Huye
Huye, por favor; no va a mejorar, sino lo contrario.
Estoy llorando al leer lo que escribes. Me gustaría tener tu fuerza para escribir ordenadamente lo que a mí me sucede, sin miedo a lo que piensen los demás. Pero escucha: esta última frase tuya me ha dejado helada; si no huyes, terminarás echa un destrozo, sólo desearás descansar, desaparecer, dormir o morirte TODO EL TIEMPO. Luego va a ser muy difícil que salgas de ésta.