Hace ya años que me masturbo casi a diario pensando siempre en la misma persona y con la cual no tengo ni tuve nunca relaciones sexuales. Todo empezó cuando por unas reformas que estaban haciendo en su casa, le ofrecimos que viniese a la nuestra a ducharse. Esto sucedía temprano por la mañana antes de irse para su trabajo, aproximadamente una hora después de haberse ido mi marido y quedar yo sola en casa. Ni bien llegaba lo invitaba con un café que él solía llevar hasta el lavabo y tomarlo allí mientras comenzaba su aseo. Dejaba la puerta entreabierta y así los dos seguíamos charlando de mil cosas. Se afeitaba y cepillaba sus dientes con el torso desnudo. Al terminar, y antes de empezar a quitarse los pantalones, encendía la ducha. Una vez bajo el agua, y con la excusa conmigo misma de que no escuchaba muy bien lo que me decía, yo daba algún toquecito a la puerta para abrirla un poquito más. El corría la cortina de plástico, pero no del todo. Por el rabillo de mi ojo yo veía el movimiento de sus manos al enjabonarse. Y el segundo día que vino me dí cuenta que mientras me hablaba se masturbaba. Su verga inmensa alcanzaba a sobresalir de la cortina que tapaba casi todo su cuerpo y su cara. Esto empezó a excitarme muchísimo. Yo me esforzaba por verlo mejor. Nuestra conversación se hacía tenue casi inaudible. Cuando se corría yo podía ver perfectamente como su leche saltaba con fuerza contra la pared que él tenía de frente a sí en la bañera. Al sentir mi braga empapada, yo con disimulo me retiraba unos pasos y dejábamos de hablar.
Esto se repitió una y otra vez durante varios días, con las variante de que yo trataba de fijar cada vez más mi vista sobre su pene en el momento que se pajeaba. Recuerdo que en una oportunidad y versando la charla que manteníamos sobre el medicamento que el médico el día anterior me había precripto, le dije si podía entrar para mostrarle el envase. Lo hice casi tomándolo por sorpresa, por lo que él no atinó a quitar su mano derecha con la que apretaba tan fuertemente su verga. Con la izquierda miraba el envase mientras yo no podía quitar mis ojos de su miembro erecto, rojo y tan grandote. La situación duró no más de un minuto, pero lo suficiente como para que yo tuviese un orgasmo estremecedor que no pude contener y que por supuesto él no percibió. Cada vez más, cuando él se iba yo empecé a masturbarme en la cama totalmente desnuda. Cada vez con más intensidad, alcanzando dos o tres orgasmos seguidos. Mi fantasía al hacerme la paja siempre es la misma: pienso en su verga, en su tamaño, en el detalle de su forma, en la masturbación que él se hace casi delante mío, pienso repetidas veces en la escena de cuando le llevé el medicamento e imagino que mis manos toman su inmenso pene y soy yo entonces quien le hace la paja. Muchas veces también me masturbo con esa misma fantasía cuando me ducho y me imagino que es él quien está detrás de la puerta del baño y le veo su miembro empalmado. Mi marido no sabe nada de todo esto, pero ya hace años que mi fantasía es invariablemente acerca de esta persona. Muchas veces pienso que él sale del baño y viene a mi habitación que está al lado y que me folla desesperadamente de mil maneras diferentes. Estando con las piernas tan pero tan abiertas como las abro cuando me masturbo, me encantaria que él llegase en ese momento, se quitase los pantalones como se los quita en el baño y me penetrase...
Infinidad de veces también pienso que es él quien me folla cuando estoy con mi marido...En fin...No me lo puedo quitar de la cabeza...
Quisiera saber si esta "fijación" es normal. Muchas veces se me da por pensar que para quitármela lo que tendría que hacer es buscarlo y acostarme con él. Seducirlo. Quitarme como quien dice las ganas. Pero temo por la estabilidad de mi matrimonio. Creo que sería muy peligroso. Quizás mucho peor el remedio que la enfermedad. ¿Les sucede esto a otras mujeres? ¿Como se quita esta idea fija? ¿Practicando tal vez nuevas técnicas de sexo con mi marido? Hace poco que tengo Internet. Veo que hay muchísima guarrada sobre el tema masturbación. Pero no hay nada casi en absoluto, sobre las fantasías femeninas reales durante la masturbación. Tengo la esperanza de poder en este foro intercambiar alguna experiencia sincera que me ayude.