamente A mi salón, pero esta vez no encontré nada espere con ansias las cuatro de la tarde no sé por qué, pero ese día no me llamo tampoco. El día jueves nuevamente al entrar a mi salón, no encontré una bolsa grande, me di cuenta que dentro había unas zapatillas altísimas, una blusa negra semitransparente en la parte de enfrente, una minifalda muy corta, medias, y ropa interior (un brasier negro de media copa, y una tanga de encaje). A las 4 me volvió a llamar y le dije que porque me había enviado eso, me respondió que si por favor podía usar esa ropa el viernes, le dije que no estaba bien, que nunca había salido así vestida ni con mi esposo, termino diciéndome que lo considerara.

Llego el viernes y termine de bañarme, seguía dándome vueltas en la cabeza si usar lo que me había comprado Fernando, o usar un traje sastre, hasta que mi esposo se me acercó para preguntarme si la cita seguía en pie, le contesté que sí, me volvió a preguntar que usaría de ropa, le dije que el traje sastre negro, me dijo que con ese parecía monja y comenzó a reír un poco, me moleste y le dije que entonces le daría una sorpresa, el salió de la recámara y a las 12 del día estaba lista para irme al trabajo, cuando baje y me vio casi se le salen los ojos, pensé que me reclamaría por querer salir así vestida, pero fue todo lo contrario, me dijo que estaba bellísima y que el supervisor se quedaría impactado, me coloqué un saco para tapar un poco lo sugerente de la blusa y me fui al trabajo, antes mi esposo me dijo que ese día le tocaba trabajar y que pasaría a dejar al niño con su mama (él trabaja como trailero).

Al igual que mi esposo, mis compañeros de trabajo se quedaron impresionados al verme así vestida, la verdad al principio me sentí algo incomoda, hasta que mi amiga se me acercó y me dijo que estaba muy guapa y que había causado furor en la escuela. Sinceramente tenía mucho tiempo de no sentirme así, fue entonces que decidí quitarme de complejos y de culpas.

Fernando llego puntual a las tres de la tarde salí del escuela y ya me estaba esperando afuera en su auto, como todo un caballero y bajo y me abrió la puerta del carro no sin antes decirme que estabas muy guapa y que me agradecía mucho el haber aceptado salir con él y además usar la ropa que me había regalado, yo solamente le sonreí y subía su auto.

Me llevó a una zona muy exclusiva de la ciudad cuando llegamos a un restaurant muy elegante rápidamente bajo del auto y volvió abrirme la puerta esta vez me tendió su mano para ayudarme a salir, en verdad se comportaba como todo un caballero y eso a mí me agradaba mucho. Comimos muy rico comenzamos a hablar un poco del tema del cambio de plaza, le entregué mis papeles y firme los documentos que traía, una vez hecho esto él me dijo que era momento de disfrutar la tarde, entonces pago la cuenta y nuevamente me llevó hasta su auto, nos dirigimos hacia unos cines cerca de ahí, y una vez que me abrió nuevamente la puerta del auto debíamos caminar varios metros hasta la sala, fue cuando sentí que con su mano  izquierda me tomó de la cintura para caminar juntos, le dije que no estaba bien eso que nos podíamos ver, Y me dijo que no estábamos haciendo nada malo y no me soltó hasta llegar al cine, compro los boletos y entramos, ya dentro lo note que casi no veía la película, que más atención ponía en mis muslos, le dije que me ponía algo incomoda, el me respondió que si me molestaba, le respondí que tanto como molestarme no, ya que si fuera así no habría accedido a usar falda, entonces me dijo que era imposible no voltear a ver mis piernas, ya que estaban hermosas y además se veían aún mejor con las medias y los tacones tan altos que llevaba, sentí que me puse de mil colores, termino diciendo, me encantan.

Termino la película y pensé que todo había acabado, que me llevaría a mi casa, eran las 9 de la noche, me volvió a tomar de la cintura y me llevo hasta su auto, pero me di cuenta que no íbamos camino a mi casa, llegamos a el bar de un hotel muy lujoso, le dije que ya no podía quedarme más tiempo, que necesitaba que me llevara a mi casa, él me dijo que solo lo acompañara a tomarse una copa y enseguida nos iríamos, no me quedo de otra que aceptar, pidió una mesa en un rincón, donde había un sillón amplio, y estaba un tanto solitaria y con baja luz, antes de sentarme le dije que tenía que avisar a mi esposo, le envié un mensaje diciéndole que llegaría un poco más tarde, el me respondió que no había problema que disfrutara la noche, creo que ese mensaje de mi esposo Fue lo que cambió todo, a partir de ese momento me propuse ya no estar tan a la defensiva con Fernando, me sentía como una jovencita de 20 años, tratando de ser seducida por un hombre.

Antes de sentarme me ayudó a quitarme el saco argumentando que hacía calor, aunque realmente sabía que era para ver mi escote, fue muy amena la plática, me preguntaba de mi matrimonio, de mi hijo, mi trabajo, nos dieron cerca de las 11 de la noche conversando, yo ya me sentía mareada por lo que había estado bebiendo, cuando me di cuenta Fernando ya tenía entre sus manos una de mis piernas, y comenzaba a acariciarla, trate de quitar su mano diciéndole que era casada, me respondió que mis piernas lo estaban volviendo loco, que lo dejara, seguimos conversando y el no dejaba de acariciar mis muslos, me decía que le gustaban muchísimo, poco a poco se me fue acercando hasta que nos comenzamos a besar, el no dejaba de acariciar mis piernas, yo correspondía a sus besos, luego comenzó también a acariciar mis senos por encima de mi blusa, así estuvimos cerca de 15 minutos, hasta que le dije que por favor me llevara a mi casa, me dijo que estaba bien, durante el camino no dejo de agarrar mis piernas en su auto, en los semáforos me besaba. Cuando llegamos, me ayudó a bajar y me acompañó hasta la entrada de mi casa, me abrió la puerta, estaba todo apagado, le agradecí y lo despedí, me pidió un último beso y me jaló hacia él y me comenzó a besar nuevamente en la sala de mi casa, y esta vez bajo sus manos hasta tocar mis nalgas, las agarro como quiso, yo  tenía mis dos manos en su cuello, cuando de repente tomo una de mis manos y la puso en su pene, era enorme, yo también comencé a acariciarlo por encima del pantalón.

Me comenzó a decir muchísimas cosas al oído, que nunca había salido con ninguna mujer tan hermosa, que mi piel era tan suave, que mi boca sabía muy dulce, que olía muy bien y que tenía una nalgas muy duras y redondas, termino preguntando que, si me había puesto la ropa interior que me regalo, y me comenzó a besar nuevamente, al tiempo que acariciaba con más fuerza mis nalgas, me estremecí por primera vez y le respondí que sí, me pregunto para quién?, le respondí: para ti mi amor, estaba excitadísima. 

Me llevo hacia adentro nuevamente, se sentó en el sillón y yo en sus piernas, le dije que ya se fuera, que mi esposo podía bajar, me dijo que él sabía perfectamente que mi esposo no estaba, ya que, si fuera así, desde hace rato ya me hubiera corrido, me siguió besando y acariciando.

Comenzó a quitarme la blusa, luego siguió con la falda, me dijo que me parara enfrente de él, quería verme en ropa interior, comenzó a agarrar mis piernas nuevamente, mis nalgas, yo acariciaba su cabello, luego intercambiamos posiciones, yo me senté en el sillón, y el parado frente a mí, comencé a acariciar su pene, y lo saque de su pantalón y me lo metí en mi boca, comencé a lamerlo suavemente, no podía creer lo que estaba haciendo, con mi esposo era muy difícil que yo tuviera iniciativa al hacerle sexo oral y hasta cierto punto no me gustaba, jugaba con su pene, era enorme.

Me levante, lo agarre de la mano y lo jale hacia mí para besarlo, y mordiéndole suavemente su labio le dije: ya quiero ser tuya, y lo lleve a mi recamara, lo desnude, el me quito el brasier, beso y mordió mis senos, me quito la tanga, me hizo sexo oral unos minutos y después muy lentamente me penetro, gemí como nunca antes lo había hecho, lo disfrute tanto, esa noche lo hicimos dos veces.

Mi esposo regresa en dos días y no sé si contarle, o callármelo.

Fernando me sigue buscando y no sé qué hacer.




           

Saludos,

Que un hombre desee que su esposa lo haga con otro es una fantasia que tenemos que es mas comun de lo que creia, eso lo aprendi en este foro. En mi caso a mi me encantaria que mi esposa lo hiciera con otro y ella lo sabe, pero no se anima. En tu caso se me hace que tu esposo tiene el mismo tipo de fantasia, por eso te empujo a que aceptaras ir a la cita con Fernando, el seguramente debio considerar que era una posibilidad que terminaras en la cama. En mi humilde opinion te diria que le cuentes como te fue y ve analizando su reaccion, si ves que le esta gustando y se emociona puedes ir soltando mas informacion poco a poco, a lo mejor es lo que el buscaba y con eso te daria permiso para que puedas volver a salir con Fernando. Te pregunto, quisieras tener una relacion abierta con tu esposo?, que tu puedas salir con tu amigo y despues le cuentas que fue lo que hicieron?, porque se me hace que eso es lo que el busca.

Contestale a Fernando y dile que necesitas unos dias.

Espero te sirva

T
thays_1020359
17/7/18 a las 18:19
En respuesta a qiumei_5840256

Saludos,

Que un hombre desee que su esposa lo haga con otro es una fantasia que tenemos que es mas comun de lo que creia, eso lo aprendi en este foro. En mi caso a mi me encantaria que mi esposa lo hiciera con otro y ella lo sabe, pero no se anima. En tu caso se me hace que tu esposo tiene el mismo tipo de fantasia, por eso te empujo a que aceptaras ir a la cita con Fernando, el seguramente debio considerar que era una posibilidad que terminaras en la cama. En mi humilde opinion te diria que le cuentes como te fue y ve analizando su reaccion, si ves que le esta gustando y se emociona puedes ir soltando mas informacion poco a poco, a lo mejor es lo que el buscaba y con eso te daria permiso para que puedas volver a salir con Fernando. Te pregunto, quisieras tener una relacion abierta con tu esposo?, que tu puedas salir con tu amigo y despues le cuentas que fue lo que hicieron?, porque se me hace que eso es lo que el busca.

Contestale a Fernando y dile que necesitas unos dias.

Espero te sirva

Muchas gracias. Creo que haré lo que me dices. La verdad amo mucho a mi esposo y me gustaría complacerlo. Pero si el no quiere no

Q
qing_6124230
17/7/18 a las 18:30

Yo te diria que se lo contaras, incluso aunque no le guste, que me huelo que no va a ser el caso, mantener mentiras en la relacion no suele ser bueno. 

T
thays_1020359
17/7/18 a las 18:34
En respuesta a qing_6124230

Yo te diria que se lo contaras, incluso aunque no le guste, que me huelo que no va a ser el caso, mantener mentiras en la relacion no suele ser bueno. 

Estoy de acuerdo contigo 

L
lucica_745067
17/7/18 a las 19:18
En respuesta a thays_1020359

Mi nombre es Nanci, tengo 30 años, me considero una mujer que trata de cuidar su cuerpo, para lo cual hago natación y gimnasio. Llevo 12 años de casada y tengo un hijo.

Soy maestra desde hace más de 10 años, pero siempre había trabajado en colegios particulares hasta hace un año que decidí realizar mi examen para tratar de ganarme una plaza en una primaria de gobierno, afortunadamente me quede, desafortunadamente estaba la escuela a una hora de mi casa, cosa que si me creaba cierto conflicto, ya que tenía que dejar más tiempo a mi hijo solo en casa, ya que mi esposo también trabaja, y para poder realizar un cambio a una primaria más cercana a mi domicilio tenía que estar de dos a tres años trabajando en la plaza  ir me habían asignado.

Mi trabajo hablaba por mí, y rápidamente me gane a la directora de mi escuela, al grado de contarle que todo me parecía muy bien a excepción de la distancia al trabajo, ella prometía averiguar si podía hacer algo al respecto.

El último viernes de cada mes no hay clases para los niños, ya que nos dan asesorías de supervisión en una escuela designada, el supervisor era un hombre un tanto atractivo, alto, delgado con el cabello un poco canoso y de unos 55 años, a algunas de mis compañeras les atraía este hombre. Las asesorías eran de 1:30 a 6:00 pm, es decir el mismo horario que teníamos de trabajo.

Cierto viernes cuando termino las asesorías en supervisión me disponía a retirarme, se me acerco él supervisión y me pidió que me quedara un momento, porque necesitaba platicar conmigo. Me dijo que la directora de mi escuela le había comentado mi situación de la distancia de mi trabajo con respecto a mi domicilio, me dijo que era algo complicado hacer un cambio antes de los dos años, pero que él podía interceder por mí para lograrlo, que tenía que meter unos documentos y que estaba seguro de que lograría a más tardar en dos meses realizar el cambio de plaza, estaba muy feliz, era la mejor noticia que podía haber escuchado, solo que necesitaba que el próximo viernes le firmara unos documentos y además le anexará mis documentos personales para iniciar el trámite, le dije que él me dijera la hora y yo iría a supervisión a buscarlo, me dijo que prefería invitarme a comer, cambie totalmente mi semblante y le dije en tono de reclamo porque no podía ser en su oficina, me respondió que iba a ser muy sincero conmigo, no es fácil conseguir el cambio, que él tendría que pedir unos favores y que aunado a eso el hecho de que una vez realizado el cambio ya no me volvería a ver, porque también mi supervisión cambiaría, que por lo menos le aceptará una invitación a comer para despedirnos, termino diciendo que no le contestara nada ahorita, que lo pensara y le llamara.

Salí y me fui a mi casa un tanto desconcertada, no sabía si contarle a mi esposo o de plano mandarlo a volar y es qué desde que me case nunca volví a salir con ningún hombre a solas, llegue a mi casa y el sábado por la noche cuando ya estábamos acostados mi esposo y yo, decidí contarle lo que había pasado, pensé que se pondría enojadísimo, pero para mi sorpresa cuando termine de platicarle me dijo que pensaba hacer, le dije que por supuesto no saldría con él, y me volvió a preguntar porque no?, le respondí que yo no me prestaba a esas cosas para conseguir algo, él me dijo que lo pensara muy bien porque realmente no me había insinuado nada, solamente salir a comer con él, después de eso me comenzó a besar y termino haciéndome el amor y cuando estábamos en el acto llego a preguntarme si me gustaba Fernando el supervisor, le respondí que no, volvió a insistir para que le dijera la vedad, lo notaba súper excitado y acabe respondiendo que era atractivo pero hasta ahí, sentí como creció más y me lo hizo con más fuerza, creo que no le desagradaba la idea de que saliera con otro.

El domingo ya no dije nada, pensé en llamar a Fernando el lunes y decirle que gracias por el favor pero que no saldría con él, cuando mi esposo volvió a tocar el tema diciéndome que por él no había ningún problema si salía con Fernando, que era mucho más lo que ganaría que lo que perdería, me dijo piénsalo y le pregunté si en verdad no se molestaría que saliera con él, me dijo que no, es más que le llamara para confirmar que iría con él.

Llame a Fernando estando mi esposo presente, porque quería escuchar la conversación, cuando escucho que era yo se puso feliz él supervisión, le confirme que iría a comer con él, pero que solamente podría ser después de las 6 de la tarde que era cuando yo terminaba mi jornada laboral, me dijo que no había problema por eso, ya que había hablado con la directora para que el próximo viernes me dejara salir a las 3 de la tarde, me moleste un poco porque él estaba seguro que aceptaría salir a comer.

Me dijo que también había una película que anhelaba ver y que, si podía ir con él al cine, le refute que el trato era solo comer, mi esposo se me acerco al oído y me dijo que aceptara, que no pasaba nada y acabe cediendo.

No estaba del todo convencida y estuve algo distante con mi esposo por la situación, y el lunes durante el camino pensé en llamar a Fernando y cancelarle, pero entrando a mi salón estaba en mi escritorio un enorme arreglo floral con una nota en un sobre, entró una compañera al tiempo que leía la tarjeta, era mi mejor amiga y le tenía mucha confianza, me pregunto si eran las flores de mi esposo y le conté lo que me había propuesto el supervisor y que las flores me las había enviado él, le conté que mi esposo me había dado permiso de salir con Fernando y ella me dijo, no seas tonta amiga, si tienes el permiso de tu esposo, aprovecha, además está muy guapo él supervisión y mira el detalle que te trajo, se dio la vuelta y se fue. 

Ya no le llame a Fernando, el me llamo a la hora de mi comida y le agradecí por las flores, pero que consideraba que no estaba bien que me enviara eso, y que se podía prestar a malas interpretaciones, ya que todos sabían que era una mujer casada, el me respondió que solo era un pequeño presente, sin darme cuenta se fueron 20 minutos platicando con él, le dije que ya me tenía que ir.

No le platique a mi esposo de las flores, al día siguiente al entrar a mi salón nuevamente encontré un regalo, está vez no estaba a la vista, era una caja de chocolates, y la tarjeta decía “gracias por aceptar salir conmigo”, nuevamente a las cuatro de la tarde me volvió a llamar para preguntarme si me habían gustado los chocolates, le respondí que me volvían loca pero que no era necesario que hiciera todo esto, nuevamente platicamos por teléfono cerca de 15 minutos, nada de esto le contaba a mi esposo. 

El día miércoles llegue nuevamente A mi salón, pero esta vez no encontré nada espere con ansias las cuatro de la tarde no sé por qué, pero ese día no me llamo tampoco. El día jueves nuevamente al entrar a mi salón, no encontré una bolsa grande, me di cuenta que dentro había unas zapatillas altísimas, una blusa negra semitransparente en la parte de enfrente, una minifalda muy corta, medias, y ropa interior (un brasier negro de media copa, y una tanga de encaje). A las 4 me volvió a llamar y le dije que porque me había enviado eso, me respondió que si por favor podía usar esa ropa el viernes, le dije que no estaba bien, que nunca había salido así vestida ni con mi esposo, termino diciéndome que lo considerara.

Llego el viernes y termine de bañarme, seguía dándome vueltas en la cabeza si usar lo que me había comprado Fernando, o usar un traje sastre, hasta que mi esposo se me acercó para preguntarme si la cita seguía en pie, le contesté que sí, me volvió a preguntar que usaría de ropa, le dije que el traje sastre negro, me dijo que con ese parecía monja y comenzó a reír un poco, me moleste y le dije que entonces le daría una sorpresa, el salió de la recámara y a las 12 del día estaba lista para irme al trabajo, cuando baje y me vio casi se le salen los ojos, pensé que me reclamaría por querer salir así vestida, pero fue todo lo contrario, me dijo que estaba bellísima y que el supervisor se quedaría impactado, me coloqué un saco para tapar un poco lo sugerente de la blusa y me fui al trabajo, antes mi esposo me dijo que ese día le tocaba trabajar y que pasaría a dejar al niño con su mama (él trabaja como trailero).

Al igual que mi esposo, mis compañeros de trabajo se quedaron impresionados al verme así vestida, la verdad al principio me sentí algo incomoda, hasta que mi amiga se me acercó y me dijo que estaba muy guapa y que había causado furor en la escuela. Sinceramente tenía mucho tiempo de no sentirme así, fue entonces que decidí quitarme de complejos y de culpas.

Fernando llego puntual a las tres de la tarde salí del escuela y ya me estaba esperando afuera en su auto, como todo un caballero y bajo y me abrió la puerta del carro no sin antes decirme que estabas muy guapa y que me agradecía mucho el haber aceptado salir con él y además usar la ropa que me había regalado, yo solamente le sonreí y subía su auto.

Me llevó a una zona muy exclusiva de la ciudad cuando llegamos a un restaurant muy elegante rápidamente bajo del auto y volvió abrirme la puerta esta vez me tendió su mano para ayudarme a salir, en verdad se comportaba como todo un caballero y eso a mí me agradaba mucho. Comimos muy rico comenzamos a hablar un poco del tema del cambio de plaza, le entregué mis papeles y firme los documentos que traía, una vez hecho esto él me dijo que era momento de disfrutar la tarde, entonces pago la cuenta y nuevamente me llevó hasta su auto, nos dirigimos hacia unos cines cerca de ahí, y una vez que me abrió nuevamente la puerta del auto debíamos caminar varios metros hasta la sala, fue cuando sentí que con su mano  izquierda me tomó de la cintura para caminar juntos, le dije que no estaba bien eso que nos podíamos ver, Y me dijo que no estábamos haciendo nada malo y no me soltó hasta llegar al cine, compro los boletos y entramos, ya dentro lo note que casi no veía la película, que más atención ponía en mis muslos, le dije que me ponía algo incomoda, el me respondió que si me molestaba, le respondí que tanto como molestarme no, ya que si fuera así no habría accedido a usar falda, entonces me dijo que era imposible no voltear a ver mis piernas, ya que estaban hermosas y además se veían aún mejor con las medias y los tacones tan altos que llevaba, sentí que me puse de mil colores, termino diciendo, me encantan.

Termino la película y pensé que todo había acabado, que me llevaría a mi casa, eran las 9 de la noche, me volvió a tomar de la cintura y me llevo hasta su auto, pero me di cuenta que no íbamos camino a mi casa, llegamos a el bar de un hotel muy lujoso, le dije que ya no podía quedarme más tiempo, que necesitaba que me llevara a mi casa, él me dijo que solo lo acompañara a tomarse una copa y enseguida nos iríamos, no me quedo de otra que aceptar, pidió una mesa en un rincón, donde había un sillón amplio, y estaba un tanto solitaria y con baja luz, antes de sentarme le dije que tenía que avisar a mi esposo, le envié un mensaje diciéndole que llegaría un poco más tarde, el me respondió que no había problema que disfrutara la noche, creo que ese mensaje de mi esposo Fue lo que cambió todo, a partir de ese momento me propuse ya no estar tan a la defensiva con Fernando, me sentía como una jovencita de 20 años, tratando de ser seducida por un hombre.

Antes de sentarme me ayudó a quitarme el saco argumentando que hacía calor, aunque realmente sabía que era para ver mi escote, fue muy amena la plática, me preguntaba de mi matrimonio, de mi hijo, mi trabajo, nos dieron cerca de las 11 de la noche conversando, yo ya me sentía mareada por lo que había estado bebiendo, cuando me di cuenta Fernando ya tenía entre sus manos una de mis piernas, y comenzaba a acariciarla, trate de quitar su mano diciéndole que era casada, me respondió que mis piernas lo estaban volviendo loco, que lo dejara, seguimos conversando y el no dejaba de acariciar mis muslos, me decía que le gustaban muchísimo, poco a poco se me fue acercando hasta que nos comenzamos a besar, el no dejaba de acariciar mis piernas, yo correspondía a sus besos, luego comenzó también a acariciar mis senos por encima de mi blusa, así estuvimos cerca de 15 minutos, hasta que le dije que por favor me llevara a mi casa, me dijo que estaba bien, durante el camino no dejo de agarrar mis piernas en su auto, en los semáforos me besaba. Cuando llegamos, me ayudó a bajar y me acompañó hasta la entrada de mi casa, me abrió la puerta, estaba todo apagado, le agradecí y lo despedí, me pidió un último beso y me jaló hacia él y me comenzó a besar nuevamente en la sala de mi casa, y esta vez bajo sus manos hasta tocar mis nalgas, las agarro como quiso, yo  tenía mis dos manos en su cuello, cuando de repente tomo una de mis manos y la puso en su pene, era enorme, yo también comencé a acariciarlo por encima del pantalón.

Me comenzó a decir muchísimas cosas al oído, que nunca había salido con ninguna mujer tan hermosa, que mi piel era tan suave, que mi boca sabía muy dulce, que olía muy bien y que tenía una nalgas muy duras y redondas, termino preguntando que, si me había puesto la ropa interior que me regalo, y me comenzó a besar nuevamente, al tiempo que acariciaba con más fuerza mis nalgas, me estremecí por primera vez y le respondí que sí, me pregunto para quién?, le respondí: para ti mi amor, estaba excitadísima. 

Me llevo hacia adentro nuevamente, se sentó en el sillón y yo en sus piernas, le dije que ya se fuera, que mi esposo podía bajar, me dijo que él sabía perfectamente que mi esposo no estaba, ya que, si fuera así, desde hace rato ya me hubiera corrido, me siguió besando y acariciando.

Comenzó a quitarme la blusa, luego siguió con la falda, me dijo que me parara enfrente de él, quería verme en ropa interior, comenzó a agarrar mis piernas nuevamente, mis nalgas, yo acariciaba su cabello, luego intercambiamos posiciones, yo me senté en el sillón, y el parado frente a mí, comencé a acariciar su pene, y lo saque de su pantalón y me lo metí en mi boca, comencé a lamerlo suavemente, no podía creer lo que estaba haciendo, con mi esposo era muy difícil que yo tuviera iniciativa al hacerle sexo oral y hasta cierto punto no me gustaba, jugaba con su pene, era enorme.

Me levante, lo agarre de la mano y lo jale hacia mí para besarlo, y mordiéndole suavemente su labio le dije: ya quiero ser tuya, y lo lleve a mi recamara, lo desnude, el me quito el brasier, beso y mordió mis senos, me quito la tanga, me hizo sexo oral unos minutos y después muy lentamente me penetro, gemí como nunca antes lo había hecho, lo disfrute tanto, esa noche lo hicimos dos veces.

Mi esposo regresa en dos días y no sé si contarle, o callármelo.

Fernando me sigue buscando y no sé qué hacer.




           

JAJAJA JAJAJ JAJAJAJA POR FAVOR UN PREMIO LITERARIO PARA ESTA BUENA MUJER jajaja

T
thays_1020359
17/7/18 a las 19:49
En respuesta a lucica_745067

JAJAJA JAJAJ JAJAJAJA POR FAVOR UN PREMIO LITERARIO PARA ESTA BUENA MUJER jajaja

Exageras pero gracias 

S
sakira_2936031
17/7/18 a las 19:56
En respuesta a thays_1020359

Mi nombre es Nanci, tengo 30 años, me considero una mujer que trata de cuidar su cuerpo, para lo cual hago natación y gimnasio. Llevo 12 años de casada y tengo un hijo.

Soy maestra desde hace más de 10 años, pero siempre había trabajado en colegios particulares hasta hace un año que decidí realizar mi examen para tratar de ganarme una plaza en una primaria de gobierno, afortunadamente me quede, desafortunadamente estaba la escuela a una hora de mi casa, cosa que si me creaba cierto conflicto, ya que tenía que dejar más tiempo a mi hijo solo en casa, ya que mi esposo también trabaja, y para poder realizar un cambio a una primaria más cercana a mi domicilio tenía que estar de dos a tres años trabajando en la plaza  ir me habían asignado.

Mi trabajo hablaba por mí, y rápidamente me gane a la directora de mi escuela, al grado de contarle que todo me parecía muy bien a excepción de la distancia al trabajo, ella prometía averiguar si podía hacer algo al respecto.

El último viernes de cada mes no hay clases para los niños, ya que nos dan asesorías de supervisión en una escuela designada, el supervisor era un hombre un tanto atractivo, alto, delgado con el cabello un poco canoso y de unos 55 años, a algunas de mis compañeras les atraía este hombre. Las asesorías eran de 1:30 a 6:00 pm, es decir el mismo horario que teníamos de trabajo.

Cierto viernes cuando termino las asesorías en supervisión me disponía a retirarme, se me acerco él supervisión y me pidió que me quedara un momento, porque necesitaba platicar conmigo. Me dijo que la directora de mi escuela le había comentado mi situación de la distancia de mi trabajo con respecto a mi domicilio, me dijo que era algo complicado hacer un cambio antes de los dos años, pero que él podía interceder por mí para lograrlo, que tenía que meter unos documentos y que estaba seguro de que lograría a más tardar en dos meses realizar el cambio de plaza, estaba muy feliz, era la mejor noticia que podía haber escuchado, solo que necesitaba que el próximo viernes le firmara unos documentos y además le anexará mis documentos personales para iniciar el trámite, le dije que él me dijera la hora y yo iría a supervisión a buscarlo, me dijo que prefería invitarme a comer, cambie totalmente mi semblante y le dije en tono de reclamo porque no podía ser en su oficina, me respondió que iba a ser muy sincero conmigo, no es fácil conseguir el cambio, que él tendría que pedir unos favores y que aunado a eso el hecho de que una vez realizado el cambio ya no me volvería a ver, porque también mi supervisión cambiaría, que por lo menos le aceptará una invitación a comer para despedirnos, termino diciendo que no le contestara nada ahorita, que lo pensara y le llamara.

Salí y me fui a mi casa un tanto desconcertada, no sabía si contarle a mi esposo o de plano mandarlo a volar y es qué desde que me case nunca volví a salir con ningún hombre a solas, llegue a mi casa y el sábado por la noche cuando ya estábamos acostados mi esposo y yo, decidí contarle lo que había pasado, pensé que se pondría enojadísimo, pero para mi sorpresa cuando termine de platicarle me dijo que pensaba hacer, le dije que por supuesto no saldría con él, y me volvió a preguntar porque no?, le respondí que yo no me prestaba a esas cosas para conseguir algo, él me dijo que lo pensara muy bien porque realmente no me había insinuado nada, solamente salir a comer con él, después de eso me comenzó a besar y termino haciéndome el amor y cuando estábamos en el acto llego a preguntarme si me gustaba Fernando el supervisor, le respondí que no, volvió a insistir para que le dijera la vedad, lo notaba súper excitado y acabe respondiendo que era atractivo pero hasta ahí, sentí como creció más y me lo hizo con más fuerza, creo que no le desagradaba la idea de que saliera con otro.

El domingo ya no dije nada, pensé en llamar a Fernando el lunes y decirle que gracias por el favor pero que no saldría con él, cuando mi esposo volvió a tocar el tema diciéndome que por él no había ningún problema si salía con Fernando, que era mucho más lo que ganaría que lo que perdería, me dijo piénsalo y le pregunté si en verdad no se molestaría que saliera con él, me dijo que no, es más que le llamara para confirmar que iría con él.

Llame a Fernando estando mi esposo presente, porque quería escuchar la conversación, cuando escucho que era yo se puso feliz él supervisión, le confirme que iría a comer con él, pero que solamente podría ser después de las 6 de la tarde que era cuando yo terminaba mi jornada laboral, me dijo que no había problema por eso, ya que había hablado con la directora para que el próximo viernes me dejara salir a las 3 de la tarde, me moleste un poco porque él estaba seguro que aceptaría salir a comer.

Me dijo que también había una película que anhelaba ver y que, si podía ir con él al cine, le refute que el trato era solo comer, mi esposo se me acerco al oído y me dijo que aceptara, que no pasaba nada y acabe cediendo.

No estaba del todo convencida y estuve algo distante con mi esposo por la situación, y el lunes durante el camino pensé en llamar a Fernando y cancelarle, pero entrando a mi salón estaba en mi escritorio un enorme arreglo floral con una nota en un sobre, entró una compañera al tiempo que leía la tarjeta, era mi mejor amiga y le tenía mucha confianza, me pregunto si eran las flores de mi esposo y le conté lo que me había propuesto el supervisor y que las flores me las había enviado él, le conté que mi esposo me había dado permiso de salir con Fernando y ella me dijo, no seas tonta amiga, si tienes el permiso de tu esposo, aprovecha, además está muy guapo él supervisión y mira el detalle que te trajo, se dio la vuelta y se fue. 

Ya no le llame a Fernando, el me llamo a la hora de mi comida y le agradecí por las flores, pero que consideraba que no estaba bien que me enviara eso, y que se podía prestar a malas interpretaciones, ya que todos sabían que era una mujer casada, el me respondió que solo era un pequeño presente, sin darme cuenta se fueron 20 minutos platicando con él, le dije que ya me tenía que ir.

No le platique a mi esposo de las flores, al día siguiente al entrar a mi salón nuevamente encontré un regalo, está vez no estaba a la vista, era una caja de chocolates, y la tarjeta decía “gracias por aceptar salir conmigo”, nuevamente a las cuatro de la tarde me volvió a llamar para preguntarme si me habían gustado los chocolates, le respondí que me volvían loca pero que no era necesario que hiciera todo esto, nuevamente platicamos por teléfono cerca de 15 minutos, nada de esto le contaba a mi esposo. 

El día miércoles llegue nuevamente A mi salón, pero esta vez no encontré nada espere con ansias las cuatro de la tarde no sé por qué, pero ese día no me llamo tampoco. El día jueves nuevamente al entrar a mi salón, no encontré una bolsa grande, me di cuenta que dentro había unas zapatillas altísimas, una blusa negra semitransparente en la parte de enfrente, una minifalda muy corta, medias, y ropa interior (un brasier negro de media copa, y una tanga de encaje). A las 4 me volvió a llamar y le dije que porque me había enviado eso, me respondió que si por favor podía usar esa ropa el viernes, le dije que no estaba bien, que nunca había salido así vestida ni con mi esposo, termino diciéndome que lo considerara.

Llego el viernes y termine de bañarme, seguía dándome vueltas en la cabeza si usar lo que me había comprado Fernando, o usar un traje sastre, hasta que mi esposo se me acercó para preguntarme si la cita seguía en pie, le contesté que sí, me volvió a preguntar que usaría de ropa, le dije que el traje sastre negro, me dijo que con ese parecía monja y comenzó a reír un poco, me moleste y le dije que entonces le daría una sorpresa, el salió de la recámara y a las 12 del día estaba lista para irme al trabajo, cuando baje y me vio casi se le salen los ojos, pensé que me reclamaría por querer salir así vestida, pero fue todo lo contrario, me dijo que estaba bellísima y que el supervisor se quedaría impactado, me coloqué un saco para tapar un poco lo sugerente de la blusa y me fui al trabajo, antes mi esposo me dijo que ese día le tocaba trabajar y que pasaría a dejar al niño con su mama (él trabaja como trailero).

Al igual que mi esposo, mis compañeros de trabajo se quedaron impresionados al verme así vestida, la verdad al principio me sentí algo incomoda, hasta que mi amiga se me acercó y me dijo que estaba muy guapa y que había causado furor en la escuela. Sinceramente tenía mucho tiempo de no sentirme así, fue entonces que decidí quitarme de complejos y de culpas.

Fernando llego puntual a las tres de la tarde salí del escuela y ya me estaba esperando afuera en su auto, como todo un caballero y bajo y me abrió la puerta del carro no sin antes decirme que estabas muy guapa y que me agradecía mucho el haber aceptado salir con él y además usar la ropa que me había regalado, yo solamente le sonreí y subía su auto.

Me llevó a una zona muy exclusiva de la ciudad cuando llegamos a un restaurant muy elegante rápidamente bajo del auto y volvió abrirme la puerta esta vez me tendió su mano para ayudarme a salir, en verdad se comportaba como todo un caballero y eso a mí me agradaba mucho. Comimos muy rico comenzamos a hablar un poco del tema del cambio de plaza, le entregué mis papeles y firme los documentos que traía, una vez hecho esto él me dijo que era momento de disfrutar la tarde, entonces pago la cuenta y nuevamente me llevó hasta su auto, nos dirigimos hacia unos cines cerca de ahí, y una vez que me abrió nuevamente la puerta del auto debíamos caminar varios metros hasta la sala, fue cuando sentí que con su mano  izquierda me tomó de la cintura para caminar juntos, le dije que no estaba bien eso que nos podíamos ver, Y me dijo que no estábamos haciendo nada malo y no me soltó hasta llegar al cine, compro los boletos y entramos, ya dentro lo note que casi no veía la película, que más atención ponía en mis muslos, le dije que me ponía algo incomoda, el me respondió que si me molestaba, le respondí que tanto como molestarme no, ya que si fuera así no habría accedido a usar falda, entonces me dijo que era imposible no voltear a ver mis piernas, ya que estaban hermosas y además se veían aún mejor con las medias y los tacones tan altos que llevaba, sentí que me puse de mil colores, termino diciendo, me encantan.

Termino la película y pensé que todo había acabado, que me llevaría a mi casa, eran las 9 de la noche, me volvió a tomar de la cintura y me llevo hasta su auto, pero me di cuenta que no íbamos camino a mi casa, llegamos a el bar de un hotel muy lujoso, le dije que ya no podía quedarme más tiempo, que necesitaba que me llevara a mi casa, él me dijo que solo lo acompañara a tomarse una copa y enseguida nos iríamos, no me quedo de otra que aceptar, pidió una mesa en un rincón, donde había un sillón amplio, y estaba un tanto solitaria y con baja luz, antes de sentarme le dije que tenía que avisar a mi esposo, le envié un mensaje diciéndole que llegaría un poco más tarde, el me respondió que no había problema que disfrutara la noche, creo que ese mensaje de mi esposo Fue lo que cambió todo, a partir de ese momento me propuse ya no estar tan a la defensiva con Fernando, me sentía como una jovencita de 20 años, tratando de ser seducida por un hombre.

Antes de sentarme me ayudó a quitarme el saco argumentando que hacía calor, aunque realmente sabía que era para ver mi escote, fue muy amena la plática, me preguntaba de mi matrimonio, de mi hijo, mi trabajo, nos dieron cerca de las 11 de la noche conversando, yo ya me sentía mareada por lo que había estado bebiendo, cuando me di cuenta Fernando ya tenía entre sus manos una de mis piernas, y comenzaba a acariciarla, trate de quitar su mano diciéndole que era casada, me respondió que mis piernas lo estaban volviendo loco, que lo dejara, seguimos conversando y el no dejaba de acariciar mis muslos, me decía que le gustaban muchísimo, poco a poco se me fue acercando hasta que nos comenzamos a besar, el no dejaba de acariciar mis piernas, yo correspondía a sus besos, luego comenzó también a acariciar mis senos por encima de mi blusa, así estuvimos cerca de 15 minutos, hasta que le dije que por favor me llevara a mi casa, me dijo que estaba bien, durante el camino no dejo de agarrar mis piernas en su auto, en los semáforos me besaba. Cuando llegamos, me ayudó a bajar y me acompañó hasta la entrada de mi casa, me abrió la puerta, estaba todo apagado, le agradecí y lo despedí, me pidió un último beso y me jaló hacia él y me comenzó a besar nuevamente en la sala de mi casa, y esta vez bajo sus manos hasta tocar mis nalgas, las agarro como quiso, yo  tenía mis dos manos en su cuello, cuando de repente tomo una de mis manos y la puso en su pene, era enorme, yo también comencé a acariciarlo por encima del pantalón.

Me comenzó a decir muchísimas cosas al oído, que nunca había salido con ninguna mujer tan hermosa, que mi piel era tan suave, que mi boca sabía muy dulce, que olía muy bien y que tenía una nalgas muy duras y redondas, termino preguntando que, si me había puesto la ropa interior que me regalo, y me comenzó a besar nuevamente, al tiempo que acariciaba con más fuerza mis nalgas, me estremecí por primera vez y le respondí que sí, me pregunto para quién?, le respondí: para ti mi amor, estaba excitadísima. 

Me llevo hacia adentro nuevamente, se sentó en el sillón y yo en sus piernas, le dije que ya se fuera, que mi esposo podía bajar, me dijo que él sabía perfectamente que mi esposo no estaba, ya que, si fuera así, desde hace rato ya me hubiera corrido, me siguió besando y acariciando.

Comenzó a quitarme la blusa, luego siguió con la falda, me dijo que me parara enfrente de él, quería verme en ropa interior, comenzó a agarrar mis piernas nuevamente, mis nalgas, yo acariciaba su cabello, luego intercambiamos posiciones, yo me senté en el sillón, y el parado frente a mí, comencé a acariciar su pene, y lo saque de su pantalón y me lo metí en mi boca, comencé a lamerlo suavemente, no podía creer lo que estaba haciendo, con mi esposo era muy difícil que yo tuviera iniciativa al hacerle sexo oral y hasta cierto punto no me gustaba, jugaba con su pene, era enorme.

Me levante, lo agarre de la mano y lo jale hacia mí para besarlo, y mordiéndole suavemente su labio le dije: ya quiero ser tuya, y lo lleve a mi recamara, lo desnude, el me quito el brasier, beso y mordió mis senos, me quito la tanga, me hizo sexo oral unos minutos y después muy lentamente me penetro, gemí como nunca antes lo había hecho, lo disfrute tanto, esa noche lo hicimos dos veces.

Mi esposo regresa en dos días y no sé si contarle, o callármelo.

Fernando me sigue buscando y no sé qué hacer.




           

Muy buena anedocta. La mayoria del tiempo en este tipo de situaciones asi suele suceder. La persona consiguio lo que queria y pues es logico cuando quieres cogerte a alguien el hombre suele hacer todo por tenerte. Si tu no hubieras querido no haigas hecho nada, pero accediste. Tocante a tu matrimonio si amas a tu esposo cuida tu relacion. Solo fue para cambiarte de turno o para seguir cogiendo con el. ?

T
thays_1020359
17/7/18 a las 19:59
En respuesta a sakira_2936031

Muy buena anedocta. La mayoria del tiempo en este tipo de situaciones asi suele suceder. La persona consiguio lo que queria y pues es logico cuando quieres cogerte a alguien el hombre suele hacer todo por tenerte. Si tu no hubieras querido no haigas hecho nada, pero accediste. Tocante a tu matrimonio si amas a tu esposo cuida tu relacion. Solo fue para cambiarte de turno o para seguir cogiendo con el. ?

Gracias 

T
thays_1020359
17/7/18 a las 23:17

Jajajaja eso haré 

Z
zain_6352475
18/7/18 a las 3:08

Es decir que fuiste, lo que se conoce en jerga farisáica, un cornudo transitorio.

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