El sabado en la noche mi esposa se fue a un bar con unas amigas y yo igual sali al ver el futbol con unos amigos, las niñas se suponia que iban a quedarse con una señora que nos las cuida cuando salimos, al menos en eso habiamos quedado, y que el primero que llegara le pagara su plata y la mandara en un taxi, la cosa es que se me prolongo un poco la juerga y llegue a casa entrado en copas a eso de las 2 de la madrugada, todo estaba apagado en casa, pero vi que las niñas estaban dormidas y mi esposa en la cama, pense que había llegado temprano y ya estaba dormida, me quite la ropa y me metí en la cama, me acerque a mi esposa como siempre y comence a acariciarla por las nalgas, ella no opuso resistencia, se volteo y comenzamos a acariciarnos y besarnos, y nos hechamos uno de los mejores polvos de mi vida, ella se movia como una loca y se la pasaba gimiendo, despues del segundo polvo, alguien encendió la luz, no podía ver bien quien era puesta estaba incandilado, cuando al fin logre fijar la vista vi a mi esposa parada junto a la puerta con la cara desencajada, al instante voltee a ver a la mujer que estaba atravesando y era nada mas y nada menos que mi cuñada, hermana gemela de mi esposa, quien se había quedado a cuidar a los niños a petición de ésta. Mi cuñada nos dejo con el paquete y yo no se como explicar mi confusión.
Caliente el relato no tíos. Todo es falso pero e querido imaginar su cara de asombro al continuar leyendo la historia.
Saludos.